La izquierda ha parasitado el feminismo convirtiéndolo en excluyente
Ayer 8 de marzo fue el día del feminismo solo y borracho, el día del feminismo yo siento decirlo, pero excluyente. Ayer se celebraron las manifestaciones de los partidos de izquierda, grupos de izquierda con motivo del Día de la Mujer y no digo manifestaciones de mujeres porque hubo muchas mujeres y, además, manifestaciones razonablemente multitudinarias. Pero hubo mujeres como las dirigentes de Ciudadanos expulsadas de esas manifestaciones. Lo que le gritaban a Begoña Villacís, escuchen ustedes. Bueno, pues con eso ya está dicho todo.
Las hiperventiladas… Siempre tiene que haber hiperventilados en todas partes, eso es evidente, pero las hiperventiladas ya lo ven ustedes. “¡Vete Begoña Villacís a trabajar a Burger King!” Podrían decir de cajera de un supermercado, que luego se llega a ministra. No, no, cajera de un Burger King. Ese el feminismo antipático usado como arma arrojadiza.
¿Saben ustedes qué es lo que pasa? Es decir, la izquierda se apropia del feminismo y dice todo el que quiera ser feminista, además, tiene que aceptar el pack completo. Usted no puede ser feminista sin luego tragar con todas las demás consignas de la izquierda, todos los demás dogmas de la izquierda, cuanto más extrema mejor. Entonces si no acepta todo lo demás, usted no es feminista. Dice, “ah, yo soy feminista, pero no les voto a ustedes”. No, no, no, esa es la cuestión,.
Si Podemos y el PSOE tuvieran que sacar a gente a la calle detrás de las siglas, hombre, les seguiría muy poca gente, así que han ocupado, han parasitado un movimiento que era transversal, es decir, la izquierda hace mucho tiempo que ha dejado de buscar lo universal, mucho tiempo. ¿Para qué? Para buscar lo identitario y, además, haciendo de esa causa una causa excluyente.
No les importa tanto reivindicar medidas para una mayor igualdad de las mujeres como señalar un territorio del que expulsar a quienes no son como ellos, incluídas mujeres que no comulgan con ese credo, las Villacís de turno, es decir, territorio para señalar buenos y malos y para seguir disfrutando de polarización a la sociedad española.
Como recuerda siempre Expósito, este año está marcado por récords de violencia contra las mujeres. Este año. Ni una palabra de este Gobierno. Segundo dato, según un Instituto de Investigación sobre Bienestar de Mujeres en la Universidad de Georgetown, en el 2018 con un gobierno fascista y heteropatriarcal, España era el quinto mejor país del mundo para que naciera una mujer. Ahora estamos en el 15 con un Gobierno feminista progresista.