Donald Trump, ante el robo de las elecciones: “Esto es un fraude al pueblo estadounidense, una vergüenza para nuestro país”
La noche electoral entró en el escenario más temido: un recuento muy ajustado en los Estados decisivos que extienda la incertidumbre de un más que posible fraude. Y Donald Trump ha desenterrado el hacha de guerra. “Esto es un fraude al pueblo estadounidense. Una vergüenza para nuestro país”, ha dicho el presidente desde la Casa Blanca, pasadas las dos de la madrugada del miércoles hora de Washington (las ocho, hora española). “Francamente, hemos ganado las elecciones. Nuestro objetivo ahora es garantizar la integridad de las mismas. Iremos al Tribunal Supremo. Es un momento muy triste”.
Horas después, a las 10.00 del miércoles, a medida que el recuento del voto por correo ofrecía mejores expectativas para el demócrata Joe Biden, el presidente Trump ha vuelto a la carga. “Anoche estaba liderando, a menudo de manera sólida, en muchos Estados clave, casi siempre gobernados y controlados por demócratas. Entonces, uno por uno, han empezado a desaparecer mágicamente mientras se recontaban las sacas de votos sorpresa. MUY EXTRAÑO. Y todos los encuestadores se equivocaron completa e históricamente”, ha tuiteado. Twitter, como también hizo en el primero de sus mensajes, ha colocado una advertencia diciendo que el tuit “puede ser engañoso”.
Trump ha seguido a la carga. “¿Cómo puede ser que cada vez que cuentan lotes de votos por correo son tan devastadoras en su porcentaje y poder de destrucción?”, se ha preguntado, ignorando que todo el mundo daba por descontado que el sentido del voto por correo sería muy mayoritariamente demócrata, pues la campaña de Biden, más cauta con la pandemia, incentivo el voto no presencial entre sus seguidores.
Las elecciones se encaminan así al Tribunal Supremo, si Trump cumple la amenaza de su primer tuit, corte en la que semanas antes de los comicios los republicanos colocaron a la juez conservadora Amy Coney Barrett, tras el fallecimiento de la progresista Ruth Bader Ginsburg, inclinando la balanza aún más hacia la derecha (seis votos contra tres) en la más alta instancia judicial del país. El horizonte recuerda a las elecciones del año 2000, en las que el Supremo acabó decidiendo el resultado, entregando la victoria al republicano George W. Bush contra el demócrata Al Gore por solo 527 votos tras un complicado recuento en Florida.
“Vamos muy por encima, pero nos están intentando ROBAR las elecciones. Nunca les dejaremos que lo hagan. ¡No se pueden emitir votos después de que las urnas estén cerradas!”, había advertido el presidente poco antes, en su primer tuit de la velada, pasada la medianoche. Twitter ha añadido una advertencia en el mensaje diciendo que el contenido “ha sido objetado y puede ser engañoso”. El presidente se refería a Pensilvania. La Corte Suprema de ese Estado ha permitido que la Junta Electoral reciba las papeletas por correo hasta el viernes, siempre que tengan el matasellos de este martes.
Quisiera dar las gracias a Ruth Bader por fallecer tan oportunamente, siempre desde el maximo respeto.