Se buscan cuñados para las mesas informativas: Razón, Gestora de Vox Málaga
Plutarco.- La prueba definitiva de que Vox Málaga se ha convertido en todo un esperpento en manos de Patricia Rueda y Jacobo Vázquez, con el indigno Sevilla oficiando de conmilitón, la hallarán los lectores en la mesa informativa instalada este fin de semana en Antequera. Observen el porte de los informadores. ¿Creen que esta imagen se trata de la mejor presentación para sumar adeptos a un proyecto político que baja en todas las encuestas?
En la etapa de José Enrique Lara al frente de Vox Málaga se prohibía que se montaran mesas informativas sin un mínimo de participantes por motivos de seguridad. Pero ya se sabe que Barbie es Barbie. La militancia de Vox en Málaga no merece a estos dirigentes provinciales ni el espectáculo risible que se está dando.
Un partido necesita, como presupuesto de existencia, unas buenas dosis de dignidad y de decoro. Su actividad al final queda limitada por el alcance de sus propias fuerzas. Cuando más, si acaso, por el sentido moral del que dispongan sus líderes. A esa merma debe Vox Málaga su aparente vidriosidad. Rueda, Vázquez y Sevilla son un estorbo en el camino de Vox en Málaga. ¿Cómo revivificar el patriotismo frente a la izquierda con personas sin más ideales trascendentes que sus propios fines? Hace solo unos meses, la valía de los militantes de Vox Málaga no se medía en torno a determinadas características inconfesables, sino que venía prefigurada por su mayor o menor competencia. Para que triunfe cualquier proyecto es imperativo que estén al frente los mejores, y no los amiguitos ni las amiguitas. Y así es lógico que la gente esté tan desmotivada como para dejar solos a este heroico anciano en la tarea de captación de nuevos adeptos. Ni Vox podía llegar tan bajo ni sus penosos dirigentes provinciales tan alto. Es imperio acabar con ellos.
La imagen torrentiana de las mesas informativas de Vox Málaga debería ser la mejor constatación de cómo no se puede pedir la colaboración de esa misma gente a la que se niega hasta el derecho de decidir si quieren que su partido continúe en tan penosas manos.
El esperpento es tal que no nos extrañaría que Vox Málaga termine poniendo un anuncio buscando cuñados que hagan de primos en las mesas informativas. “Y todos a remar en la misma dirección”, que diría Barbie, aunque sin matizar que unas por 9.000 euros al mes y otros por nada.