El Real Madrid se reencuentra a costa de un gris Barcelona
El Real Madrid de baloncesto se impuso por un contundente 97-73 al FC Barcelona en un clásico europeo que ha supuesto un golpe importante en la clasificación para cuartos de final, donde los blancos parece que no tendrán problema para obtener ventaja de campo.
Y es que a priori el duelo sólo iba a servir para eso. El que ganara tendría más cerca el jugar como local la vuelta de los cuartos de final de la Euroliga, pero lo cierto es que iba más allá. El choque, entre los dos máximos rivales del baloncesto español y dos de los mejores equipos de Europa, medía a dos conjuntos que no venían ofreciendo su mejor versión. Después de muchos años sufriendo en la liga regular, los blancos parecían haberse olvidado de defender y los culés llegaban siendo incapaces de ganar fuera de casa. Pues bien, unos cambiaron su dinámica y otros no.
Fueron los blancos los que desde el primer momento demostraron que quieren volver a formar parte de las apuestas de baloncesto más importantes del panorama europeo, siempre desde la defensa. Recuperaron esa sensación de equipo solidario, de un ritmo frenético y de un talento indudable. Intensidad en cada emparejamiento, cambios constantes en defensa y, en definitiva, una activación defensiva que permitió cerrar el agujero que venían teniendo en el rebote y correr más de lo que lo venía haciendo. Más cerca del mejor Madrid de la pasada temporada.
El FC Barcelona, una caricatura del que se impuso en el Palau a los blancos hace tan sólo cinco semanas en Liga Endesa. Desacertado, desenchufado y sin constancia, fue vapuleado por un Real Madrid espoleado por el Palacio. Rudy, con 22 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias para 38 de valoración firmó una actuación estelar apoyado por un Sergio Rodríguez brillante y unos Ayón, Llull, Felipe Reyes y Nocioni que cumplieron con su función de escuderos tanto en anotación como en el rebote.
Las diferencias se establecieron desde el primer cuarto. En ese período Rudy encabezó un parcial de 10-0 que ya manejarían los de Laso durante todo el encuentro. Con momentos mejores y peores, las máximas diferencias comenzaron a aparecer en el tercer cuarto con un 66-53 que atisbaba una victoria madridista importante, que incluso asegura el basket average de cara al partido en el Palau gracias a esa importante renta de +24 que alcanzaron los locales. Cabe destacar la presencia de nuevo de un Marcus Slaughter que parecía olvidado por Laso pero que está volviendo a contar aportando cosas interesantes al juego madridista, especialmente a niveles de intensidad. Desde mi punto de vista, el americano es un jugador fundamental en lo anímico.
En definitiva, un clásico europeo que abrió heridas en Barcelona y las curó en Madrid. Ahora, queda por ver cómo se decide el grupo en la Euroliga. Los blancos están empatados con el Maccabi al frente de la tabla con un parcial de 5-1 mientras que los culés se sitúan con un peligroso 3-3 sin haber conseguido ganar todavía fuera de casa. Quedar fuera, aunque parezca poco probable, sería un auténtico fracaso para los de Xavi Pascual.