Delincuencia juvenil: Menores para ser encarcelados, pero mayores para delinquir
El “buenismo” político intentó convencer a la sociedad de que los menores no delinquen, de que todo el mundo es bueno, siguiendo las tesis de Rousseau. La Ley 5/2000 reguladora de la responsabilidad penal del menor, parte de la base de que los menores son víctimas, no autores de delitos, y claro con esta falsa premisa no se va a ninguna parte.
Los códigos penales del franquismo reconocían la circunstancia atenuante de la minoría de edad, pero sancionaban igualmente al menor infractor, como no podía ser menos.
Pero con la llegada del PSOE al poder, y los tontos útiles del PP, las dos caras de una misma moneda, comenzó a desarrollarse la teoría de que los menores no delinquían, que había que reeducarles, que la culpa no era de ellos sino del sistema, de la sociedad, etc., y se desarrolló un ordenamiento jurídico específico que todos los profesionales del Derecho sabemos perfectamente que ha fracasado, y que no consigue los objetivos que se propuso.
Pero es que, además, está mal hecho. Limitar a partir de los catorce años la edad en la que un menor delinque supone la existencia de una amplia bolsa de chicos y chicas de edades inferiores, que son utilizados por mafias y organizaciones delictivas, o de motu propio, con la seguridad de que, hagan lo que hagan, les va a salir gratis, pues no les pasará nada. En efecto, el artículo 1, 1, estipula que “Esta Ley se aplicará para exigir la responsabilidad de las personas mayores de catorce años y menores de dieciocho por la comisión de hechos tipificados como delitos o faltas en el Código Penal o las leyes penales especiales”.
Es cierto que no era bueno para los jóvenes tenerles en prisiones comunes, auténticas escuelas de delincuencia, además del peligro de violaciones o abusos sexuales que podían sufrir en manos de internos adultos, pero de ahí a establecer un régimen penal específico, dónde todo son derechos y las obligaciones son mínimas, hay un trecho. Y esta sobreprotección de los menores, que en su vida ordinaria se comportan como mayores, sobre todo desde los 15 a los 18 años, da lugar a toda clase de abusos.
A título anecdótico, pero que podemos elevar a categoría, citaré un caso paradigmático, ocurrido hace casi una década. (Actualmente la situación es todavía peor, pues los delitos de los menores han aumentado exponencialmente).
Según el diario El Mundo del 18 de octubre de 2012, diez estudiantes en huelga asaltan el Colegio de los Salesianos en Mérida, tirando al suelo al encargado de mantenimiento y agrediendo a varios profesores, al grito de “¡Dónde están los curas que los vamos a quemar!”. Al resistirse los profesores e intentar repeler el asalto, les amenazaron para que no les hicieran frente porque “si te grabamos con los móviles se te cae el pelo porque somos menores”.
Avisada la Policía Nacional, se personan en el centro, pero no intervinieron, pues según uno de los profesores, José María: “Los agentes nos dijeron que eran menores y que no podían cargar contra ellos porque sería peor”. Es decir, la Policía no actúa, pues está acobardada, y sabe que al tratarse de menores al final los que acabarán denunciados y sancionados serán ellos, y no los asaltantes.
¿Qué Estado de Derecho es éste? Mayores para delinquir, pero menores para ser detenidos y exigirles las responsabilidades a que haya lugar.
*Abogado y escritor.
La pura y dura realidad.
Muchos menores, sobre todo los que podríamos llamar “perros callejeros”, es decir aquellos que viven en la calle, procedentes de familias desestructuras, MENAS, etc., son unos auténticos HIJOS DE PUTA (no todos por supuesto).
Hay que tener en cuenta que aunque solo tengan 17 años, por ejemplo, HAN VIVIDO O MALVIVIDO MÁS QUE UNA PERSONA, NORMAL Y CORRIENTE, DE 50 AÑOS…
¡Y algunos -muchos-, son extremadamente violentos, suelen ir armados con armas blancas, y en ocasiones hasta con pistolas y revólveres, etc!
