El etnocentrismo
El etnocentrismo puede ser atractivo puesto que reafirma la “pertenencia” del individuo al grupo, al mismo tiempo que ofrece confortantes explicaciones simples de los complejos fenómenos sociales.
Los grupos etnocéntricos parecen sobrevivir mejor que los grupos tolerantes. El etnocentrismo justifica el sacrificio y santifica el martirio. La actitud de “yo prefiero mis costumbres”, aunque reconozco que pueden no ser mejores que “las tuyas”, no es el tipo de fe por la que los creyentes consagrados irán cantando hacia su propia muerte.
El etnocentrismo refuerza el nacionalismo y el patriotismo, de ahí mi respeto y admiración por el pueblo israelí en la defensa de sus costumbres, aunque no comprenda las dobles lealtades. Sin etnocentrismo, una conciencia nacional vigorosa es probablemente imposible. El nacionalismo no es sino otro nivel de la lealtad de grupo. Periodos de tensión y de conflictos nacionales están siempre acompañados de una intensificada propaganda etnocéntrica que no se ha llevado a cabo por el Gobierno Central de Madrid en España y que ha sido llevada a cabo por las nacionalidades emergentes de Cataluña y Vascongadas. Es seguro que campañas semejantes son una preparación para los sacrificios que se esperan y que ya han sido puestos en conocimiento de la opinión pública en estas Regiones.
El etnocentrismo también actúa para desalentar el cambio: si nuestra cultura es superior ¿entonces por qué entretenernos con innovaciones ajenas? Desde los hebreos bíblicos hasta los japoneses de siglo XIX, el etnocentrismo se ha utilizado para desalentar la aceptación de elementos ajenos en la cultura. Tales esfuerzos para evitar que la cultura cambie nunca tiene un éxito completo; el cambio sobrevino tanto para los hebreos como para los japoneses. Sin embargo, si la gente comparte una fe serena e incuestionable en la bondad de su cultura, como no ocurre en España, una convicción tan completamente aceptada que no necesite ninguna prueba, como ocurre con Cataluña y Vascongadas en el ámbito independentista, entonces se demora el cambio y se hace más difícil y duradero la vuelta a la conciencia nacional española. El etnocentrismo no discrimina a nadie para desalentar el cambio cultural, de ahí mi coincidencia con Grupos de intelectuales que se orientan en este sentido. Desalienta tanto a los cambios que podrían desorganizar la cultura y los cambios que la ayudarían a obtener sus metas.
Puesto que ninguna cultura es estática, toda cultura debe cambiar si debe sobrevivir. El etnocentrismo en la India ayuda actualmente a impedir que se oriente hacia el comunismo, pero la India no puede permanecer no comunista a menos que modernice rápidamente su tecnología y controle el crecimiento de su población, y estos cambios son demorados por el etnocentrismo. En una época de bombas atómicas y guerras que pueden desatarse oprimiendo un botón, cuando la Nación debe probablemente unirse o morir, el etnocentrismo ayudara a mantenerla apegada a conceptos de soberanía nacional. Bajo algunas circunstancias, pues el etnocentrismo promueve la estabilidad cultural y la sobrevivencia de grupo; en otras circunstancias, el etnocentrismo condena la cultura al fracaso y el grupo a la extinción como puede ocurrir en las Regiones nacionalistas si se consigue que el etnocentrismo nacional español se desarrolle como tal y, esto, solo se puede conseguir si los españoles abandonan sus complejos al definirse como españoles y valoran su cultura amasada durante siglos en base a la fe cristiana.
*Teniente coronel de Infantería y doctor por la Universidad de Salamanca
Muy buena exposición. Solo un añadido: si el etnocentrismo solo se entiende como una conciencia de un gran grupo completamente consciente de sus decisiones culturales, religiosas, etc, sin tener en cuenta la genética de poblaciones, el etnocentrismo no se sostiene ni a medio plazo. Hoy sabemos que el 90% de nuestras conductas son de origen genético y “solo” el 10% (puede que incluso menos), el libre albedrío. Sgnifica que estamos preprogramados al 90% por las fuerzas de selección natural para que cada raza con sus diferencias genéticas se comporten de maneras diferentes, aunque como Humanos tengamos mucha genética en común… Leer más »
P.D.: El caso del separatismo catalán, en mi opinión, utilizan un etnocentrismo basado en falsos dataos históricos y falsos datos genéticos y antropológicos. Hay grupos que se separan de su propia raza y que tras un periodo de tiempo que va entre los 4.000 y los 5.000 años crean una nueva subraza. Ese tiempo es el mínimo necesario, acordado consensuadamente por antropólogos a nivel mundial, es el mínimo para que una nueva genética con un número mínimo de mutaciones producidas por la presión selectiva, la selección artificial y los posibles mestizajes de razas y subrazas diferentes que han aportado nuevos… Leer más »
Si, como el Arzaius, que decía que la raza vasca tenía RH negativo. Anda ya…
“El problema racial es la clave para la Historia Mundial… Todo es raza, no hay otra verdad.”
Benjamin Disraeli.
Pues Disraeli si dijo eso, dijo una estupidez.
Soy partidaria del patriotismo porque en la Patria cabemos todos los que aceptamos nuestras leyes.
Pero el nacionalismo y el etnocentrismo llevan a discriminar a grupos, porque buscan no la unidad sino la uniformidad, y que por narices todos debamos ser de la misma raza, religión, ideología, etc. Y el que no encaje se vuelve enemigo.