Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, un soldado de Dios con el mejor partido conservador de América
Raul Tortolero.- Un soldado de Dios es una persona comprometida con la cristiandad, cuyas acciones están determinadas por valores religiosos. Si es un político, su fe no tiene por qué quedarse en el ámbito privado, sino que al contrario, debe expresarse en toda ocasión, sobre todo en las políticas públicas que impulse para el bien común.
Hay una característica que considero fundamental en un político: la congruencia. No importa si estoy o no de acuerdo con sus posturas, si es congruente entre lo que dice y lo que hace, entre sus palabras, pensamientos, acciones y omisiones, lo respeto. Y Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, es un tipo congruente.
El exmilitar brasileño fue parlamentario durante cerca de 30 años, y militó en diversos partidos, pero siempre se mantuvo leal a sus propias ideas. El PSL lo lanzó a la presidencia hace dos años. Un partido pequeño.
Pero luego de alejarse del PSL ante escándalos de corrupción de sus líderes, creó a finales de 2019 un nuevo partido, suyo totalmente, por vez primera en su larga trayectoria política: Alianza por Brasil.
Bolsonaro advirtió que Alianza por Brasil no se convertiría en una «oficina de negocios» y combatirá frontalmente a la corrupción. El nuevo partido compitió en las elecciones de alcaldes hace unos días, aunque aún no con los resultados que vendrán a futuro.
Alianza por Brasil es el sueño de los conservadores duros, no hipócritas ni tibios. Por mucho, es el partido ideal para América Latina. Muchos otros partidos que se dicen de derecha en nuestros países latinos, deberían de tomar nota de este nuevo proyecto dirigido por Bolsonaro.
Me gusta que Bolsonaro esté consciente, como ningún otro presidente en América Latina, de que el desarrollo de su patria depende del respeto a los pilares de la sociedad y que la política debe basarse en la verdad, la transparencia y la ética.
También admiro que su movimiento emprenda la defensa de los valores judeo-cristianos, así como del patriotismo, la soberanía nacional, la democracia, y el emprendedurismo, como motor de la economía.
Alianza por Brasil ha sido definido por sus principales líderes, como un partido conservador religioso y liberal. Está a favor de la religión y emplea el lema: “Dios, patria y familia”.
Sus principios fundamentales son el respeto a Dios y a la religión, la memoria y la cultura del pueblo brasileño.
¿Por qué nuestros presidentes en América Latina cuando son creyentes simplemente nunca hablan de religión? Son unos cobardes. Bolsonaro tiene muy presente que Dios es el centro de nuestras vidas. Y en torno a eso debe girar la política. En torno a los valores de la cristiandad.
Siempre ha sido así en Occidente, no hay que ser ingenuos. Los valores plasmados en las leyes, la educación, la ética, todo es de inspiración católica.
Bolsonaro ha dicho que su partido reconoce el lugar de Dios en la vida, en la historia y en el alma del pueblo brasileño. Tienen toda la razón en que la laicidad no debe significar ateísmo obligado o no poder ejercer el derecho a la libertad religiosa.
También, Bolsonaro se reconoce católico, al igual que sus hijos. No obstante, su esposa Michelle de Paula Firmo es evangélica. Con ella ha estado asistiendo a congregaciones cristianas.
Fue también bautizado en las aguas del río Jordán por el pastor Everaldo, quien también es empresario y fue candidato a la presidencia por el instituto que dirige, el Partido Social Cristiano.
Por supuesto y sin tibieza, Alianza por Brasil también va por la defensa de la vida, contra el aborto y contra la llamada “ideología de género” enseñada en las escuelas.
Karina Kufa, la abogada del presidente y tesorera de Alianza por Brasil, ha señalado que no hay progreso sin la defensa de la vida humana desde la concepción. Así de claro lo tienen en esas filas.
En lo económico se impulsa el liberalismo, el libre comercio y se buscará reducir y eliminar, en la medida de lo posible, la intervención del Estado y los controles que gobiernos previos habían impuesto
Contra el socialismo y el globalismo
Este partido de reciente cuño establece que su lucha es contra el socialismo, contra el comunismo y contra el globalismo. No se puede algo mejor. Lo tienen todo tan claro.
Han dicho en el partido que se esforzarán además en divulgar las verdades sobre los crímenes de los movimientos revolucionarios, como el comunismo, el globalismo y el fascismo.
Karina Kufa ha apuntado que su partido repudia el socialismo y el comunismo, por lo que jamás permitirá que la bandera del país sea roja. Y dice bien.
El pasado 9 de octubre, aniversario de la muerte del Che Guevara, Bolsonaro tuiteó que este guerrillero ya solo inspiraba a marginales, drogadictos y la escoria de la izquierda.
Habiendo nacido en una localidad de esa ciudad, Bolsonaro sabe bien cuáles son las perversas intenciones del Foro de Sao Paulo. Como presidente ya, en su discurso del 24 de septiembre de 2019, en la Asamblea General de la ONU en Nueva York, se propuso combatir a esa unión de partidos políticos de izquierda, a la que consideró una organización criminal.
Señaló también su país dejaría de enviar 300 millones de dólares anuales a la dictadura de Cuba, como lo hicieron gobiernos previos.
