La crónica de Jesús Cascón: Copa en la bemol
Por Jesús Cascón.- El 30 de mayo se jugará la final de la Copa de Su Majestad el Rey, y en ese partido se darán cita los clubes con mayor presencia de este trofeo en sus vitrinas. El FC Barcelona la ha ganado 26 veces, mientras que el Athletic Club de Bilbao lo hizo en 23 ocasiones. Ambos han estado presentes en la final el mismo número de veces: 37. Alguien pensará que ya es mala suerte que el trofeo que más representa a la Monarquía patria esté acaparado por dos clubes pertenecientes a dos Comunidades en las que eso del patriotismo hispano y la Casa Real no son muy bien acogidos, pero no podemos olvidar que esto es fútbol, un deporte. Si me apuran, el titulillo que le damos a las competiciones pasa a un segundo plano. Ya me dirán cuántos jugadores o cuántos aficionados tienen abierta una cuenta en el BBVA, entidad que patrocina la Primera División española. Puritita anécdota.
Desde que se conocieron los contendientes de la final he escuchado una estratosférica cantidad de memeces que, evidentemente, merecen un comentario, toda vez que volvemos a confundir fútbol con política, metemos en la batidora independencia, monarquía, patriotismo y demás condicionantes sociales que, mezclados, ofrecen una imagen nada real de lo que nos ocupa que, insisto, es el deporte. Son dos clubes de fútbol y juegan al fútbol. Con todo, es normal que resulte chocante que algunos jugadores que han declarado abiertamente estar de acuerdo con un proceso independentista quieran obtener un título con este nombre.
No olvidemos que a este trofeo también se le llama Copa de España, ya que representa a los equipos españoles en el concierto europeo como complemento a los que disputan la Champions. Antiguamente, el campeón de Copa jugaba la ya desaparecida Copa de Europa de Campeones de Copa (Recopa), que tenía bastante prestigio, como muchos de ustedes saben. Hoy por hoy, ser campeón de este trofeo te otorga plaza en Europa y, además, ganarlo hace que sumes un entorchado más durante la temporada.
Muchos de los que temen que la final se convierta en un bochornoso espectáculo de silbidos contra el himno (y el Rey Felipe VI) han abierto la boca, y otros muchos que aplauden esa acción también han expresado sus opiniones. Y en ambos bandos detecto hipocresía, falta de rigor y un chorreo de expresiones que contribuyen a desvirtuar la realidad. Entre los defensores del himno, Esperanza Aguirre o Javier Tebas, que abogan por suspender el partido si se silba la Marcha Real. Es una soplaguindez, ya que los aficionados tienen todo el derecho del mundo a expresar su conformidad o disconformidad con lo que deseen, ya que para eso vivimos en democracia, y decirle a la gente lo que puede aplaudir o criticar es una forma demasiado torticera de censura. Los que opinan al contrario, curiosamente, no propugnan que se elimine el himno antes del partido ni piden que deje de llamarse Copa del Rey (lo cual tendría sentido), sino que se centran en su legitimidad para protestar sobre un estado de cosas que no casa con sus deseos de independencia y separación del Estado español.
Hay quien piensa que el fútbol se ha politizado. Es más que eso: se ha politizado cualquier cosa que sea noticia, cualquier escenario que aparezca en los medios, y esto lo han aprovechado quienes no tienen respeto por nuestro himno y nuestra bandera. Son símbolos de una herencia milenaria, de un país que ahora no posee valores fortalecidos, por aquello de la crisis y las desigualdades sociales, pero guste o no guste son nuestros valores, y al igual que cualquiera pueda respetar que un grupo de ciudadanos quieran la independencia, se puede respetar unos símbolos con los que no se comulgue, porque una cosa es el respeto y otra la connivencia. Entiendo a los que no les guste el son de la Marcha Real ni la Monarquía, pero también entiendo a los que creen que abuchear estas cosas es una cuestión de educación, de mala educación. Borregos hay en todas partes, pero en las gradas de un estadio de fútbol los encuentras a miles. En otras latitudes, el sonido del himno nacional es momento sacro, pero evidentemente en esos países no tienen el festival que tenemos aquí montado.
