Cardenal Marc Ouellet: “El laicismo quiere extirpar de la cultura al Dios de la Biblia”
El Prefecto de la Congregación vaticana para los Obispos, cardenal Marc Ouellet, señaló que el laicismo actual, especialmente en Europa, pretende relativizar la Biblia hasta el punto de disolverla en una especie de “pluralismo religioso” y así hacerla “desaparecer como referente cultural normativo”.
El cardenal canadiense pronunció la ponencia “La Sagrada Escritura en la Iglesia” el 7 de febrero en el marco del Congreso que lleva el mismo nombre, organizado por la Conferencia Episcopal Española como parte de la presentación de una traducción oficial de la Biblia en el país.
En su conferencia basada en la exhortación apostólica post sinodal Verbum Domini del Papa Benedicto XVI, el Cardenal resaltó las raíces cristianas del Viejo Continente y el hecho de que la Biblia ha modelado “el alma de Europa, su historia y su vida cotidiana”. Sin embargo, advirtió, “en las últimas décadas una profunda crisis sacude los cimientos de la cultura europea. Una nueva razón de estado impone su ley y trata de relegar a un segundo plano las raíces cristinas de Europa”.
“Pareciera que en nombre de la laicidad, la Biblia debería ser relativizada, para disolverse en un pluralismo religiosos y desparecer como referente cultural normativo”, alertó.
Esta crisis, dijo el cardenal, “también ha penetrado en el interior de la Iglesia, ya que cierta exégesis (interpretación bíblica) racionalista se ha apoderado de la Biblia para disecar las diversas etapas y formas de su composición humana, eliminando los prodigios y milagros, multiplicando las hipótesis y sembrando, no pocas veces, la confusión entre los fieles”.
“En algunos círculos académicos existe la tentación de practicar la exégesis haciendo abstracción de la fe, en aras de una mayor objetividad científica. Esta actitud es falsa y nociva incluso desde el punto de vista científico”, agregó.
“No se puede pretender interpretar ‘científicamente’ la Escritura, independientemente de la fe de la Iglesia, ya que la Escritura es la expresión histórica y normativa de la fe”.
“Puesto que es el Libro de la fe -continuó- la Biblia debe leerse teniendo en cuenta la analogía de la fe, es decir, distinguiendo entre sus niveles de expresión y su coherencia interna, pues no se puede interpretar la Biblia con rigor y exactitud sino desde la totalidad de la fe de la Iglesia”.
El cardenal recordó luego que en la Verbum Domini, el Papa señala que “en definitiva donde la exégesis no es teología y viceversa, donde la teología no es esencialmente interpretación de la Escritura de la Iglesia, esta teología no tiene fundamentos”.
El Prefecto para la Congregación para los Obispos afirmó también que “hoy como ayer, este anuncio encuentra resistencias y rechazos, de tal suerte que el testimonio de los cristianos puede llegar hasta el martirio”.
“Este testimonio de los creyentes confirma y amplía el testimonio que el Espíritu de Dios da, en las Sagradas Escrituras, de Jesucristo, crucificado y glorificado. El testimonio de la sangre crece en nuestros días en presencia de fuerzas contrarias que pretenden marginar el cristianismo en la sociedad o cuestionar su reivindicación de la Verdad en nombre de una ética planetaria de diálogo y de tolerancia”.
Para el cardenal Ouellet, “la exhortación apostólica post sinodal Verbum Domini confirma el impulso de la nueva evangelización, invitando a Pastores, fieles y expertos en la Bbilia a encontrar de nuevo la Palabra divina en las palabras humanas del texto sagrado”.
Este documento, prosiguió, “propone un cambio de paradigma en la relación entre Iglesia y Sagrada Escritura: una relación más contemplativa en el sentido de la preponderancia del Espíritu sobre la letra según San Pablo”.
Finalmente resaltó que “este cambio supone una interpretación eclesial de la Escritura en la fe, una escucha orante y asidua de Dios que habla a través del texto sagrado, un enriquecimiento teológico de la exégesis, todo ello para ayudar al Pueblo de Dios a encontrar a Cristo en la Sagrada Escritura”.
LAS RAICES CRISTIANAS DE EUROPA LAICA: El cristianismo se inició como un movimiento laico en las provincias greco romanas. La Epístola apócrifa de los Hechos de Felipe, expone al cristianismo como continuación de la educación en los valores de la paideia griega, que tenía como propósito educar a la juventud en la virtud (desarrollo de la espiritualidad) y la sabiduría (cuidado de la verdad), mediante la práctica continua de ejercicios espirituales (cultivo de sí), a efecto de prevenir y curar las enfermedades del alma. El educador utilizando el discurso filosófico, más que informar trataba de inducir transformaciones buenas y convenientes… Leer más »