Condenado un matrimonio a tres meses de cárcel por no asistir a clase su hija
La Audiencia de Valladolid ha condenado a un matrimonio a tres meses de prisión como autores de un delito de abandono de familia por el incumplimiento de los deberes de escolarización, inherentes a la patria potestad. La decisión judicial confirma una condena anterior del juez de lo Penal número 3, y rechaza el argumento de los padres, quienes manifestaron que la niña, de 10 años y estudiante de 4º de Primaria, faltaba a clase porque “era pequeña y a veces estaba cansada”.
Los magistrados consideran probado que desde el curso académico 2003-2004 y hasta el 2007-2008 la niña faltó en numerosas ocasiones sin justificación alguna a las clases impartidas en el colegio público Parque Alameda de la capital vallisoletana. Tanto profesores como responsables municipales requirieron reiteradamente a los progenitores que pusieran remedio a tal situación, sin que ello se produjera, por lo que la Fiscalía de Valladolid formuló la acusación contra los padres en un juicio celebrado a finales del pasado mes de mayo.
El nivel de absentismo de la pequeña se plasmó en los informes de la Junta de Castilla y León y en los emitidos por el Ayuntamiento de Valladolid, que fueron ratificados en la vista oral. El grado de inasistencia a las clases nunca fue inferior al 43%, llegando al 77% en diciembre del 2006. La directora del centro llegó a afirma que la niña faltaba más de la mitad de los días, lo que provocó que suspendiera el curso de 4º.
“Conducta despreocupada”
Los profesores pusieron en comunicación de los padres estas circunstancias, advirtiéndoles de la obligación de escolarizar a su hija hasta los 16 años, sin que los requerimiento de la Policía Municipal ni de las cartas enviadas por el centro hicieran efecto. Trabajadores sociales hablaron con los padres varias veces, quienes justificaban las ausencias por la salud de la niña, pero sin acreditar trastorno alguno en el juicio.
“En el presente caso ha quedado patente la conducta despreocupada por parte de los padres en orden a la asistencia de su hija a clase, así como la falta de colaboración de aquellos con las asistencias sociales y educativas”, dice la sentencia de la Audiencia, que recrimina a los progenitores y les condena a tres meses de prisión y al pago de las costas judiciales.