Mientras, los “coletistas” siguen fomentando el odio y el desprecio por nuestra bandera, y se frotarán las manos esa noche cuando los pitos y los abucheos silencien los sones de la Marcha Real. Esos que se refieren al actual panorama político con el eufemismo de “régimen del 78” no contribuyen con sus palabras a la unidad de los ciudadanos frente a la injusticia; más bien todo lo contrario: al cisma, a la separación y a la bronca. Si miras hacia todas partes y no ves más que a corruptos y a aprovechados, lucha contra eso, no contra una bandera que te ha permitido, entre otras cosas, vivir en libertad y democracia desde esa fecha. Y si confundimos fútbol con política, a lo mejor habría que plantearse el temario en algunas facultades, donde se enseña demasiado ideario revolucionario y poca realidad. Muchos dicen sandeces, pero pocos son sensatos, y estos no son una excepción.
Por cierto: demasiadas opiniones para un tema, el de los abucheos, que al final tendrá más polémica de la cuenta cuando en Televisión Española quiten el sonido ambiente para que no se oiga a los alborotadores. Viva la Democracia.
mucho subnormales por unas putas banderas y un himno que no sirven para nada . hay otras cosas por que preocuparse mas importantes que un partido de futbol
” Con todo, es normal que resulte chocante que algunos jugadores que han declarado abiertamente estar de acuerdo con un proceso independentista quieran obtener un título con este nombre.”
No quieren el título, quieren el dinero, y asegurarse una plaza para otro torneo que si les interesa, el siguiente año.
NO hay que olvidad la historia pero si hay que separarla de la manipulacion progresita,como la guerra civil y la república, un hecho del pasado en extremo relevante para entender las políticas actuales. Pero todavía le quedan resabios de viejos mitos, los creados por la propaganda comunista en primer lugar. Los inquierdistas y separatistas,toda la pantonima progresista y los derechoides liberticidas afirma que “la mayor culpa y la responsabilidad más alta de aquella tragedia la tuvieron quienes levantaron las armas contra el legítimo Gobierno”. En esta cuestión, la de la legitimidad, radica el punto decisivo en torno a la guerra… Leer más »
La foto que encabeza la noticia parece sacada de una revista de Atapuerca.
¡¡¡Por Diossssssss…!
¡Claro está…!: Me refiero al “señor” atapuerquense…
Un rey no querido por su pueblo será el rey de su casa, si su reina lo permita, y ya.
Hola Peggy
¿otra vez tú por aquí?
Aquí te pongo algo sobre tú compañera rojilla.
La reina Letizia flirteando infiel a su esposo Felipe VI | Flechazo cómp…: https://youtu.be/aFLSTIGUauk
ya veo… la única solución para esto que llamamos España es:
primero: lobotomizar a media España para que como zombis digan viva Egpaña, viva la marcha y viva la bandera
segundo: obligar mediante decreto que todos adoremos la bandera como a Jesús, la marcha como a Maria y a España como a la Meca
y todos tan felices obligaos y lobotomizaos… y todo para que los 4 fachas no se ofendan cuando alguien exprese desafección mediante un simple gesto silvo
yo afirmo que sois unos enfermos taraos, antiespañoles y antiespaña, y por supuesto pecadores del abismo, más claro?
Si se quitara el futbol
¿que pasaría?
habría humanidad
“ya me entendéis”
Como siempre, afirmo que hay dos soluciones. La primera, ignorar los silbidos y abucheos. Pero retransmitirlos con normalidad por Televisión Española, mientras suena el Himno Nacional incluso. E inmediatamente dar inicio al partido y aquí no ha pasado nada. Y la segunda, disponer las fuerzas antidisturbios suficientes y, tan pronto como se oiga el primer silbato, prorrumpir en las gradas y desalojar a esta gentuza a golpe de porra, suspender el partido y, a medida que vayan saliendo del estadio, identificación de cada uno de ellos y detención del que se ponga tonto. Como se haría en cualquier país desacomplejado.… Leer más »
Un club de fútbol que permite a seguidores de esta ralea,debe ser expulsado de inmediato de la liga nacional
¡QUE DIGO!
¡PECADO MORTAL!