QUE DIOS NOS COJA CONFESADOS SI NOS ENFRENTAMOS A CUALQUIERA DE ELLOS…
¿Alguien sabe -supongo habrá datos estadísticos, PERO OCULTOS-, del número de MENAS que pueblan nuestras calles…?
SE HABLA DE VARIAS DECENAS DE MILES, lo que sería realmente preocupante, pues cada MENA es una bomba de relojería, en nuetras calles.
1. Los políticos, que nos roban y maltratan, a todas horas, y en todos los sentidos, y nunca les pasa nada, y
El problema no es solo LA DELINCUENCIA JUVENIL, sino también LA DELINCUENCIA DE ADULTOS…
Los jóvenes aprenden de los mayores, y cómo ven que a sus padres, amigos adultos, etc., NO LES PASA NADA, hagan lo qu ehagan, pues al final SE ACABAN ENVALENTANDO, Y PIENSAN QUE TODO EL MONTE ES ORÉGANO.
Hace falta leyes más duras, para que el que la haga, la pague.
No es de recibo que los delincuentes entren en el juzgado por una puerta, y a la media hora salgan tan tranquilos y contentos…
La población está asustada y desmoralizada, y la policía, guardia civil, etc., TODAVÍA MÁS, pues ven que todo su trabajo y esfuerzo, a la hora de la verdad, no sirve para nada.
Conozco a menores que son unos auténticos hideputas. Esa es la auténtica verdad…
Para evitar EL EFECTO LLAMADA, y más ahora, con tanta entrada ilegal de delincuentes foranos, con la PAGA UNIVERSAL A TODOS LOS QUE LLEVEN UN AÑO RESIDIENDO EN ESPAÑA, aunque no hayan trabajado nunca, ni aportado nada a Hacienda y a la Seguridad Social (por lo visto, EL DINERO PBLICO NO ES DE NADIE, Carmen CALVO dixit), la única solución lógica, justa y viable, es devolverles a su país de origen, Y QUE LOS DISFRUTEN ELLOS.
Los MENAS, en cuanto alcancen los 18 años, deberían ser todos devueltos a sus países de origen, pues aquí ya tenemos 6 o 6 millones de parados, y no necesitamos más desempleados, que vivan del dinero público…
Y ADEMÁS HACERLES PRUEBAS MÉDICAS PARA DETERMINAR SU EDAD REAL, pues una buena parte son mayores de edad. (Hay radiografías de los huesos, que percimen saber con exactitud la EDAD REAL DE UNA PERSONA, Y NO LA QUE DICE TENER).
Los DELINCUENTES JUVENILES están envalentonados, pues saben que si alguien les toca un pelo…, se le cae el pelo.
Y OJO QUE NO TE PONGAN UNA DENUNCIA FALSA POR ABUSOS SEXUALES, que van directo a la cárcel, y desacreditado para el resto de tu vida.
Los llamados MENAS, menores no acompañados, que pueblan nuestras calles y siembran la inseguridad ciudadana, por su carácter violento, el hecho de que siempre vayan en grupo de 4 o 5 individuos, etc., DEBERÍAN SER DEVUELTOS A SUS PAÍSES DE ORIGEN, nada más cumplir los 18 años, y que los “disfruten” ellos. Solo excluiría a: Aquellos que hayan sido adoptados por una familia de españoles de origen. Los que estén trabajando, y demuestren llevar una vida honrada, y Los que estén estudiando, con aprovechamiento en los estudios. LOS DEMÁS, ES DECIR, CASI TODOS, DE VUELTA A SUS PAÍSES DE ORIGEN,… Leer más »
Estas leyes habría que cambiarlas ya , así como las de ocupación ilegal de viviendas que lo único que fomentan son las mafias, los abusos y las injusticias con la gente decente. Políticos….¡¡¡despierten ya!!!