(Video) Ortega Smith sale de Málaga y entra en Malagón: 60 personas, en su mayoría cargos, acuden a su mitin en Gijón (Asturias)
Javier Ortega Smith está destruyendo Vox a pasos agigantados. El desprecio y el permanente desdén de la dirección nacional a los afiliados de provincias nos revela que el verdadero objetivo de Vox no es otro que el mantenimiento de una estructura piramidal para beneficio político de solo unos pocos.
Son tantas las evidencias que quien no quiera verlo es que ha sido fuertemente abducido. Hay terapias efectivas contra la influencia que algunas sectas ejercen en las mentes de sus víctimas. Contra la acción destructiva de Vox no hay mejor receta que observar a sus líderes sin las anteojeras puestas.
No es más fiel a Vox quien erróneamente cree que tapando sus vergüenzas se ayuda mejor al partido. No es normal que Vox esté perdiendo a borbotones la credibilidad que hasta hace solo unos meses le permitía ser percibido como una opción salvadora de España. Ni que Vox esté dividido y roto en provincias tan importantes como Barcelona, Murcia, Málaga, Granada y Cádiz, entre otras. O que tenga más gestoras que comités ejecutivos provinciales. O que un brigada chusquero decida quién debe seguir siendo o no militante del partido en Andalucía, a veces en contra del más estricto sentido de la dignidad humana, como ha ocurrido en Málaga con la expulsión de Antonio Pulido. No es de recibo que Vox no tenga nada mejor que Patricia Rueda para presentar al frente de las listas en Andalucía (tan absurdo como poner a ordenar la casa del vecino a quien tiene patas arriba la suya propia). Nos preguntamos en fin si en el fondo lo que pretende la dirección nacional es este desastre organizativo y que las provincias solo sean la coartada legal que sustenta las verdaderas intenciones de los promotores de Vox SA, con tontos útiles como Jacobo Vázquez o Tomás Fernández ejerciendo de agentes de bolsa.
Que Javier Ortega Smith está siendo uno de los causantes de la desestructuración de Vox en las provincias, ya es inopinable.
Cuando un partido funciona a dedo y no por meritocracia, entonces lo normal son esas cuarenta personas que participaron este jueves en la marcha en Santiago de Compostela contra Alberto Núñez Feijóo, y que estuvo encabezada por el propio Smith. Inmune al desaliento, el secretario general de Vox se trasladó ayer a Asturias para celebrar un acto con los militantes y simpatizantes. El lugar elegido fue la Plaza del Marqués, junto al palacio de Revillegigedo, en Gijón. No llegaban a 60 personas las que asistieron, en su mayoría electos y cargos del partido. Había más policías y periodistas que público. Algunos recordaron cuando Vox Asturias estaba liderado por Rodolfo Espina, un hombre honrado y un patriota cabal y de bien. Por dos veces llenó el Palacio de Congresos de Calatrava, con un aforo de 2000 personas, y otras 600 que no pudieron entrar.
En Málaga ocurrió otro tanto. Hace dos años, Smith congregó a 3.000 personas en un acto en Marbella. El sábado 27 de marzo, apenas 150 asistieron a su mitin en la emblemática calle Larios de la capital malagueña. La respuesta al por qué puede ser muy simple: “Puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo”.
Al final, lo que han es hacer de Vox una escombrera de partido, con los ideales arrumbados, todos a colocarse y a medrar.
Manolo Jiménez, histórico de Vox en Málaga, a Abascal: “Vete a la mierda tú y tu puta nación”
Como muestra del desencanto que se ha instalado en muchos que hasta hace poco eran activos irreductibles del partido verde, el testimonio de Manolo Jiménez Orozco, ganadero, histórico de Vox y posiblemente el único amigo que tenía Abascal en la militancia malagueña. Tan amigos que fue el propio Abascal quien le pidió que militara en el partido. Y así lo hizo. Unos meses después, y tras conocerle a fondo, la opinión de Jiménez sobre el alavés ha dado un giro de 180 grados. Esto es lo que hoy dice de quienes hasta hace poco representaban el patrocinio de sus esperanzas para España:
Espectacular lo que está haciendo Ignacio Blanco en Vox Asturias. En tal solo 9 meses se han dado de baja 900 afiliados (más de la mitad), y a los actos no acude ni Rita.
OREJAS Y RABO maestro.
Yo sin insultar a Abascal que no me ha hecho nada, estoy viviendo el mismo proceso de desencanto hacia todo lo que sea política y aunque suene fuerte estoy perdiendo la ilusión por España, este mundo es muy grande para aguantar a tanto gil junto en tan poco espacio que es en lo que se ha convertido esto que un día se llamó nación donde hubo un pequeño espacio de tiempo donde se abrió una pequeña ventana de libertad. Pero esta degeneración no la siento solo en la clase polítca, ves a la policía poniendo multas de bozales y persiguiendo… Leer más »