Sentencia del caso Gürtel y sentencia del caso Noós: la doble vara de medir
Hasta la saciedad en todos los medios de comunicación se ha lapidado al Partido Popular, en el sentido de que había sido condenado a título lucrativo en la Sentencia del caso Gurtel, y por ende a don Mariano Rajoy, a la sazón presidente del gobierno.
En la sentencia por corrupción de la Gurtel, partido popular y dirigentes, entran todos en el mismo saco… La moción de censura se “justifica” por la corrupción del partido popular, con su máximo responsable, Mariano Rajoy, a la cabeza.
En el caso de la sentencia de Noós, han sido condenados el señor Urdangarín y otras personas a varios años de prisión, y su esposa, la Infanta de España Cristina de Borbón y Grecia, como beneficiaria a título lucrativo, a abonar una determinada cantidad de dinero, de la que se había beneficiado, al erario público. (Cantidad reducida por el Tribunal Supremo, dicho sea de paso).
El testimonio en el juicio oral del socio de Urdangarín, Diego Torres, de que la Casa Real estaba al corriente de las “actividades” de Urdangarín, ha pasado desapercibido para la opinión pública, y no se le ha dado relieve o importancia alguna.
Por mucho que se quiera “minimizar” la responsabilidad de la Casa Real en toda esta malversación de dinero público en su propio beneficio, es decir de la familia Borbón, lo cierto es que los hechos son los que son, y el Tribunal Supremo ha respetado totalmente los mismos, reduciendo sustancialmente las penas, por razones que desconozco, pero que intuyo.
Se envía a Urdangarín y a su esposa primero a Washington, como algo ejecutivo de la Telefónica, a la que por cierto no sé qué se le ha perdido en USA, y posteriormente se les “destierra” a Ginebra, donde al parecer La Caixa tiene alguna oficina, de su Obra Social, encima. ¡Claro que a lo mejor piensan que buscar acomodo a esta señora es la parte fundamental de su Obra Social!
En definitiva, hay una responsabilidad “in vigilando” de la Casa Real, que sabía perfectamente lo que estaba sucediendo, y no dijo nada…, hasta que explotó el escándalo judicial, o lo que es peor, si dijo y no le hicieron ni caso.
La mayoría de los medios de comunicación, siempre al servicio del poder, han transmitido a la sociedad española esta doble vara de medir la responsabilidad en dos sentencias similares, en las que se condena a un tercero a título lucrativo, por haberse beneficiado económicamente del delito, pero sin haber participado en el mismo.
A un tercero que además, y en el caso del PP, cuya responsabilidad estaba circunscrita a solo dos ayuntamientos de la comunidad de Madrid.
El trato de privilegio dado por la mayoría de los medios de comunicación social a la sentencia del caso Noós es palmario y deberían hacérselo mirar.
*Jurista y secretario general de Manos Limpias
La monarquía ha sido salpicada y el único que vale y ha sufrido los sacrificios de la formación es Felipe Vi. El resto, boditas y maniobras. Pobre reina emérita doña Sofía, que supo mantener sus papeles callando y en silencio. Espero que, a estas alturas, el monarca haga valer su autoridad como Jefe del Estado sin cagarla de nuevo, como con la rúbrica de la investidura de Torra, de todo punto ilegal. Es un mandado. Eso es lo que importa, menos su cuñado.
Así es.
Lo triste del caso es que los medios de comunicación social no saquen las consecuencias correspondientes: LOS BORBONES HAN QUEDADO A LOS PIES DE LOS CABALLOS, y la Casa Real -o Irreal, según se mire-, también.
Medir o no medir. Ésa es la cuestión…