Enrique de Vivero en el acto celebrado ayer en Torremolinos.

La Barbacoa La Cañada de Torremolinos, popular por su colección de vespas y coches antiguos, fue el escenario elegido por Enrique de Vivero dentro de su periplo por toda la provincia de Málaga para defender su candidatura a la presidencia de Vox.

Rodeado por casi un centenar de afiliados y simpatizantes procedentes de Torremolinos, Benalmádena y Alhaurín, Enrique de Vivero desgranó su proyecto político para Málaga, que ha despertado expectación e ilusión a partes iguales. Pretende que Vox reedite en el conjunto de la provincia los éxitos electorales de Alhaurín de la Torre. Allí, el partido verde logró superar en votos a PP y PSOE en las elecciones generales de abril de 2019. De hecho fue el único municipio de la provincia donde Vox logró imponerse como primera fuerza política. Enrique de Vivero era el coordinador del partido de Abascal en este municipio.

El candidato de Vivero destacó que todos los candidatos alternativos tienen una idea muy parecida de lo que quieren para Vox, y “no hay grandes diferencias ideológicas”.

En ese contexto tiene claro que en este proceso de primarias el único beneficiado será José Enrique Lara, actual presidente de Vox Málaga. Enrique de Vivero acusó a Lara de viciar las elecciones por incluir en su candidatura a dos cargos electos.

La siguiente estación de la candidatura de Enrique de Vivero será Marbella, con un acto previsto a las 19:45 de hoy martes en el Hotel los Monteros, uno de los más emblemáticos de la Costa del Sol.