Por un informe académico sobre historia
Veo con satisfacción inmoderada que, al fin, la Academia de la Historia o RAH –adherida al artículo 4º de sus estatutos que dice que también emitirá informes a propuesta motivada de particulares cuando lo estime oportuno- se despereza a requerimiento de don Bieito, el eximio director del ABC y se marca –con fecha 7 de marzo de 2019- un dictamen inequívoco aprobado por el Pleno de esa Real Academia según afirma su presidenta Carmen Iglesias, condesa de Gisbert, sobre hechos acaecidos entre el 10 de agosto de 1519 por Fernando de Magallanes, que partía de Sevilla con 237 (aproximadamente, eso sí) compañeros y fallecido en Mactán, a 1522 en el que arribaba Juan Sebastián Elcano a Sanlúcar en 1522 con los 18 restantes (parece ser que exactos) y todo ello a cargo de los presupuestos españoles.
Total, queda así absolutamente claro verdausté, que es evidente que ha sido tal cual se afirma y se santifican y zanjan los hechos acaecidos hace de 497 años a 500, para que sepan cuantos esto alcancen a leer con las gafas de ver en cuanto se refiere a la españolidad de estos los hechos de la primera vuelta marítima al planeta. No se conculcan, parece ser, conductas machistas, ni tan siquiera violencias de género, de número o de caso o malas represiones franquistas, como fueran con el maquis. Libres, pues, de acometidas socialistas o podemitas. Así, cualquiera.
No dejan claro si les parecería correcto o no profanar la sepultura de Elcano si existiese –pues murió bien de escorbuto o toxina de ciguatera- y arrojado al mar como procedía entonces, en 1526, cuatro años después de su arribada, en otra expedición a las Molucas, porque no paraba, pero deducimos que no les parecería lo propio. Bien es cierto que este pronunciamiento lo suponemos, pero nada nos inclina a la certeza, vistas las conductas ante otros casos.
Todo esto, me malicia conocer las razones de que hechos acaecidos entre 88 y 44 años, desde 1931 a 1975, plenos de bibliografía y testimonios como no podría soñar ni de lejos la epopeya de circundar la Tierra por mares desconocidos, todo lo que es lo referente a la II república española, su bolchevismo de inmediato y a la guerra de los 986 días que puso fin a aquel desastre y los subsiguientes años triunfales, no puedan ni merezcan -de una vez por todas- quedar zanjados en verdad y certeza sin resquicios a inventos del TBO o versiones libres para la radio.
Vamos, que la Academia no tenga nada que decir sobre el respective de la Memoria Histórica del José Luis este y sus guitarras, y calle putement sobre conductas y hechos que se dan por ciertos en la prensa y TV del movimiento perpetuo, que reta a los libros y documentos gráficos de la época con postverdades y otras pasamanerías un tanto frívolas.
¿Están bien las pretensiones profanadoras de sepulturas de estos mandatarios que nos gastamos? ¿No se les puede reprochar algo en base a esas tendencias mediante dictamen del defensor del menor? ¿Qué les parecen a estos sabios las cosas que se cuentan en libros de texto para inocentes y tiernos niños españoles? ¿No tienen nada que denunciar de los grotescos inventos catalanes? ¿Qué les parecen estas especulaciones de inopes que cobran del peculio, del pot que hacemos anualmente todos los que no tenemos sociedades interpuestas o traspuestas? ¿Tienen que pedir su opinión aclaratoria los directores de periódicos? ¿No valemos los demás para el caso? ¿No importa la verdad en los libros de Historia per se? ¿No pasan por sus manos? ¿Qué coño pasa?
Ya me gustaría saberlo.
“¿Qué coño pasa?”
Eso me pregunto yo, que coño pasa para alguien llame “años triunfales” a una dictadura. Cuando todavia vive bastante gente que la padecio. Cuando todavia vive gente que vivio la represión, las cartillas de racionamiento, la emigración masiva,y muchas atrocidades mas.
Los catalanes no pueden manipular la historia, pero ustedes tampoco. Y sobre todo cuando para muchos no es historia, es su vida.