Gadafi, gran ausente en el entierro de su hijo
Último adiós al hijo menor de Muammar el Gadafi. Miles de personas han acompañado a la comitiva fúnebre hasta el cementerio de Tripoli. Saif al Arab fue abatido el pasado sábado en un bombardeo de la misión de la OTAN en Libia.
La Alianza asegura que el objetivo no era el hijo del dictador, sino un centro de control. Gadafi ha sido la gran ausencia en el funeral, al que sí han asistido dos de sus hermanos. Esta muerte aumenta el peligro de los extranjeros residentes en el país. Algunos grupos apuntan como objetivos las Embajadas británica e italiana y la ONU ha retirado a una docena de personas de su plantilla tras un asalto a uno de sus complejos.
Las fuerzas de Gadafi bombardean intensamente Misrata
Por otra parte, las fuerzas del dirigente libio, Muamar Gadafi, están bombardeando intensamente este lunes el puerto de la ciudad de Misrata, la única bajo control rebelde en el oeste del país y asediada desde hace semanas, según ha informado un portavoz de los sublevados.
“El puerto también está sufriendo hoy intensos bombardeos, han disparado unos 100 cohetes hasta ahora. El bombardeo de Misrata no ha cesado en las últimas 36 horas”, ha subrayado el portavoz, que se identificó a sí mismo como Hassan al Misrati. “Parece que la OTAN se ha olvidado de nosotros y esto ha envalentonado a las fuerzas de Gadafi. Las fuerzas de la OTAN no han hecho nada en las últimas 24 horas”, ha lamentado el portavoz.
Ayer, otro portavoz rebelde había informado de que se estaban produciendo combates con las fuerzas de Gadafi por el control del aeropuerto de la ciudad. “Están teniendo lugar intensos combates por el control del aeropuerto. Los revolucionarios (rebeldes) están logrando avances. Pronto van a conseguir hacerse con el control total, si Alá quiere”, aseguró el portavoz de los sublevados, identificado como Sami.
Enlace vital
El puerto de Misrata es la única vía de acceso a la ciudad, asediada y bloqueada desde hace más de dos meses por el Ejército libio. Se trata de una infraestructura de vital importancia para la supervivencia de la urbe, tanto para los combatientes rebeldes como para la población civil, que reciben suministros militares y de bienes de primera necesidad desde el mar.
El puerto es además la única vía para evacuar a los cientos de heridos, militares y civiles, que están causando los combates y el bombardeo de los tanques y la artillería pesada gadafista. En sus muelles se encuentran acampados cientos de refugiados, especialmente trabajadores inmigrantes, esperando a ser evacuados por las organizaciones internacionales, con serias dificultades para desarrollar su labor debido a la violencia.