EL ESPÍRITU DEL PESETERISMO
¡JAMAS LO PERMITIRÁ!
hay que ser gilipollas para seguir a esos clubes y decir con toda la cara dura,”soy español”,por cierto,yo personalmente he puesto de gilipollas a muchos de esos y muchos ni pío y otros se han cabreado, “pero” ,mucha agua,mucho ajo y sobre todo mucha resina,yo era del Madrid (de aquella manera,españoles ¿por donde andais?) pero desde lo de la cruz,que les den mucho por culo mientras tengan al guarro florentiniano.
No puedo evitar
ni quiero evitar
decirle a usted
“querido articulista”
LA CASCA BASTANTE CASCÓN
libertad de expresión,pura y dura.
A mi me importa un carajo,por no decir algo muchísimo mas grueso,que ese ganado porcino pite al borbon,lo que me indigna es que se pite al himno de España y a la bandera de España*. “Vivir en libertad y democracia” si usted lo dice “sera así” Los patriotas no contribuimos a ninguna separación**, los únicos que se han dedicado siempre a tal fin y lo siguen haciendo,son los cerdos separatistas,protegidos por la mierdocracia. (*)bandera a medias,la verdadera es otra,pero bueno,”es lo que hay”. (**) ¿que son unos pocos de idiotas descerebrados sueltos en comparación a mas de un millón de… Leer más »
Para empezar no tiene sentido pitar al himno y al jefe del estado español(El rey en este caso, al margen de considerarse monárquico o no considerarse) y por otro lado jugar la copa de España(Del rey) y la liga española de fútbol, es pura hipocresía e irracionalidad, son ellos los que se contradicen, la demagogia separatista, esa es la paradoja, que sería de estos clubes de fútbol(El barça y el athletic) sin la liga española de fútbol y la copa del rey, no serían nada, se reducirían a la nada. Precisamente lo que tienen que hacer los que pitan al… Leer más »
Estos cerdos lo único que hacen es aprovecharse una y otra vez de la cretinez terminal del pueblo español,que mierda le importa a un cerdo separatista que tú o yo pensemos que son hipocritas,lo que si piensan es que tragamos toda la mierda que nos echan y se parten el culo de la risa,si España traga ¿por que parar entonces? Como cuando mataron a Miguel Ángel Blanco manos con pinturitas y “mira nuestras manos,nosotros no matamos” con ratas separatistas no hay nada de que hablar,nada de que negociar,nada que ceder,o les haces frente o te comen “democracia” a seguir tragando… Leer más »
Yo jamas he querido este sistema desde que tengo uso de razón,el que lo quiera que no se queje de que se putea a España,democracia y destrucción de España es la misma maldita cosa YO NO HE VOTADO EN MI VIDA ¡PUEDE HABER MAYOR PROTESTA! por desgracia desde la muerte de Franco no ha habido un partido patriota ni con la mas mínima posibilidad de llegar al poder,ya visteis lo que le hicieron al grandisimo patriota español,al hombre de honor que era Don Blas Piñar,lo traicionaron vilmente a mas no poder, ya hasta el fútbol es una mierda por que… Leer más »
Aunque en el fútbol se refleje la podredumbre separatista, el fútbol no deja de ser un reflejo de las masas, masas que en poco o nada han cambiado respecto a esas que en el Coliseo romano se desgañitaban guiados por su más baja condición e irracionalidad. Pan y circo. *La masa, por su naturaleza de masa y más en un sistema 100% alienante como el actual, siempre es, visceral, simple y bastante fácil de encauzar, y en Cataluña y Vascongadas sus oligarquías regionales lo han sabido explotar muy bien para su exclusivo beneficio de clase(aunque no hubiera sido posible sin… Leer más »
Ese es el problema, el fútbol está corrompido por el dinero y por la politización(Nunca ha estado tan politizado), tanta culpa tienen las oligarquías de Catalunya y Vascongadas que como bien dices han explotado muy bien el adoctrinamiento y el borreguismo de sus respectivos pueblos para defender intereses de clase, pero claro de esto han sido muy culpables los gobiernos centrales(Llámalo oligarquía nacional), es un complot para tener a este país dividido y debilitado mientras que ellos se reparten el pastel a costa del contribuyente.