Un reportaje de The Epoch Times (ET) reveló que 42,620 extranjeros ilegales escaparon del arresto e ingresaron en territorio americano. Son casi 1,400 migrantes por día.

Jaeson Jones, excapitán del Departamento de Seguridad Pública de Texas dijo al medio de comunicación que los agentes fronterizos no dan abasto y que la escandalosa cifra revela el “nivel de infiltración” de extranjeros sin ser detectados.

“Lo que realmente significan los números de gotaway (personas que escaparon) es el nivel de infiltración que llega al país que está superando a CBP en la frontera”, dijo.

Según el ET el número puede ser mucho mayor debido a que los cálculos surgen a partir de que los agentes envían información sobre personas que ven alejarse o tras descubrir pistas o escombros que dejaron a su paso.

Según Jones durante el mes de abril, más de 177,000 migrantes fueron detenidos por la Patrulla Fronteriza mientras cruzaban a territorio americano.

Por su parte, el representante demócrata, Henry Cuellar reveló que hasta finales de abril la administración Biden-Harris aceleró la liberación de más de 15,300 migrantes sin avisos formales de inmigración.

Según Cuellar los migrantes liberados solo reciben el formulario “385” o informe de reserva que generalmente dice que debe presentarse en la estación de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos más cercana en un plazo determinado de días.

“Es solo un sistema de honor que se les da y esta no es la forma en que se supone que debe ser”, dijo.

David Grantham, experto en seguridad nacional y antiterrorismo en crisis fronterizas dijo a El American que lo que sucede con los migrantes en la frontera sur es una situación «sin precedentes».

“Hemos oído que se está liberando a gente porque los agentes están desbordados. No es una decisión política, por lo que sabemos, sino una decisión logística. A medida que llega más gente a la frontera, los agentes se ven obligados a realizar otras tareas. Por tanto, algunas personas son liberadas o simplemente pasan de largo porque no hay suficientes agentes”, señaló Grantham.

Ante la situación al menos cinco condados de Texas declararon “desastre local” por la crisis fronteriza mientras que ni el presidente Joe Biden ni la vicepresidente Kamala Harris, han visitado la frontera.

El gobernador de Texas, Greg Abbott ha manifestado su preocupación ante la crisis fronteriza, sobre todo por las actividades de tráfico de drogas y de personas que se ha incrementado en la localidad.

El pasado 29 de abril Abbott anunció la Operación Lone Star con el despliegue de tropas y guardias nacionales para “asegurar la frontera”.

“Cárteles, narcotraficantes y traficantes de personas se están aprovechando de todos los migrantes que cruzan la frontera ilegalmente”, señaló.

“Está llegando más drogas al país. Si no puedes atrapar a la gente, tampoco puedes atrapar a la droga”, dijo el excapitán Jones al ET.