Mi réplica a Manuel Llamas
Acabo de escuchar una tertulia sobre economía, en la que ha participado usted, el profesor don José Raga, y la periodista Carmen Tomás. Pues bien, dice usted que a un empresario no solamente hay que respetarlo e idolatrarlo sino lo siguiente ¡Fantástico!
Mire usted, la idolatría se ejerce con aquello que se considera un ídolo sagrado al que por lo general se le sitúa por encima de cualquier patrimonio o fortuna. Bien es verdad que, familiarmente, esa acepción se utiliza también cuando se siente una especial admiración por una persona sobresaliente en sus actos, en su servicio al bien común y, en momentos puntuales, puede ser también utilizada con la intención de “lamerle el culo”, a quien ostenta el poder y el dinero.
En cuanto al respeto, considero que todo aquel individuo que a su vez sea respetuoso con su prójimo, es merecedor de él, para lo cual, no es requisito indispensable ni imprescindible que el respetable tenga que ser empresario, diputado o concejal.
Bajo mi humilde punto de vista, los buenos empresarios serán respetados, siempre y cuando ellos, además de empresarios, sean buenas personas y respeten también a aquellos trabajadores que merezcan el respeto, la deferencia y la consideración. Y ese respeto –que como digo debe cosa de los hombres de bien-, comienza por ejemplo, cuando ese empresario tiene muy en cuenta y como objetivo, la justicia social.
No es lícita la explotación del hombre por el hombre, pero tampoco la explotación del hombre por el Estado porque lo reduce a esclavo. Es cierto que el capital es un factor necesario, pero no el único, las plusvalías de la empresa no pueden ir únicamente para el capital por muy necesario que éste sea. Las plusvalías de la empresa, con criterios justos, evangélicos y cristianos, y nacionales, deben ser repartidas equitativamente entre todos aquellos que forman parte y son partícipes de ella.
Dice también usted señor Llamas, que Pablo Iglesias, el líder de Podemos, es un tipo inteligente, hábil y buen comunicador, y que por eso convence con facilidad a las masas incultas (sic). Pues bien, esas virtudes que usted le atribuye al marxista podemita, no son distintas o diferentes a las de miles de compatriotas que sin ser marxistas pero condenados al silencio y al ostracismo, defienden diferentes políticas de signo nacional. Lo que sucede, y esto creo que es lo más importante pero que usted pasa por alto, es que Pablo Iglesias y su doctrina ideológica, no solo son auspiciados y enaltecidos por el poder mediático, sino que, sorprendentemente, recibe también un trato especial por los empresarios, al tiempo que disfruta de cobertura legal por esta democracia liberal que usted con tanto apasionamiento defiende.
Y por último, no solo considero miserables sino que para nada comparto, esas referencias insistentes a Falange Española que usted lanza en sus tertulias radiofónicas y televisivas. Esa manía que usted como buen liberal tiene, y que me atrevo a calificar de enfermiza, es la de poner siempre en el mismo plano cada vez que tiene ocasión, a Podemos y al marxismo, con el movimiento político que fundase aquel joven valiente, brillante y honesto, que con el ejemplo de su vida y de su muerte, levantó el estilo de lo mejor de las juventudes de España. Me estoy refiriendo a José Antonio Primo de Rivera, que con solo 33 años de edad, fue fusilado en Alicante el 20 de noviembre de 1936 por los antecesores de los que hoy irrumpen con fuerza en la escena política, con la intención de que se repitan los terribles episodios de una guerra civil entre hermanos.
Poner en el mismo plano a un joven ejemplar que derramó su sangre defendiendo la justicia social y la unidad de la Patria en nombre de Dios, con un niñato marxista que se encama con terroristas y separatistas, y cuya ideología lastra una mochila repleta de crímenes contra la humanidad, no solo me parece injusto y reprobable, sino un insulto a la inteligencia. Sobre todo, cuando no se le concede a ningún falangista el derecho de réplica, ni la posibilidad de aparecer en los medios de comunicación del mismo modo que lo hacen podemitas y separatistas.
Cuando un analista económico como usted, desayuna economía, almuerza economía, cena también economía, y defiende con uñas y dientes la reforma laboral marcada por Bruselas, permitiendo los contratos basura y los salarios míseros, es indudable que su sentido social lo deja a merced de un rollo de papel higiénico.
El “economista” m. Llamas no puede ni publicar en su propio periódico. Sus lectores le ponen a parir. sólo dice sandeces. Este es uno de los necios que dice se han perdido 6000 puestos de trabajo del edificio España….¡¡ así de fácil¡¡¡. Lo que necesitamos en industria, FABRICAS. materia prima española y venderla elaborada. Sueldos decentes. No chinos explotadores. En mi empresa nos bajaron el sueldo (20%) con el ERE. Ahora ha repuntado pero no nos han subido nada a los trabajadores, a los jefes si. Este es el empresariado que impera en España. así nos va. “chaperoconomista”
Todos trabajan para el mismo amo, este aún más despechado, no saca tajada alguna, que este iglesias en brazos de limdenberg como un bebe y este que hace bien los deberes no les sirve ya que su mensaje no es el travestido que necesita el rabin.
La ideología de primo de Rivera no lleva muchas muertes a la espalda verdad?
Si , por ejemplo la de Matias Montero y otros tantos jovenes falangistas asesinados a punta de pistola por las juventudes socialistas durante los años 30.
PATRIA TRABAJO JUSTICIA
ARRIBA ESPAÑA
¡¡EXCELENTE RESPUESTA Sr.ROMÁN!!
¡CHAPEAU!
Con que maestría y sencillez, ha puesto usted a este “sabelotodo” en su sitio. La prepotencia que exhibe este sujeto en las tertulias es repugnante y vomitiva.
Por respeto a este medio me voy ahorrar decir lo que opino del mencionado “economista”. solo diré que son estos economistas los que nos estan llevando a la ruina y que se les pedirá responsabilidades.