Con Rafael Montesinos, Estepona cuenta con un buen político: un político que encarna una de las mejores acepciones de la política, aquella que consiste en la representanción de las necesidades e intereses de un pueblo. Tras la convulsa historia de Estepona, con tres de sus últimos cuatro alcaldes encarcelados en los últimos diez años, edifica poder escribir que Estepona cuenta con un puntual cumplidor de su tarea política: los intereses de sus vecinos, la rendición precisa de cuentas, la señalación de objetivos y el repaso de resultados.

Empresario de hostelería con un importante bagaje curricular a sus espaldas, Rafael Montesinos puede presumir de haber sido sido siempre fiel al ideario centrista liderado por Adolfo Suárez. Actual hombre fuerte del CDS en la provincia de Málaga y candidato a la Alcaldía de Estepona, Montesinos ha sabido infundir un espíritu de entrega a la causa del centrismo, que le ha supuesto sacrificios personales enormes para la mayoría de los empresarios, y aun renuncias de ambiciones profesionales y vocacionales que se considerarían legítimas en otras profesiones.

Recuerda con nostalgia entreverada de orgullo sus primeros pasos en política en el CDS del año 87, con Adolfo Suárez como su líder. Su ejecutoria política estuvo marcada por su adhesión al primer presidente de la democracia española, hasta tal punto que la dimisión de Suárez al frente del CDS supuso también su marcha del partido. Pasó a integrar las filas del Partido Andalucista hasta 2007, donde fue miembro del comité nacional de dicha formación.

En 2010 pasó nuevamente a formar parte del CDS. En la actualidad es concejal del Ayuntamiento de Estepona y ostenta el cargo de secretario provincial en Málaga del partido fundado por Suárez.

En cuanto a su responsabilidad política presente, le preocupa sobre todo dos golpes graves al bienestar turístico de la provincia malagueña: La inexistencia de una red integral de saneamiento y los problemas de infraestructuras que arrastra el sector. En este sentido mantiene Montesinos una tesonera campaña de alerta sobre la dependencia vital que la provincia de Málaga tiene respecto del turismo. “Al ser la Costa del Sol un destino turístico de más de 50 años, debería estar más protegida por todas las administraciones, ya que en el arco del Mediterráneo están creciento nuevos destinos que nos hacen la competencia. Si en la provincia vivimos del turismo es incompresible como todavía, en pleno siglo XXI, no tenemos finalizado el saneamiento integral de la Costa del Sol”.

El dirigente centrista advierte de la incompatibilidad entre un turismo de calidad y las deficiencias infraestructurales que arrastra la Costa. Y un apunte al respecto: “Las promesas de ampliación de las depuradoras han durado más de diez años, pero para cuando terminen definitivamente, serán los colectores los que no puedan absorver el incremento en la capacidad de canalización de las aguas fecales y la de las lluvias durante las avalanchas pluviométricas del invierno, que finalmente van a parar al mar produciendo en verano las tristemente famosas ‘natas’. El impacto medioambiental para nuestro ecosistema marino es inmenso y todos, turistas y residentes, nos encontramos en verano con unas aguas sucias que no invitan al baño”.

Por lo anterior, el CDS pide la puesta en marcha de un comité que cuente con representantes de cada municipio costasoleño para “el reforzamiento de nuestra marca, así como la puesta en servicio de la segunda canalización de la red integral de saneamiento del litoral, disponiendo los emisarios submarinos de la longitud y profundidad que contempla la ley (1 km de distancia desde la orilla) y evitar que nuestras playas, tarjeta de visita para nuestros turistas, sigan sufriendo la incompetencia de quienes nos administra”.

Por lo que se refiere a sus planes políticos para la provincia, Montesinos pone sus objetivos en la promoción de la marca centrista frenta a la polarización de PSOE y PP. “Centrar la política malagueña” constituye su principal razón política al frente del CDS. Defiende así mismo la potenciación y desarrollo de otros sectores productivos que diversifiquen la oferta económica malagueña. Con Montesinos no sólo recupera Estepona un buen político, sino que consigue toda Málaga un excelente representante de sus intereses vitales. En este momento de España agobiada por la crisis y por los casos de corrupción política, no es mala cosa poder decir: Hablamos de un esteponero reconocido, un político honrado, un centrista cabal y un empresario que prestigia la marca turística de la Costa del Sol dentro y fuera de la provincia.