‘El discurso del rey’ se convierte en la triunfadora de los Oscar
‘El discurso del rey’, una película diseñada al milímetro para ganar el Oscar y promocionada hasta la saciedad, ha obtenido cuatro estatuillas, entre ellas la de mejor película, director y guión original, cumpliendo con ello los pronósticos que la situaban como la gran favorita de la noche. Su protagonista, Colin Firth, que interpreta al rey tartamudo Jorge VI en el momento en el que se prepara para dar un mensaje vital a la nación, ha arrebatado el premio al mejor actor a Javier Bardem, nominado por su papel en ‘Biutiful’ y acompañado en el Teatro Kodak por Penélope Cruz.
La cinta del londinense Tom Hooper, director de la serie de televisión ‘Elizabeth I’, es un canto a la monarquía británica con base teatral y ese aire clásico que tanto gusta a los académicos de Hollywood más nostálgicos. Funciona gracias al gran duelo actoral entre Firth y Geoffrey Rush, que encarna al logopeda que debe ayudar al monarca a superar sus problemas de dicción.
Su triunfo, al que acompañará una lluvia de dólares, sacia por este año la enorme ambición del todopoderoso productor Harvey Weinstein, un judío neoyorquino de 58 años cuyas películas atesoran ya 69 premios Oscar y más de 200 nominaciones. También productor de ‘The Fighter’, se ha frotado igualmente las manos con los galardones concedidos a Christian Bale y Melissa Leo, elegidos mejores actores de reparto por esta historia de David O. Russell y Mark Wahlberg basada en la vida real del boxeador Micky Ward.
Consagración de Portman
‘Origen’, el ambicioso filme futurista de Christopher Nolan ha arrasado en las categorías técnicas al recibir cuatro galardones y se ha convertido así en la segunda cinta del palmarés, por encima de ‘La red social’. La película de David Fincher sobre el creador de Facebook, la única que hasta la fecha ha sido capaz de plasmar lo que supone el poder real de Internet, ha ganado el premio al mejor montaje, a la música y al mejor guión adaptado, lo que confirma a Aaron Sorkin, responsable del libreto de ‘El ala oeste de la Casa Blanca’, como el escritor del momento.
La esperada consagración de Natalie Portman, mejor actriz por ‘Cisne negro’, y el reconocimiento a ‘Toy Story’ han tenido lugar en una ceremonia que ha olvidado a los candidatos latinos. Una gala, conducida sin gracia por Anne Hatheway y James Franco, incapaces de aportar el desparpajo de presentadores como Hugh Jackman, Billy Cristal o Whoppie Goldberg, que ha estado marcada por el aburrimiento, el reparto de los premios y la ausencia de sorpresas donde la alegría la ha puesto el veterano Kirk Douglas, quien a sus 94 años tuvo tiempo para flirtear con la joven Hathaway.
Los españoles tenemos discurso del Rey todas las navidades y nunca le dan un oscar.