Cuatro de cada diez niños que fallecen en accidentes de tráfico no llevan puesto el cinturón
Si todos los padres usaran los sistemas de protección con sus hijos, automáticamente descendería un 20% la cifra de siniestralidad infantil. Según el estudio elaborado por el Instituto de Seguridad Vial de Fundación Mapfre, la tendencia es buena, pero todavía hay un 40% de muertes que se podrían haber evitado con el cinturón, la silla infantil o el casco. Uno de cada diez niños fallecidos en accidente tiene menos de un año.
La mayoría de los niños menores de 14 años que fallecieron en accidente de tráfico en España entre 2005 y 2008 lo hicieron mientras viajaban por motivos de ocio, por una carretera convencional con poco tráfico y como ocupantes de un turismo o furgoneta ligera. Lo más llamativo es que un alto porcentaje eran varones: también entre los bebés.
El coordinador de este informe, Jesús Monclús, asegura que los expertos no encuentran una explicación a este dato: “Uno de cada diez niños ocupantes fallecidos tiene menos de un año, y más del 60% de los niños fallecidos son varones. Si miramos las estadísticas del INE, pasa lo mismo en caídas accidentales, en ahogamientos… Los niños, incluso de bebés, tienen menos accidentes que las niñas. Es un interrogante, que en la UE también se plantean porque ocurre en muchos países, y no hay explicación”.
Casi nueve de cada diez muertes se producen en carretera. Pero el accidente más común tiene lugar en distancias cortas (a menos de 50 kilómetros del domicilio), por distracciones del conductor al salir de la vía, y en dos tramos horarios: de 13 a 14 horas, y de 17 a 18 horas. Es decir, coincidiendo con las horas de recogida de los niños en el colegio. Por eso es muy relevante, según el estudio de la Fundación Mapfre, que una de las excusas más utilizadas por los padres para no usar sillas infantiles es –precisamente- coger el coche para distancias cortas.
El 70 % de los niños que perdieron la vida en accidente de tráfico entre 2005 y 2008 lo hizo a plena luz del día. Los meses de julio y agosto fueron los más peligrosos.
En cuanto a comunidades y provincias, las peores cifras se registran en Andalucía, Castilla y León, Castilla La Mancha y Cataluña. Por provincias, destacan Madrid y Toledo.
me pregunto que hay que hacer para que los familiares que llevan a los peques en coche tengan conciencia… luego son los que más lloran en los tanatorios…no tiene que bastar con un “es que yo” o “quien lo iba a pensar” o “de haberlo sabido” . tendría que ser castigado con prisión.