Inés Arrimadas y Albert Rivera han hecho una apelación a la movilización el próximo 21 de diciembre desde la perspectiva de “ganar las elecciones” y reclamando la concentración de todo el voto contrario a la independencia en Ciudadanos porque no sirven “ni el conformismo del PP ni los complejos del PSOE”. Impulsados por las encuestas la candidata a la presidencia de la Generalitat se ha mostrado confiada en la victoria: “Vamos a enterrar con votos la etapa negra de la historia de Cataluña”.

La formación se prepara para entrar en la semana clave de la campaña impulsado por los sondeos. El último de La Vanguardia publicado ayer apunta, en la misma dirección que el CIS, que Ciudadanos sería el más votado. El optimismo es fácilmente perceptible en los actos del partido y entre los dirigentes de la formación. Los cabezas de lista por Tarragona, Matías Alonso y Lorena Roldán (figura en ascenso en el partido) han incidido en uno de los mensajes fuerza del partido en esta campaña: destinar los recursos de la independencia para “chiringuitos políticos” a priorizar las políticas sociales.

Algo que ha sido clave en la intervención de Arrimadas, que ha puesto de manifiesto la intención de Ciudadanos por ampliar su base de votantes. Los dirigentes del partido confían en seguir erosionando la base electoral del PP con la operativa del voto útil-“somos el único voto que puede ganar a los nacionalistas en las urnas”- pero son conscientes de que en el espectro de la izquierda esa operativa es más compleja porque compiten con más partidos, porque el PSC está en ascenso respecto a 2015 y porque su pacto con el PP para la investidura de Mariano Rajoy les puede alejar de ese nicho de potenciales votantes.

Por eso en el discurso de Arrimadas ha destacado la insistencia en que su prioridad de gobierno serán las políticas sociales: “Puigdemont ha sido el presidente del procés, yo voy a ser la presidenta de todos los catalanes, de la convivencia, de las políticas sociales”. La candidata de Ciudadanos ha hablado mucho de sus prioridades de Gobierno. Una de las primerasha dicho que será acudir a la conferencia de presidentes para “demandar un mejor sistema de financiación”, pero también la apuesta por desarrollar el corredor mediterráneo que es “absolutamente imprescindible”. Y en una referencia clara a los antiguos pactos del PSC y del PP con los nacionalistas ha advertido que “cambio es cambiar las políticas nacionalistas por políticas progresistas, centristas europeístas. Cambio y no recambio de las políticas nacionalistas”.

El estado de ánimo se palpaba emocionado en el paseo Imperial de Tarragona. En un mitin programado para acoger a 600 personas y que terminó por superar las 1.200, Arrimadas defendió el voto a Ciudadanos como “la única garantía de cambio, el único voto que puede ganar a los nacionalistas en las urnas”. Ha pedido que las encuestas no sirvan para relajarse sino para movilizar todavía más voto: “Hay que mirar las encuestas no para confiarnos, pero sí para que tengamos esperanza. No es una utopía ganar por primera vez al nacionalismo a las urnas”.

El partido ha estrenado hoy una nueva imagen de campaña y un mensaje centrado en la apelación al cambio. Arrimadas ha dicho que después de tantas apelaciones a fechas históricas, “la fecha histórica del procés será el 21D porque será la de su caducidad”. “Es posible el cambio, el cambio de rumbo. Quedan 11 días para que la pesadilla del procés se acabe después de tantos años, hay que aprovecharlo”, ha dicho Arrimadas.

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha cerrado el acto con un mensaje similar pero en el que ha incidido en que la victoria en Cataluña es “la punta de lanza del cambio”. Ha recordado que en 2006 él mismo y otros compañeros pusieron “la primera piedra” pero que lo importante es “la última piedra, la que nos lleve a gobernar Cataluña y España entera”.

Rivera ha tenido un discurso más duro que el de Arrimadas en las críticas a sus rivales. En primer término ha cargado contra la “uniformidad de pensamiento” que reclaman los independentistas y contra la figura de Puigdemont: “Es militante del PDECat pero piensa como uno de ERC y actúa como la CUP”.

Pero también se ha referido a que el voto a PSC y PP no garantiza el cambio como lo garantiza el de Ciudadanos, que nació “como consecuencia del abandono” de los otros dos partidos constitucionalistas por sus pactos con ERC y Converengia: “Ahora los no separatistas tenemos nuestro propio cambio. Sin sufrir por si tus votos van a ir hacer un tripartito. Nadie duda para que sirven los votos naranjas. Ahora va a servir para ganar, que es una palabra a la que renunció el constitucionalismo. A lo máximo que aspiraban era a sumar con CDC o ERC y entregarles la Generalitat”. Vuestro voto sirvr para ganar a ERC. No nos sirve el conformismo del PP ni los complejos del PSOE”.

Rivera ha asegurado contundente que “no nos sirve ni el pujolismo, ni los tripartitos ni el procés. Solo sirve el cambio”, por lo que ha pedido “concentrar el voto en Ciudadanos” y apelando a la movilización y alertando del riesgo de no hacerlo: “Si nos quedamos en casa pueden ganar los separatistas otras vez”.