El cuidado de la imagen y la salud emocional
Los complejos físicos afectan a nuestras emociones de una forma bastante intensa. Por eso se recurre a menudo a expertos en dos áreas, la psicológica y la estética.
Las personas somos los únicos seres del planeta que tienen conciencia de su imagen. Esto es algo que nos diferencia de los animales, aunque también supone a veces que no nos sintamos todo lo a gusto que deberíamos. Los complejos debido a algún defecto, real o imaginario, que tenga nuestro cuerpo puede llegar a afectarnos de tal modo que incluso podríamos sufrir algún trastorno.
Complejos más comunes
Aunque cada quien es diferente y puede haber una determinada parte del cuerpo que le obsesione más que a otro, hay una serie de complejos que parecen ser más habituales que otros, según informa la página Delasalud. Además, dependiendo del género estos también varían.
Por ejemplo, a las mujeres les preocupa su pecho, acabar con la celulitis y no aumentar de peso. A ellos, la nariz es sobre todo la parte del cuerpo que más atención suele requerir, aunque también están los síntomas de calvicie y cada vez más el control del peso.
En cualquier caso, lo cierto es que hay muchos complejos, y cada uno afecta de manera diferente a quien los padece.
En especial aquellos que se centran en el físico, que generan la sensación de que todo el mundo está mirando justo allí.
Refuerzo psicológico para ayudar
Cuando se trata de un complejo, en algunas ocasiones puede llegar a ser tan intenso que requiere ayuda profesional. No es cuestión de pensar que se ha perdido la cabeza, sino que se necesita que alguien pueda aportar una solución.
En realidad, los psicólogos están precisamente para ayudar en casos como estos, además de otros más profundos.
Hoy, muchos profesionales se encargan de ayudar a gestionar las emociones que producen este tipo de problemas, que pueden llegar a dificultar una vida normal. Para realizar mejor sus tareas cuentan con programas que les permiten llevar su agenda y atender a los pacientes de forma eficaz. Uno de los más utilizados hoy es softwareparapsicologos.com.
El refuerzo positivo a menudo es suficiente para acabar con los complejos. En otros casos, se puede decidir apostar por un cambio físico real.
La cirugía estética como solución
Cuando la vía psicológica no es suficiente, y el complejo está poniendo en peligro la vida normal de alguien, algunos profesionales apuntan a la solución quirúrgica. En clínicas de cirugía estética en Madrid se atienden casos de este tipo bastante a menudo. Alguien que siente que algo de su cuerpo necesita un cambio real acude a la consulta del cirujano para que le asesore acerca de cuáles son las opciones disponibles.
¿Qué logra la cirugía plástica? Cuando se trata de un problema real, como un pecho que no tiene la talla deseada, una desviación de la nariz o algún rasgo físico que es claramente destacable, puede cambiar bastante la apariencia. Esto en sí es positivo, siempre que se sepa cuál será el resultado antes de hacer la operación. Por ello, un cirujano plástico mostrará el cambio que se va a realizar antes de proceder, para que la persona pueda decidir si es lo que quiere realmente. Es bastante importante, ya que después será más difícil cambiarlo de nuevo.
La clínica Granado Tiagonce, una de las mejores clínicas de cirugía estética en Madrid, comenta que en la mayoría de los casos se logra un resultado muy satisfactorio. En otros, también es importante que haya un psicólogo que apoye la labor del cirujano para que el cambio sea aceptado, sobre todo cuando se trata de una intervención que ha transformado bastante la apariencia del paciente.