Matan a una afgana de 19 años que quería huir de la vivienda de su familia política, donde era agredida
Una joven afgana de 19 años identificada como Azada ha muerto este lunes a primera hora después de ser alcanzada por un disparo cuando trataba de escapar de la vivienda de su familia política, donde era víctima de torturas y agresiones continuadas.
Si bien los talibán no se han pronunciado al respecto, un alto cargo del distrito de Kohistanat, en la provincia de Sar-i-Pul, asegura que milicianos talibán están detrás de este ataque. El portavoz del Gobierno local, Zahihulá Amani, ha confirmado a la agencia afgana de noticias Pajhwok que el ataque ha tenido lugar en la localidad de Bidastan.
“Azada huía de la vivienda de su marido (y la familia del marido) tras haberse convertido en víctima de violencia intrafamiliar”, ha indicado Amani. “Su marido estaba fuera y ella era golpeada y torturada por sus familiares políticos”, ha añadido.
Azada había acudido a la Policía en el distrito de Sayad, desde donde la trasladaron a un refugio para mujeres en el que estuvo unos seis meses. Después, fue liberada cuando sus hermanos se comprometieron a respaldarla.
La directora de Asuntos de Género, Naseema Arzo, ha criticado la decisión de sacarla del refugio y entregarla a sus hermanos, ya que esta se tomó sin informar a su departamento.
Este incidente ha tenido lugar tan solo unos días después de que otra joven, de 22 años, acusada de mantener una relación extramatrimonial de forma telefónica con otro hombre, muriera de un disparo. Según la agencia afgana de noticias Jaama, la familia de su marido podría estar detrás del ataque.
VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES
Afganistán está viviendo un incremento de la violencia contra las mujeres. A mediados de junio, los familiares de una mujer que trataba de huir con un hombre la mataron de un disparo.
También el mes pasado, una adolescente fue quemada viva por la esposa de su hermano, mientras que tres mujeres, las tres hermanas, murieron por disparos de milicianos en la provincia de Logar.
La Comisión Independiente para los Derechos Humanos en Afganistán (AIHRC) denunció el pasado mes de noviembre que durante los seis primeros meses del año 1394 –Afganistán se rige por el calendario persa; el año 1394 se inició en marzo de 2015, por lo que corresponde a los meses comprendidos entre este y septiembre de 2015– se registraron más de 2.500 casos de violencia contra las mujeres.
Esta cifra que es algo superior a la registrada el año anterior, que alcanzó los 2.400, en concreto, más de un siete por ciento superior.
La AIHRC también denunció, el pasado mes de marzo, que numerosas mujeres afganas han sido objeto de pruebas médicas para comprobar su virginidad tras haber sido acusadas de mantener relaciones sexuales fuera del matrimonio, generalmente sin su consentimiento, y pese a las consecuencias psicológicas que para ellas tiene esta práctica.