Una aerolínea multa a una familia por tener los nombres demasiado largos
Nada hace pensar que tener los nombres y apellidos demasiado largo pueda ocasionar un sobrecoste en los precios de un vuelo. De hecho, para tranquilizar a aquellos que se vean reflejados, esto no suele ocurrir aunque la excepción confirma la regla, sobre todo si la compra se hace a través de la web de una aerolínea. Esta historia la protagoniza un padre de familia tailandés que había reservado unos vuelos a través de la página web de Thai Airways.
Fue el propio viajero quién publicó una queja en un popular sitio web asegurando que la aerolínea le había obligado a pagar unos 80 euros por tener los nombres demasiado largos y no caber en el formulario de compra online.
¿Qué es lo que realmente ocurrió?
Lo cierto es que el sistema no le permitía escribir los nombres completos y este problema de espacio «obligó» a este viajero a acortar los nombres en los billetes para poder hacer la compra. Lo que no pensó este padre de familia es que al chequear los pasaportes no coincidirían con los datos que aparecían en los billetes y al llegar a la ventanilla de Thai Airways, el personal de la aerolínea le informó que todo lo que podía hacer si querían subir al avión era pagar la tarifa existente para cambiar los nombres en los billetes o comprar otros nuevos. Así pues, el viajero tuvo que pagar para que los nombres de los billetes fueran los mismos que los de los pasaportes y no por el hecho de que sus apellidos fueran demasiado largos.
Días después de la queja de este pasajero Thai Airways International acordó reembolsar la cantidad abonada e informó que el problema se derivaba de la limitación en la cantidad de caracteres permitidos en su sistema de reserva de internet. «Pedimos disculpas por los inconvenientes, ya que el sistema de reserva permite hasta 25 caracteres para el nombre y apellido», según publica Bangkok Post, que cita a Wiwat Piyawiroj, vicepresidente ejecutivo en funciones de THAI. La compañía ya se ha comprometido a mejorar su sistema de reserva para solventar este problema.
Cierto que hay en informática una limitación de caracteres pero 25 me parecen una ridiculez. Hace años se trabajaba con 30, por la escasez de espacio en los discos, pero hace muchos años que se trabaja con 40, 50 o 60 para los nombres. Pero es que, además, en el billete supongo que figurará el número de pasaporte, amén del nombre. Por tanto, me parece una excusa barata que le hayan hecho pagar 80 euros más por emitir otro billete… ¡que supongo que también tenía 25 caracteres para el nombre!
Ese tipo de imbecilidad informática de limitación de caracteres te la encuentras en muchos lugares. Se debe a la contratación de infromáticos de baja calidad o jefes de programación ineptos que son unos chulos dictadores. Crean innumerables problemas y pérdida de clientes a las compañías por culpa de semejantes imbéciles que programan como subnormales y carecen de conocimientos comerciales.
Una de las cosas que más desprecio es el forzar a las personas a adaptarse a los sistémas informáticos en vez de adaptar la informática a las necesidades humanas.
Si hubieran sido catalanes sólo habrían puesto las iniciales (en minúscula y sin puntos).
Por lo que pudiera pasar con el monedero…