Día aciago del padre
Hoy debería ser un día feliz para mí y para cualquier padre porque recibirá el esperado abrazo de sus hijos y algún que otro regalo material, mucho menos importante.
Este día es también agridulce porque muchos padres no podrán disfrutar de sus hijos por haberlos perdido, en contra de una regla de la naturaleza no escrita que presupone la supervivencia de los segundos a los primeros. Y el dolor es mayor, si cabe, cuando se los han arrebatado violenta, injusta e innecesariamente.
Y es que, por estas fechas, también se cumple una triste efeméride en la que Miguel Ángel Salgado fue asesinado por defender los derechos de su hija a disfrutar de su padre. Y es también el mismo día en que su padre, Antonio Salgado, habrá perdido a su hijo y a su nieta cerrando un nefasto círculo de tristeza, angustia y decepción.
El 14 de marzo de 2007 un sicario contratado por su ex mujer, la abogada Dolores Martín Pozo, segó la vida de Miguel Ángel ante la certeza de perder la custodia de su hija a la que se creía con exclusivo derecho. Al final de un largo juicio de divorcio contencioso celebrado dos meses atrás, que estuvo plagado de falsas acusaciones de maltrato contra él y una compulsiva manipulación de su hija en su contra con el fin de romper el vínculo con su padre, y que resolvía la custodia de la menor a su favor, lo amenazó públicamente: «Vamos a acabar contigo. No permitiremos que tengas a la niña. Antes te mato», le dijo ante testigos, y lo cumplió.
Un padre muerto por el amor a su hija y otro padre que pierde a su hijo por el crimen de una mujer trastornada, es el triste balance de esta historia que revivo cada día del padre de cada año desde hace 14 años.
Por eso hoy, quiero recordar a Miguel Ángel como un padre responsable, una buena persona que quiso cuidar y proteger a su hija como mejor sabía, teniéndola consigo. Y a su padre Antonio, al que saludo cada año intentando inútilmente paliar su desconsuelo. Miguel Ángel Salgado tendría ahora 51 años. Escribo estas humildes líneas en tu memoria y para mi recuerdo.
*Presidente de la Asociación de Padres de Familia Separados de Las Islas Baleares (APFSIB)
Gracias por ese recordatorio solidario. No olvidar lo que sucedió es muy necesario para no acostumbrarse a aceptar aquello que todavía esta sucediendo. Un saludo Jorge.
Me gustaría que todos los PADRES NATURALES pudieran recibir EL ABRAZO Y EL CARIÑO DE SUS HIJOS, del que en muchas ocasiones les privan las arpías, feministas, liberadas, bolleras, etc., de sus ex mujeres, la mayoría de ellas frustradas y amargadas, pues ese “paraiso” que les prometen las feministas, sólo existe en su calenturienta imaginación.
VAYA MI AFECTO, RECUERDO Y RESPETO HACIA TODOS Y CADA UNO DE ELLOS…
Hoy me ha llamado mi hijo, desde Francia, dónde ha ido a visitar a su novia, por el DÍA DEL PADRE, y he sentido una gran satisfacción y alegría. Pero también mucha pena POR ESOS CIENTOS DE MILES DE PADRES, POSIBLEMENTE MILLONES, a los que las arpías, liberadas y feministas de sus ex mujeres han inoculado el dio hacia ellos a sus indefensos hijos e hijas. ¡Va por ustedes, amigos! Dios quiera que algún día cambien las cosas, pero en el interín, hagan lo mismo que ellas: organicense, monten asociaciones, pidan subvenciones, hablen con los partidos políticos para que apoyen… Leer más »
Un muy buen recuerdo, no hay que olvidar la maldad de esa mujer.