El lobby LGTBI persigue a uno de los psiquiatras más importantes de la historia por rebatir sus teorías
FC.- McHugh es uno de los profesionales de la Psiquiatría más importantes de las últimas décadas, que ha recibido reconocimiento de importantísimas instituciones. Pero el uso de la ciencia para desmontar las teorías de género le ha convertido en una ‘pieza a abatir’ para el lobby LGTBI.
Uno de los principales grupos del lobby LGTBI en los Estados Unidos, Human Rights Campaign [Campaña por los Derechos Humanos] ha declarado la guerra política al reconocido científico Paul McHugh, el psiquiatra de fama mundial que rebate desde la ciencia las teorías del constructivismo sexual y la ideología de género.
McHugh, a quien se acusa de hacer “ciencia-basura”en una página web dedicada a tergiversar sus investigaciones y declaraciones, es doctor en Medicina y especialista en Neurología por la Universidad de Harvard y, entre otros reconocimientos, se ha hecho acreedor del máximo galardón de la Academia Nacional de las Ciencias de los Estados Unidos.
Intentar desprestigiar a este científico por discrepar de los postulados de la ideología de género suena extraño, cuando la propia Academia de las Ciencias de los EE. UU. se deshace en elogios hacia el trabajo de McHugh y sus méritos académicos son evidentes.
Un currículum abrumador
Entre otros méritos, se destaca cómo ha realizado importantes descubrimientos científicos, entre los que se encuentra “haber sido el primero en describir un aumento de la secreción de cortisol asociada a la depresión, un logro que permitió el desarrollo de una prueba para identificar la depresión grave a través de evidencias físicas”.
McHugh ha sido también director del Departamento de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento en la Universidad Johns Hopkins y psiquiatra jefe del Hospital del mismo nombre entre 1975 y 2001.
También es autor de muchos libros y manuales de relacionados con su campo científico, incluido ‘Perspectivas de Psiquiatría’, que es descrito por la Academia de las Ciencias como “un tratado sobre métodos y principios prácticos que ha sido alabado como uno de los textos psiquiátricos más influyentes en el siglo pasado”, según recoge Life Site News.
En 1998, la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins (situada entre las mejores del mundo por U.S. News & World Report) nombró al doctor McHugh como “profesor distinguido”. En 2015, el pusieron su nombre a un programa sobre Desarrollo Humano del Departamento de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento.
Desde 1992 es miembro del Instituto de Medicina de la Academia Nacional de las Ciencias de los Estados Unidos y en 2008 fue premiado con el prestigioso Premio Internacional Sarnat de Salud Mental de la Asociación Americana de Psicología por sus “destacados logros en la mejorea de la salud mental”.
Paul McHugh también ha formado parte del Consejo Presidencial de Bioética (2001) y de la Mesa para Protección de la Infancia y la Juventud de la Conferencia Episcopal Católica de los Estados Unidos.
El prestigioso científico que ahora es objeto de una intensa campaña por parte del lobby LGTBI ha formado parte del profesorado o el equipo directivo en instituciones como la Universidad Cornell, el New York Hospital Westchester Division o el Departamento de Psiquiatría del Centro de Ciencias de la Salud de Oregón.
La Universidad de Zaragoza (España) le otrogó el doctorado Honoris Causa en 2012.
“Divertido” ante las calumnias de Human Rights Campaign
En una entrevista reciente condecida a LifeSite News, McHugh, de 85 años, aseguró sentirse “divertido”con la web de Human Rights Campaign en la que se le demoniza y “orgulloso de lo que he logrado”, en especial de su elección para formar parte del Instituto de Medicina de la Academia Nacional de las Ciencias.
Según se refleja en la web de esta institución “los miembros son elegidos como reconocimiento a sus distinguidos y continuos logros en investigaciones originales. La pertenencia es un sello de excelencia científica ampliamente aceptado y es considerado uno de los más altos honores que un científico puede recibir”.
Human Rights Campaign y otras organizaciones LGTBI tratan de desacreditar a McHugh debido a que es la autoridad médica y psiquiátrica más respetada que está desmontando la ideología del ‘cambio de género’, que incluye la extirpación – incluso en menores- de órganos sexuales sanos para imitar características del cuerpo del sexo opuesto.
