El fracaso de la política migratoria de Europa: Alemania considera fracasada la política europea de inmigración
En una reunión a puerta cerrada con la directiva de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU), Merkel expresó anoche con disgusto su frustración. Después de lograr un acuerdo histórico en el interior de la gran coalición, en el que incluso sus socios bávaros de la CSU estuvieron de acuerdo, el gobierno alemán había acordado la acogida de 1.500 refugiados de las islas griegas.
«Pero de nada sirve tomar la iniciativa si después nadie te sigue», reconoció, tras informar que ningún país europeo parece dispuesto a una decisión en este mismo sentido. Su grupo parlamentario, reticente a la medida y consciente de que fue precisamente la acogida de refugiados el elemento que sirvió de disparador a la extrema derecha en 2015, accede al trasvase desde Lesbos solamente si otros países europeos hacen su aportación en el mismo sentido, algo en lo que Merkel tenía puesta una «amplia confianza». «Pero al parecer hay gente que sigue pensando que si entierras la cabeza en la arena no te alcanzará», juzgó con amargura la canciller alemana, que dio por fracasada la política europea de inmigración.
«Todos sabíamos que las condiciones en las islas griegas eran insostenibles, y que lo habían sido durante mucho tiempo», reflexionó en voz alta la canciller alemana, que se remontó al gobierno de Alexis Tsipras. «La situación con el primer ministro Kyriakos Mitsotakis ha mejorado un poco», mencionó también, en referencia a los 12.000 de un total de 25.000 refugiados trasladados de Moria al continente. «Pero 13.000 personas en un campo pensado para 3.000… esas condiciones humanitarias no se pueden soportar», insistió, anclada en principios del cristianismo que ella tiene interiorizados como hija de pastor y que la CDU lleva en las siglas del partido, como el hecho de que si estás en condiciones de ayudar al que lo necesita, tienes el deber de hacerlo, aunque ello te perjudique. «Lesbos y el campo de Moria muestran toda la miseria de la política migratoria europea, que no es una», lamentó. «Cuando Acnur te dice que rara vez han visto un campo de refugiados en el mundo en esas condiciones, estamos hablando de los valores de Europa y de la capacidad de Europa para actuar».
Constató la derrota en el intento de forjar una política europea común, aunque dejó una puerta abierta a la esperanza. «Sin embargo -dijo-, creo que Europa vale tanto para nosotros que deberíamos intentarlo».Para la canciller alemana resulta inexplicable que el resto del países europeos, al unísono, asuman posiciones que en Alemania solo defiende la derecha identitaria. El único partido político en contra de acoger a las familias con niños a las que el incendio ha dejado sin campamento en Lesbos es el partido antiextranjeros y antieuropeo Alternativa para Alemania (AfD). Algunos medios de comunicación de los Länder orientales también lanzan mensajes en ese sentido, aunque son minoritarios. «Imagínense que llama a su puerta un tipo que pide ser acogido y usted le ofrece su dormitorio para huéspedes. Pero en algún momento deja de ser suficiente para él y se apodera de la sala de estar e incluso de su propia habitación. ¿Cómo debe uno reaccionar a eso?», ha dicho esta semana en un programa de radio el popular locutor André Hardt, cuyo programa se emite en horario de mañana en Radio Leipzig, Radio Dresde y Radio Chemnitz.
Pero se trata de una línea de pensamiento minoritaria en Alemania. En el otro extremo, el vicepresidente del Partido Socialdemócrata (SPD) y hasta hace poco líder de las revolucionarias juventudes del partido, Kevin Kühnert, ha dado a Seehorf un plazo de 48 horas para presentar propuestas viables de rescate de todos los refugiados de Moria, emplazándolo a dimitir en caso contrario. Los Verdes, por su parte, critican la solución parche a la que en su día llegó la UE con Turquía, que supuso pagar dinero al Gobierno de Erdogan a cambio de que mantuviese contenida en su territorio la afluencia de refugiados, y piden un programa alemán de acogida más amplia.
«La admisión a través de la UE es una necesidad absoluta, y esto es válido para los 13.000 refugiados», ha dicho la portavoz verde Luise Amtsberg, que considera que «Alemania es el lugar apropiado para proteger a todos ellos».
Más Europa
«Créanme. Sin una efectiva política europea de asilo, no lograremos una solución eficaz ni duradera», insistió ayer el ministro de Interior, Horst Seehofer, ante el pleno del Parlamento alemán «Necesitamos una mejora sustancial del trabajo conjunto con el resto de los socios europeos en este campo -dijo-, la solidaridad no significa solamente que cuando es necesaria financiación llega de la UE, la solidaridad es un principio que circula en los dos sentidos».