El Madrid vuelve al Himalaya. Por decimosexta vez estará en la final de la Copa de Europa, de la que ha sido impulsor, garante, multiganador y emblema. Una vocación universal que, en ocasiones, le ha hecho descuidar las tareas domésticas y que le ha obligado a convertir la salida de emergencia en la Puerta del Príncipe. Ya lo ha hecho cinco veces a lo largo de su historia y tratará de repetirlo en Kiev, tras sortear al Bayern, enemigo de cabecera, un rival que le superó en todo menos en corazón. Un Keylor heroico le pone a tiro la Decimotercera.

Desde el inicio, el Bayern trató de buscar las cosquillas a Lucas Vázquez, improvisado lateral derecho ayudado por Modric. Sin embargo, el primer gol llegó por el otro costado. Antes de que se cumplieran los tres minutos, Sergio Ramos se confió. Intentó un despeje inverosímil y dejó el balón muerto para Kimmich, el goleador alemán del partido de ida, que esta vez tampoco perdonó. El fantasma de la Juve volvió al Bernabéu.

El Real Madrid reaccionó e igualó a los diez minutos, gracias a un fantástico centro de Marcelo al segundo palo, donde encontró la cabeza de Benzema. El francés, negado en todo el curso, acertó esta vez.

El partido rebosaba intensidad, roto por momentos. El Bayern siguió apretando y fue metiendo atrás al Madrid, que achicaba agua como podía y a la hora de salir sudaba para superar la presión. Cuando lo hacía, llegaba con peligro, pero el del Bayern era mayor y más frecuente. Keylor Navas evitó un fusilamiento de Lewandowski y, en el rechace, James la envió fuera con todo a favor.

Nada más volver del descanso, el Bayern tiró por la borda todo el trabajo del primer tiempo. Tolisso comprometió con una cesión a su portero Ulreich, que no pudo reaccionar peor. En su indecisión, resbaló y el balón pasó de largo. Benzema aprovechó el regalo y firmó el 2-1 a puerta vacía.

El gol desanimó al Bayern, pero no le desconectó. Ronaldo pudo dar la puntilla con un remate que, raro en él, envió fuera. El Bayern reanudo el asedio y James empató (2-2) entre las piernas de Keylor.

Aunque el cansancio se acumulaba ya en sus piernas, el Bayern, a un gol de Kiev, no aflojaba. Con veinte minutos por delante, Zidane dio entrada a Bale y Casemiro por Benzema y Kovacic. Y Keylor Navas sacó otro gol cantado en un remate de Tolisso. El sufrimiento continuó hasta el minuto 95, con continuos acercamientos del Bayern que no encontraron la red. El 26 de mayo, en Kiev, el Real Madrid buscará su décimo tercer título ante Liverpool o Roma.