Juana de Arco Rivas, retrato de una femihistérica
Los hechos son tan conocidos, del dominio público, que creo no es necesario volver sobre ellos.
De cualquier forma, quienes desean más información, pueden leer, o releer, mi artículo, realmente premonitorio, “La Justicia de Juana”, publicado en varios diarios digitales.
Juana (de Arco) Rivas, la heroína del feminista más radical e intransigente, una pobre desgraciada en mi modesta opinión, fue utilizada por la “directora”, y supongo que única empleada del centro de protección a la mujer, o como se llame, de un pueblo andaluz, de escasamente diez mil habitantes.
Una individua, supongo que enchufada, en ese chiringuito, montado por el partido correspondiente, para dar acomodo a los suyos.
Esta fulana, que por cierto miraba a Juana con ojos de deseo, aunque es posible que solo sea una suposición mía, hacía unas declaraciones “jurídicas” –bueno, en realidad populistas y demagógicas, carentes de cualquier rigor, e incluso de unos meros conocimientos legales-, diciendo que los Tribunales españoles se estaban equivocando con su “protegida”.
Creo que hasta le oí descalificar al Tribunal Constitucional, ¡diciendo que no tenían ni idea de temas constitucionales! (Luego resultó que no era ni abogada, y era una simple licenciada en Derecho).
Pues bien, a lo que íbamos: la Audiencia Provincial condena a Juana Rivas a cinco años de prisión, por dos secuestros, en la persona de sus hijos.
Recurrida la sentencia ante el Tribunal Supremo, éste rebaja la pena a la mitad, diciendo que solo se había producido un único delito, como si los dos niños fueran trozos de queso, que se pueden integrar en una solo.
Los delitos contra las personas siempre se penan caso por caso, y no en conjunto, pues ello supondría un desvalor del delito, y una pérdida de la especial protección que el Derecho brinda a los seres vivos, pero por lo visto la Sala Segunda también se ha vuelto feminista.
Esta nueva pena, de dos años y medio de prisión, supondría el ingreso de Juana de Arco Rivas, paladín del feminismo y claro, eso Unidas Podemos no lo podía permitir, y mucho menos esa mema con balcones a la calle llamada Irene Montero, la ex cajera de supermercado.
¿Pero no habíamos quedado que los indultos son incompatibles con un auténtico Estado de Derecho?
Se presiona al presidente por desgracia Pedro Sánchez (Zapatero era el presidente por accidente), y el consejo de ministros, más chulos que un ocho, deciden indultar parcialmente a Juana de Arco, la femihistérica, en unas rebajas rebajadas, dejando su pena en algo simbólico, de un año y tres meses de prisión, que excuso decirles, nunca cumplirá, pues no hay juez en España que tenga los cojones para exigir su cumplimiento, pues iba a ser atacado inmisericordemente por todas las femihistéricas, y podía dar su carrera por acabada.
Vista esta nueva patada del gobierno al estado de derecho, solo me resta preguntarles en voz alta: ¿en qué país vivimos?
Paren el tren, que yo me apeo.
*Abogado y escritor.
https://www.graueditores.com
El feminimo es un gran negocio, del que viven, y estupendamente, medio mllón de mujeres en España, entre juezas, fiscalas, abogadas, procuradoras, psiquiatras, psicologas, “asesoras” que en nada asesoran, pues nada saben, ONGs, casas de la mujer asociaciones subvencionadas (todas), etc.
Bastaría con cortarles el grifo para que el 95% de esas entidades, y eso como mínimo, desaparecieran…
De acuerdo con usted.
Si desaparecieran las subvenciones a fondo perdido (y tan perdido), a todas esas vividoras del cuento, todas esas organizaciones de jetas se desinflarían como un globo hinchado, y tenderían a desaparecer.
¿Pero quién se atrevería a hacerlo…?
El gran chiringuito de género necesita clientes. Las miles de denuncias falsas, algunas que se creen y terminan con el hombre en prisión y despojado de su familia, trabajo y propiedades, inducen al maltrato e incluso el asesinato. Por cada mujer asesinada se frotan las manos. Las denuncias falsas no se persiguen. Y los asesinatos perpetrados por mujeres se ocultan. También el número de hombres que se suicidan por denuncias falsas.
No solo hay que cerrar ese chiringuito, sino enjuiciar a sus dirigentes.
Estoy seguro que a todas las femihistéricas les parecerá una maravilla este indulto, incluidas juezas, fiscalas, policias, etc.
¡Tienen un solo ojo para ver, y parece que lo tienen entre las dos iernas!
Su “sentido” de la justicia es inexistente. No me extraña que los suicidios de hombres denunciados sean la primera causa de muerte en España… (Obviamente, silenciada por los medios de manipulación de masas, faltaría más).
Un gobierno que impone sus decisiones por encima de los jueces, sin respetar la independencia judicial, NO ES UN GOBIERNO.
Es una dictadura.
Así de claro.
Hay miles de chiringuitos que viven de la “industria del feminismo”.
Si se les retiraran las ayudas y subvenciones, la mayoría desaparecerían.
Totalmente de acuerdo con usted. Mis felicitaciones a don Ramiro y a ALERTA DIGITAL, por ofrecernos esta pieza maestra de la literatura hispánica.
La mujer que ha secuestrado a sus tres hijos, ha tomado “ejemplo” de Juana (de Arco) Rivas.
¡Habrá pensado que, total, como a las mujeres no nos pasa nada, pues podemos hacer todo lo que nos salga del coño!