El sábado 7 de marzo de este año, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió a Jair Bolsonaro en Florida. En su casa de Mar-A-Lago, Trump dijo que Bolsonaro ha hecho un trabajo fantástico, que Brasil lo ama y que Estados Unidos también lo ama.
Respecto a la crisis humanitaria causada por la dictadura socialista de Nicolás Maduro, ambos mandatarios acordaron actuar para restablecer el orden democrático. Brasil a mitades de abril retiró a todo su personal diplomático de Venezuela.
En apoyo a Trump, Bolsonaro es uno de los mandatarios que no ha felicitado a Joe Biden, ya que aún los resultados electorales oficiales no lo reconocen como presidente electo. De hecho, el brasileño ha declarado que en Estados Unidos hubo un fraude en las elecciones.
Armas y legítima defensa
En Estados Unidos la Segunda Enmienda permite la posesión de armas de fuego. En cualquier país debería ser igual, ya que un ciudadano tiene el legítimo derecho de defenderse, de defender a su familia y sus propiedades.
El partido de Bolsonaro apoya que existan garantías para el orden, para la seguridad y para la legítima defensa. Defiende la posesión de armas. Escogieron el número 38 para identificar a ese instituto, en alusión al calibre de la pistola revolver más común.
Presidente desde 2019, el oriundo de Sao Paulo emitió desde el Palacio de Planalto un decreto que relaja las condiciones para la posesión de armas.
Así, queda extendido el periodo de propiedad de 5 a 10 años y los ciudadanos pueden poseer hasta cuatro armas de fuego. Se debe demostrar tener 25 años y no contar con antecedentes penales. Portar armas no está permitido.
Avance del Integralismo
El integralismo, en síntesis, es una filosofía política que promueve que la fe católica debe servir de base para las leyes y para las políticas públicas, sobre todo si en una sociedad existe una mayoría que practica esta religión.
Debemos extender un poco este concepto para poder abarcar también a los hermanos cristianos (evangélicos, bautistas, anglicanos, etc.), es decir, al mundo de la cristiandad, en un afán ecuménico, integrativo.
Tendremos entonces un pensamiento político-religioso, contrapuesto a la castración de la religión en la vida pública, una herencia de la revolución francesa de 1789.
El laicismo no puede ser interpretado como ausencia de religión en actos públicos o privados, porque esa idea minaría la libertad religiosa.
Debemos también oponer este integralismo al vacío de la Modernidad, ese movimiento que fracasó al intentar desaparecer a la religión para imponer a la Razón, una diosa fallida.
Alianza por Brasil, el partido de Bolsonaro, respeta a todas las religiones, pero representa una avanzada del integralismo a nivel mundial. Muchos militantes de derecha en toda América deben tomar nota de la importancia histórica de este movimiento y de este partido.
El lema de campaña de presidente fue: “Brasil por encima de todo, Dios por encima de todos”. Jair Bolsonaro es un soldado de Dios y Alianza por Brasil el mejor partido de América. Hasta ahora.
Administrador: Si no le publicamos los comentarios, por qué insiste. ¿Tanta necesidad tiene usted de que alguien le preste atención? Dignidad, rata, dignidad.
Un “soldado de Dios”, tal y como se define a Bolsonaro, haría lo posible por conservar y mantener la Selva Amazónica. Él, en cambio, no le presta atención alguna, si no todo lo contrario.
Eso que dices no es cierto, Bolsonaro es adicto a jugar a los dardos, tiene colgado en la pared de su despacho el mapa de Brasil y su blanco favorito es precisamente el circulito de Manaos, mas atencion imposible.
Jesucristo nunca dijo que debamos salvar a las ballenas, eso es un invento de los pederastas para desviarnos de la fe verdadera, Jesus nos mostro el camino a seguir, debemos salvar hombres no peces, el resto ya vendra solo, cuando la mala hierba haya sido arrancada la hierbabuena crecera sin necesidad de abonos ni insecticidas. Resumiendo, ningun buen cristiano debe permitir que le coman el coco con el buenismo ecologista.
Creo que la gracia de ser conservador es conservar las cosas buenas. Y la amazonas es una de esas. Permitir la tala de la selva, para venderle soja a China es basura.
Hiedes a progre ecologeta, seguro que te declaras “vegano” y solo comes tofu “bio” cosechado a mano por negritos africanos flacos adoptados por alguna ONG. Te jactas de moverte en una bicicleta “vintage”, lo cual significa que gastas tanto en coca que no te llega para pagar gasolina y ademas vives en un piso-patera en el que no puedes guardar la bici, tiene que dormir en la calle y por eso robaste una de las viejas hechas polvo que nadie quiere, para que no te la roben a ti.
Eso es propaganda progre. Noticias falsas que a veces las cree gente de derechas. Busque la información real sobre el asunto del Amazonas.
Somos variados en creencias cristianas,pero hay algo FUNDAMENTAL, los mandamientos de la ley de Dios, su menosprecio hace del mundo actual una pocilga pestilente henchida de impíos y aberraciones impuestas por la progresía.
No hay nada a lo que un pederasta tenga mas miedo en este mundo que a un padre encerrado con denuncias falsas fugado de la carcel que vuelve a casa para recoger su revolver, es normal que los marxistas jamas vayan a permitir que la poblacion honrada tenga armas en casa.
Muy buen articulo. Comparto absolutamente .
Saludos desde Uruguay .
Viva la Hispanidad.!!!