Científicos ya trabajan en modificar genéticamente plantas comestibles con vacunas Covid experimentales para el consumo público
Millones de personas que se han negado a recibir una vacuna experimental de ARNm podrían verse pronto obligadas a consumir la terapia génica en sus alimentos.
Investigadores de la Universidad de California recibieron una subvención de 500.000 dólares de la Fundación Nacional de la Ciencia para desarrollar una tecnología que infunde vacunas experimentales de ARNm Covid-19 en espinacas, lechugas y otras plantas comestibles.
El equipo de expertos en nanobiotecnología trabaja actualmente en la introducción con éxito de ADN con ARNm de la tecnología BioNTech en los cloroplastos, la parte de las plantas que instruye el ADN de sus células para replicar el material de la vacuna.
Los investigadores se encargan de demostrar que las plantas modificadas genéticamente pueden producir suficiente ARNm para sustituir a las vacunas Covid y de infundir a las plantas la dosis correcta necesaria para comer en sustitución de las vacunas.
Las vacunas experimentales de ARNm serán comestibles, explicó Juan Pablo Giraldo, profesor asociado del Departamento de Botánica y Ciencias Vegetales de la UCR que dirige la investigación, en un comunicado de prensa publicado por la universidad el 16 de septiembre.
“Lo ideal es que una sola planta produciría suficiente ARNm para vacunar a una sola persona”, dijo Giraldo. “Estamos probando este enfoque con espinacas y lechugas y tenemos el objetivo a largo plazo de que la gente lo cultive en sus propios jardines”.
“Los agricultores también podrían llegar a cultivar campos enteros de ella”, añadió.
La entrega efectiva del material genético a los cloroplastos de las plantas, pequeños órganos de las células vegetales que convierten la luz solar en energía que la planta puede utilizar, es fundamental para desplegar los alimentos vacunados.
“[Los cloroplastos son] pequeñas fábricas alimentadas por la luz solar que producen azúcar y otras moléculas que permiten el crecimiento de la planta”, dijo Giraldo. “También son una fuente sin explotar para fabricar moléculas deseables”.
Modificar genéticamente plantas comestibles con vacunas experimentales para el consumo público es la culminación de un sueño, explicó el profesor asociado.
“Una de las razones por las que empecé a trabajar en nanotecnología fue para poder aplicarla a las plantas y crear nuevas soluciones tecnológicas. No sólo para los alimentos, sino también para productos de alto valor, como los farmacéuticos”, dijo.
Mientras que estudios anteriores han demostrado que los cloroplastos son incapaces de expresar genes que no forman parte natural de esa planta, el equipo de Giraldo está enviando material genético dentro de una carcasa protectora a las células vegetales. Para llevar a cabo esta terapia genética sin precedentes, Giraldo reclutó a Nicole Steinmetz, profesora de nanoingeniería de la UC San Diego.
Steinmetz está trabajando con el equipo de Giraldo para utilizar nanotecnologías que permitan infundir el cloroplasto de una planta con la vacuna de ARNm.
“Nuestra idea es reutilizar las nanopartículas naturales, es decir, los virus de las plantas, para la administración de genes a las plantas”, dijo Steinmetz. “Se hace algo de ingeniería para que las nanopartículas lleguen a los cloroplastos y también para que no sean infecciosas para las plantas”.
Además, la Fundación Nacional de la Ciencia concedió a Giraldo y a sus colegas 1,6 millones de dólares para desarrollar una tecnología de “suministro de nitrógeno dirigido” que utiliza nanomateriales para suministrar nitrógeno, un fertilizante, directamente a los cloroplastos.
Mientras tanto, la “vacuna” COVID-19 está causando más muertes que cualquier otra vacuna en la historia. Según el Sistema de Notificación de Eventos Adversos a las Vacunas de los CDC, 18.409 personas han muerto por la vacunación en 2021, mientras que sólo 420 personas murieron por la vacunación antes de los mandatos de inoculación de Covid en 2020.
¡¡¡ Criminales !!! Al final no moriremos de la vacuna, moriremos de hambre, pues no podremos comer nada, todo estará infectado… la comida verdadera, biologica, estará prohibida. De hecho ya hay semillas prohibidas… buscad información del Codex Alimentarus….
