Los Balcanes, otra vez al borde de la guerra
Serbia y Kosovo vivieron momentos de alta tensión, que casi desatan una nueva conflagración en la Península balcánica, como consecuencia del intento serbio de enviar un tren de pasajeros desde Belgrado a la ciudad serbo-kosovar de Mitrovica, a lo que Pristina reaccionó con el impedimento de entrada del tren, en el paso fronterizo de Jarinje. Como se comprenderá, este fue el primer intento, desde el final de la guerra de Kosovo en 1999, de comunicar Belgrado con Mitrovica, principal centro urbano serbio-kosovar. La razón para la escalada de la situación en la región, se explica ante el rechazo de los albaneses de Kosovo, a permitir proseguir el viaje proveniente de Belgrado, ya que ello implicaría el comienzo de la reanudación del tráfico en el ferrocarril Belgrado-Kosovo y, eventualmente, a Macedonia, que fue detenido hace 18 años.
El destino final como se señaló supra, era Mitrovica, ciudad kosovar, situada en una región predominantemente habitada por aproximadamente 10 mil serbios que viven bajo la protección de la fuerza de policía internacional, KFOR (Fuerza Internacional de Seguridad en Kosovo). El tren en cuestión estaba está decorado con motivos ortodoxos, y colores de la bandera serbia. El mensaje simbólico más importante era el que estaba pintado en los vagones con el lema; “Kosovo es Serbia” en 21 idiomas, incluyendo el albanés. Como era de esperar, los kosovares negaron la entrada al tren, que terminó detenido, antes de cruzar la frontera de la antigua provincia serbia.
A propósito, inmediatamente después de incidente, el Presidente de Kosovo Hashim Thaci (ex comandante de campo del ejército de liberación de Kosovo apodado serpiente) declaró que la acción era “totalmente inaceptable y violatoria de la soberanía de Kosovo”. De Pristina inmediatamente surgió una orden para enviar a las fuerzas especiales al tren y detenerlo. Como resultado del tren se vio obligado a detenerse en la ciudad de Raska, última estación antes de la frontera administrativa entre Serbia central y Kosovo y después de algunas horas de espera, regresar a Belgrado. Según el primer ministro de Serbia, Alexander Vuchicha, esto se hizo con el fin de prevenir el conflicto y salvar vidas. “No hubo ninguna imagen nacionalista de mitos” de gran Serbia “dentro eran sólo los iconos y la inscripción Kosovo es Serbia”, que es una cita de nuestra Constitución. Me ha sorprendido y he quedado conmocionado por acciones tan irresponsables, como la de enviar fuerzas especiales con ametralladoras en el norte de Kosovo, dijo en una entrevista con el diario italiano “La República”. Después del incidente. las autoridades de Serbia organizaron una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional, al final de la cual el Presidente del país, Tomislav Nikoli?, anuncio su disposición de enviar unidades de las fuerzas armadas de Serbia a Kosovo.
“Serbia se pone ante una elección: o hace lo que dice o hay una guerra”. Mientras yo sea presidente de este país, Serbia no sera marioneta de nadie destaco. “Si matan a los serbios, nos dirigiremos a Kosovo. Y no sólo el ejército; todos iremos y yo seré el primero en ir”. En opinión de Nikolic, el incidente fue causado por “intentos convulsivos de la administración saliente (Obama) de EEUU que exacerba la situación en la región”. El Presidente cuestionó por lo tanto la necesidad de continuar el diálogo con Belgrado, Pristina y la Unión Europea. A su vez, el líder de la organización patriótica “Nuestra Serbia”, Mladjan Djordjevic declaro que considera que Occidente trabaja activamente para desmembrar a Serbia.
Para ello, apoya movimientos separatistas en todo el país, en particular en el sur de Serbia, donde viven muchos albaneses, así como en el área de la región de Raska (donde existe una gran cantidad de musulmanes) y la región norte de Vojvodina, habitada por personas de diferentes nacionalidades, al igual que los de la Republica Srpska, que forma parte de la Federación de Bosnia-Herzegovina. Más aun, señalo que queda cada vez más claro, que las autoridades de Sarajevo están tratando de destruir los elementos de identidad serbios, incluyendo el idioma serbio, contrario a toda lógica, llamándolo idioma bosnio. Sobre dicha temática, el Presidente de la Republica Srpska, Milorad Dodik declaro que no existe el idioma bosnio. En otras palabras, lo que estaba diciendo era que el «idioma bosnio» es de hecho, el idioma serbio. La imposición a los serbios de la nueva denominación a su propia lengua, es según el mismo, “totalmente inaceptable…Me siento orgulloso que no ha cambiado la Constitución de la República Srpska, según lo requería de mí, la administración de los Estados Unidos”, señalo en su momento Dodik.
En lo que respecta a los trenes, la cabeza visible de Kosovo Hashim Thaci, hablando sobre este tema, se apresuró a acusar a los serbios de tener intenciones de capturar el territorio norte de Kosovo. El intento de enviar un tren con los lemas nacionalistas, en el norte de Kosovo, fue provocar una reacción de Kosovo, que Belgrado podría usar como un pretexto para una intervención militar. “Las intenciones de Serbia de utilizar este tren, eran primero cortar la parte norte de Kosovo y luego unirla a Serbia”, argumentó. Los expertos no excluyen que la situación en Kosovo pueda metamorfosearte y convertirse en un conflicto armado. Ello se debe a la incertidumbre que emana de las futuras políticas de la Unión Europea y de los Estados Unidos y la calma resultante en la región realizada por el Acuerdo que Belgrado y Pristina firmaron bajo la égida de Bruselas. Con todo, hasta la fecha, en el marco de la Unión Europea se está produciendo una especie de crisis de poder, por lo que se puede esperar cualquier eventualidad. Con respecto a los Estados Unidos, sus autoridades, como se conoce, ha sido siempre el principal defensor de Kosovo, al punto que fue el promotor de la idea de independencia. Ahora, después de la elección del nuevo Presidente de ese país, estará por verse, cuál será la postura que adoptara Washington respecto al futuro de esta región.
*Profesor titular de Relaciones Internacionales de la Universidad de Panamá
Una guerra por mas espantosa que sea es la garantía de que al finalizar la misma, se disparan por las nubes los índices de natalidad y el Nacionalismo. Lamentablemente en estas regiones Nacionalismo y Patriotismo van de la mando, haciendo mas sangriento y duradero el conflicto.