Giro de Italia.- Contador se adelanta al Etna
“Ya estoy acostumbrado a que todos me vigilen”. Alberto Contador ha ganado las cinco últimas grandes vueltas en la que se ha alineado. Normal que todos le miren. Por eso, el viernes, cuando cedió unos metros en el empinado sprint de Montevergine, se despertó la esperanza de sus rivales. Le vieron débil. O eso creyeron. Contador ha puesto las cosas en su sitio. Es el gran favorito.
En el repecho de Tropea, curveado y perfecto para ciclistas con pegada, ha descorchado su tremenda clase. Inesperadamente. “Estaba bien colocado. Me sentía bien”, ha explicado. Y ni Nibali, ni Scarponi han podido seguirle. Sólo el italiano Óscar Gatto, que había saltado unos metros antes, se le ha escapado por apenas unos metros. Pero este segundo puesto le vale catorce segundos a Contador: los dos que le ha sacado al grupo encabezado por Petacchi, más los doce de la bonificación. Ya es quinto en la general -liderada por el holandés Weening-, por delante de todos sus adversarios.
Primera aduana
Un puñado de segundos con efecto moral. Este domingo se escalará dos veces el Etna. Será la primera aduana del Tour. El volcán, activo desde siempre, no deja de arrojar ceniza. Parte de la subida está cubierta de una alfombra gris. Da igual.
El Giro ha anunciado que la etapa se disputará. “Habrá diferencias”, ha dicho Contador. Hoy, él ha marcado la primera muesca sobre Nibali, el rival que creció con el Etna en la ventana, y Scarponi. En el Etna se verá también la altura de Igor Antón, Kreuziger, Arroyo, Menchov, Joaquín Rodríguez… De todos. A la vista del volcán, que mira el Giro desde arriba. Como Contador desde hoy.