Los llamados productos transgénicos ya llevan alimentando animales (incluidos los humanos) y plantas unas 3 décadas. Algo que probablemente debería haber sido prohibido o cuando menos, sometido a rigurosos controles científicos y éticos. Al parecer, se estableció la ley de la jungla hiperliberal y nauseabundo capitalismo del todo vale, con tal de multiplicar los beneficios. Beneficios tan escandalosos como los de las Farmafias. Ahora ya no se conforman con alterar la genética de animales y plantas, sino que en la diabólica fase que señala este artículo, serán las mismas plantas y animales las encargadas de la producción. Los laboratorios luciferinos… Leer más »
El quid reside en que nadie se quede sin su dosis de veneno que te convierta en una persona manipulable y docil…al precio que sea.
Esto no es nada nuevo, casi todo lo que comemos ya no es natural, sino que ha sido modificado con sólo Dios sabe qué genes…¿Aumento de cáncer? no por favor, quien intenta pensar mal…En fin…
Repugnante
Los científicos locos en mi infancia eran los malos en las películas de James Bond
Al final, tendremos todos que ir a comprar a los pequeños mercados
de verdura ecológica, alternativos; en ved de ir a comprar verduras a las grandes superficies. No sólo por que estén libres de transgenicos y glifosatos, como hasta ahora.
madre mia que locos, eso esta aun por ver, pero en el supuesto caso igual que los transgenicos debe de hacerse una ley y regularse avisando al consumidor en la etiqueta de producto modificado geneticamente.
Eso crea rechazo en muchos y mas viendo como les esta sentando la vacuna a muchos.
Por eso mismo, no pondrán en las etiquetas el aviso. No lo hacen con los transgenicos; y ya ocultan edulcorantes y aditivos como el glutamato monosodico artificial, con códigos, como E-950, ¿ Por qué?, para no alarmar a la jente, que le gusta analizar todo. ” Si quieres ser feliz, no analices, muchacho, no analices”, decían. Y la verdad, es que todo es mucho más sencillo, más seguro y más bonito, si no nos paramos a analizar tanto; y le quitamos hierro al asunto, en ved de ponérselo.
Los bancos de semillas que tienen en las islas Svalbard como reservorio genetico para poder reintroducirlos en caso de catastrofe, forma parte de un plan cuidadosamente diseñado desde hace años para que despues de que los cintificos y gobiernos terroristas nos infecten con sus alimentos modificados geneticamente para producir la vacuna mRNA e infectar esta vez si a todos los humanos, y cumplir sus objetivos eugenesicos y de reduccion de poblacion con alimentos y vacunas mortales, volver entonces a recuperar las semillas no modificadas geneticamente y producir de nuevos alimentos sanos para los elegidos como amos del mundo.
Aún se están vengando, ese era el plan, mucho mejor que envenenar el agua de Alemania una vez acabada la Guerra…
Por eso están tan de moda últimos años, las películas de zombis, como la de guerra Z. Los zombis, los producen las vacunas de ARNm. Aunque también podrían producir los orcos y los trasgos del Hobbit y del Señor de los Anillos. Sauron y Melkor, serían entonces, los que se an vacunado más veces.
Y por qué no le exigimos al Sr. Pedro Sánchez que habilite terrenos de siembra, cultivo y esparcimiento para todos los ciudadanos que lo deseen, como tienen los jubilados alemanes. No sería sólo para jubilados y mayores sino para todo aquel ciudadano que lo solicitara. Estas pequeñas parcelas de cultivo pertenecen al Estado, no se compran ni venden ni se heredan y además de aportar salud y entretenimiento a quien las trabaja y cuida, le aseguran una buena calidad en su alimentación. Otra posibilidad es instalar parcelas de cultivo en la azotea del edificio en que vivimos y cada vecino… Leer más »
los últimos años ha habido una explosión en el interés por la nutrición, miles de estudios científicos, y aún muchos más artículos sensacionalistas que todos conocemos con mensajes en tonos blanco y negro: “El café es bueno”, “La leche es mala”, “El vino es bueno”, “Ahora el café es malo otra vez”. La paranoia está servida. Se habla en estos días de que el edulcorante Apartadó y la sacarina, se descompone en el organismo en alcohol fortalecido. Las personas expuestas al alcohol fortalecido, tienen riesgo de desarrollar cáncer. También está el glutamato monosodico, ( E-621 ), que se usa de… Leer más »