Un inmigrante tunecino de 22 años agrede salvajemente a una familia italiana por un cigarro
Un inmigrante tunecino de 22 años atacó el pasado domingo a un matrimonio italiano y su hijo en la puerta de un establecimiento hostelero del barrio Aurelio, Roma.
Según el diario italiano “Il Giornale”, el joven se acercó a la mujer para pedirle un cigarro, a lo que ésta se negó. El tunecino comenzó entonces a insultarla. El marido, que se encontraba a unos metros junto a su hijo, acudió en ayuda de su esposa. La respuesta del africano no se hizo esperar: golpeó al hombre con un taburete en la cara. También se ensañó con el niño, al que propinó un fuerte golpe en la espalda con el mismo objeto, causándole una lesión en la columna vertebral. Por su parte, el padre sufre una rotura nasal.
La policía italiana detuvo al agresor.
Nos viene lo peor del ya deplorable tercer inmundo.
Si el marido supiera algo de Antropología Física no oficialista, cuando vio a ese subhumano insultar demencialmente a su mujer, antes de entrar a defenderla habría cogido un par de piedras o un palo grueso. Pero como no era racista y creía que todas las razas son iguales “excepto el color de la piel”, no se esperó el agresivo y violento comportamiento espontáneo carente de Lóbulos Prefrontales por parte del semisimio. Pero no hay problema: haya otra forma de aprender Antropología Física sin estudiar e incluso siendo marxista: ser invadidos por subhumanos salvajes y ser violados, robados y violentamente agredidos… Leer más »
Mas europeos enriquecidos culturalmente
Son SUS costumbres y hay qué respetarlas.
No entiendo porque tragamos sin hacer nada y nos preocupamos por lo que nos venden en los telediarios “informativos”. Si nos unimos somos más!!!
Los italianos progres se lo merecen, en este caso puede ser que no, pero asi es la manera de que sigamos aprendiendo.
Este seguramente sería progre o medio progre, sino en vez de intentar hablar con quien no se puede, hubiera actuado con más inteligencia.
Pero si esto es harto frecuente por desgracia; en lo que respecta a Francia, se cuentan más casos como este por ejemplo en el libro de Marie-Neige Sardin «Celle qui dit non» o en videos de «la blonde de YouTube».
El “buen salvaje” de Rousseau, de nuevo en entredicho.
No, si como salvajes son muy buenos. Su salvajismo es de una calidad inimitable.
Cierto: debería ser el “salvaje bueno” (valga la buena fe) la traducción del francés.
Es como el “hombre bueno” y el “buen hombre” españoles.
O la distinción entre ser y estar, exclusivas del castellano.
Sutilezas de nuestra lengua, única en el mundo.
Sigamos tolerando…