¿Se puede otorgar la máxima distinción a quien tensó la relación con España hasta el borde de un conflicto armado? Cuatro meses después, el Gobierno da explicaciones por esa ocurrencia en una respuesta parlamentaria adelantada por Cope. Únicamente al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero se le pudo ocurrir condecorar con la Gran Cruz de Carlos III al responsable de la invasión de Perejil. Ni corto ni perezoso, el Consejo de Ministros concedió el pasado mes de octubre tan alto honor a Driss Jettou, ex primer ministro y ex titular del Interior del Reino de Marruecos.El islote fue ocupado en julio de 2002 por fuerzas dependientes orgánicamente de Jettou.

El Real Decreto 1302/2010 por el que se otorgó la Gran Cruz de la Orden al ex primer ministro marroquí no hacía ninguna referencia a qué méritos tenía el beneficiario o qué buenas acciones en beneficio de España o la Corona española pudo haber realizado.

El Gobierno ha tardado cuatro meses en explicarlos al Grupo Popular. Lo ha hecho en una respuesta parlamentaria: Driss Jettou se ha distinguido por haber intensificado la colaboración con España en los ámbitos propios de su responsabilidad como Ministro del Interior y fruto de esta labor fue el refuerzo de la cooperación policial en la lucha contra la inmigración ilegal, el tráfico de drogas y el terrorismo”.

Asimismo, “gracias a su impulso, se inició el control de la llegada masiva de embarcaciones a nuestras costas y se pusieron las bases para el control de los flujos migratorios no autorizados, que han descendido a mínimos históricos en la actualidad”.

“A partir de 2002 y hasta 2008, en su calidad de Primer Ministro, el señor Jettou demostró de nuevo gran capacidad de interlocución con el gobierno español, esforzándose por mejorar la relación bilateral entre España y Marruecos”.

Durante ese periodo, asevera el Gobierno, “se abrieron sin contrapartidas los caladeros marroquíes a los pescadores españoles afectados por la catástrofe del Prestige, se normalizó la relación empresarial entre ambos países y se inició un diálogo constructivo. El señor Jettou se ha esforzado por lograr que las relaciones bilaterales reflejen la voluntad de crear una asociación estratégica entre ambos países”.

Por esas razones, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero considera que Driss Jettou ha sido “un interlocutor comprometido y dedicado, merecedor de distinción de la Cruz de la Orden de Carlos III”. Dicha condecoración, por cierto, fue establecida por este Monarca, mediante Real Cédula de 19 de septiembre de 1771 con la finalidad de condecorar a quienes se hubiesen destacado especialmente por sus buenas acciones en beneficio de España y la Corona.