En la web dedicada al científico se asegura que “el esfuerzo de McHugh para dar una capa de integridad académica a la basura transfóbica es parte de una tendencia perturbadora más amplia: el uso de investigaciones engañosas, mal diseñadas o completamente anticientíficas para atacar a la gente LGTBQ y sus familias”.
Quien asegura tal cosa no es si no la organización LGTBI de presión política mejor financiada del mundo, que con frecuencia emprende campañas de demonización de quienes se oponen a la imposición de sus teorías.
Transgénero, anorexia y bulimia
A pesar de la trayectoria científica de Paul Mchugh, su popularidad creció enteros tanto entre sus partidarios como entre sus detractores después de que se publicara en junio de 2014 una tribuna en The Wall Street Journal titulada ‘La cirugía transgénero no es la solución’.
En ella, McHugh se expresaba así: “Ni los legisladores ni los medios están haciendo un favor a la sociedad o a los transgénero al tratar sus confusiones como un derecho que merece ser defendido en vez de como un desorden mental que merece comprensión, tratamiento y prevención”
A su juicio, prosigue, “esta sensación intensamente percibida de ser transgénero constituye un desorden mental en dos aspectos. El primero es que la idea de desalineación sexual es simplemente equivocada y no se corresponde con la realidad física. La segunda es que puede llevar a sombrías consecuencias psicológicas”.
Por otro lado, la comparación que realizó el científico del sentimiento transgénero con la anorexia, también encontró eco (a favor y en contra) de McHugh.
“El transgénero sufre un desorden de ‘suposición’ como el de quienes sufren otros desordenes familiares para los psiquiatras. En el transgénero, la suposición desordenada es que el individuo difiere de lo que parece hacer sido dado por naturaleza, esto es, la masculinidad o la feminidad”.
“Otros tipos de suposiciones desordenadas son las percibidas por aquellos que sufren anorexia y bulimia nerviosa, en los que la suposición que parte de la realidad física es la creencia de los extremadamente delgados de que están obesos”, añade el psiquiatra.
Cambio de sexo : “biológicamente imposible”
Otra de las afirmaciones que el lobby LGTBI no ha podido pasar por alto de Pau McHugh son las relativas a la inutilidad de someterse a mutilaciones y cirugías modificadoras del cuerpo en estos casos.
“Las personas que se someten a cirugía de reasignación sexual no cambian de hombres a mujeres o viceversa. Más bien, se convierten en hombres feminizados o en mujeres masculinizadas. Afirmar que se trata de una cuestión de derechos civiles y fomentar la intervención quirúrgica es, en realidad, colaborar y promover un trastorno mental”.
En este sentido, el doctor McHugh recordaba que un estudio realizado en Suecia, una nación de la que se predica una alta tolerancia y aceptación de las personas LGTBI, aquellos que se han sometido a este tipo de operaciones tienen 20 veces más probabilidades de suicidio en comparación al resto de la poblacion.
En el caso de los menores, McHugh sostiene que las intervenciones médicas “están cerca del abuso de menores”.
Por Dios, no tiren ustedes abajo el dineral que gana la industria dedicada a maltratar a estas personas.Qué más da unos miles de personas sometidas a estas prácticas bárbaras si a cambio unos cuantos deslamados llenan sus bolsillos a costa de pobres infelices.
Yo creo que los enfermos son los que escriben aquí despotricando de la sexualidad. Menuda panda de ignorantes.
Pa ignorante tu nombre.
O sea, tú también eres otro enfermo. Nadie aquí despotrica de la sexualidad, el hombre es hombre y la mujer mujer. El homosexual o transexual, ya lo has leído, es un trastorno mental que ninguno de nosotros persigue, simplemente lo entendemos como una enfermedad que se ha fanatizado, subvencionada por la masonería, para atacar a los heterosexuales y de rebote a la Iglesia. Con Franco existían los mariquitas y nadie se metía con ellos, simplemente nos hacían gracia .
Ahi tu el sabio
La tésis de este científico la demuestran los propios “transexuales”. Observen uds. cuando les interesa, como quienes son mujeres y quieren ser “mocitos” se hormonan, pero cuando les apetece, dejan de hormonarse para tener un hijo. Los medios de comunicación de los innombrables hacen el resto con estos titulares: Un hombre da a luz.
Todo cuanto va contra la ley natural, es aberrante por definición. El colectivo con mayor patología psiquiátrica, que más acude a los profesionales es el homosexual. Ellos mismos, para insultarse, se califican de maricones. Y ellos son expertos en materia. No seré yo quien les rebata nada al respecto. Si la homosexualidad, transexualidad, y demás variantes que quieran añadir a su larga asociación, no es una enfermedad ¿por qué debemos costearlas a través de la segurida social? ¿Por qué debemos costear sus costosísmos tratamientos psiquiátricos, hormonales, operaciones de castración o añadiendo colgajos que simulen un pene? ¿En la segurida social… Leer más »
Lo que dice este científico de renombre mundial es cierto,no podemos tapar el sol con un dedo,solamente hay dos sexos y los hizo DIOS todo está en la mente del hombre o mujer y la comparación que el hace con los bulimicos y anorexicos es una comparación perfecta,son trastornos mentales del individuo,y la palabra de DIOS hace mucho lo llamo pecado eso va en contra de lo establecido por DIOS y por consiguiente ni las leyes ,los medios de comunicación ,los gobiernos ni nadie que esté a favor de esto le irá bien tarde o temprano tendrán su paga por… Leer más »
Este sistema en el que vivimos es prehistórico. La persecución que se hace contra los científicos en todo el mundo, si los cardenales de la Santa Inquisición vivieran hoy, se echaría las manos a la cabeza asustados. La Inquisición al menos se basaba en las teoría científicas del gran Aristóteles (Teoría Geocéntrica). Pero los censores de hoy sólo se basan en el Talmud Judío para robotizar a los gentiles.
Por cierto, que la comparación con la anorexia, me parece excelentemente traída. Es un claro ejemplo de desvirtuar la realidad.
¡Vaya! Una brisa de aire puro, entre tanta pestilencia intelectual. Parecía que todos habían perdido el juicio, pero leer estas cosas levanta el ánimo. No se puede decir más claro. El afirmar que toda esta gente está enferma, es una obviedad para cualquiera que no esté imbuido de tanta basura pseudocientífica que se ha vertido a mares en los últimos años. Por otro lado, llamar a las cosas por su nombre, no sólo no es ofender a los afectados, sino el primer paso para ayudarles en su curación. Es como en las películas yanquis aquellas en las que un alcohólico… Leer más »
La transexualidad-disforía- es un trastorno mental, y la homosexualidad es una conducta errática de la orientación sexual provocada por varios factores, aunque se apunta a que el motivo principal se da durante el periodo de formación de la identidad sexual en la pubertad.
Lo mismo hicieron con un premio Nobel que estudio la genética y descifró el ADN que hablo de “diferencias entre razas y su inteligencia” hace pocos años.
La irracionalidad contra la razón… vivimos tiempos oscuros y dictatoriales, distópicos.
Que el sentido común haya casi desaparecido y la ciencia esté secuestrada so clara muestra-
Solo estudiar la biografía de los “ideólogos de género” todos degenerados, pervertidos sexuales, drogadictos y hacinados en sanatorios la mayoría de ellos y ellas. Lo que dice este psiquiatra es lo más sensato que puede argumentar una persona con una intelectualidad sana e invidiable. Por desgracia la estupidez hoy ha quedado con vida, y gobiernan el mundo!! esa es la triste realidad.
Este doctor en psiquiatría es muy valiente y honesto, pues analiza con ecuanimidad y rigor las desviaciones de “genero” bajo un criterio cientifico . Ojala tuviésemos en nuestro país alguien como el. Aunque muchos le den. la razón -a hurtadillas-, la inmensa mayoría calla y traga.La opinión de importantes científicos ayudaría mucho para combatir ese grave problema.
“Cualquier cosa que sea contraria a la naturaleza lo es también a la razón, y cualquier cosa que sea contraria a la razón es absurda” Baruch Spinoza.
Aquí la única basura es el lobby de marras. Lo que piensa este señor lo han dicho la mayoría de los psiquiatras a lo largo de la historia. Ahora muchos están asustados y amenazados por esta chusma y no se atreven a decirlo.