¿Habría aplaudido la izquierda el discurso de Zelenski en el Congreso si en vez de hablar del bombardeo de Guernica lo hubiera hecho de la matanza de Paracuellos?
AD.- Silvestre Segarra, vicepresidente de Porcelanosa, era anoche la viva imagen del miedo y la desolación. Bastó que Volodímir Zelenski nombrara a la empresa castellonense como una de las que siguen operando en Rusia, para que el pobre Segarra compareciera ante los medios, cejijunto y acobardado, deshaciéndose en explicaciones exculpatorias y reclamando el ‘indulto’ del hombre marioneta encumbrado a la cima del mundo por el verdadero poder globalista en la sombra. Hoy mismo ha viajado hasta Madrid para ponerse a los pies del embajador ucraniano en España y ofrecerle pruebas del servilismo de su empresa hacia el poderoso Zelenski, que al parecer es quien de verdad manda en España.
Por eso lleva razón el embajador de Rusia en Madrid cuando hoy mismo lamentaba que Zelenski pretenda tomar decisiones sobre empresas españolas desde Kiev. Solo un matiz: no pretende tomar decisiones, sencillamente las toma. La marioneta predilecta de Soros goza de mucho poder.
A algunos les parece bien esa injerencia de Zelenski en la soberanía económica de nuestro país. Dicen que es preciso conjugar valores e intereses ante un conflicto como el ucraniano. La ecuación sería aceptable si la excepción no se impusiera casi siempre a la hipócrita norma. Dicho de otro modo: no es moralmente aceptable que una empresa española tenga intereses en Rusia, pero en cambio sí lo es que tenga inversiones en el Reino del sátrapa que ha robado sus tierras a los saharauis en contra de la legalidad internacional. No es aceptable que Porcelanosa tenga presencia en Rusia, pero sí en el reino saudí que alimenta el conflicto bélico en Yemen que ha causado más de 10.200 niños fallecidos o heridos. Si has invertido en Rusia, te expones a que el dedo acusador de Zelenski te muestre el camino al cadalso, pero en cambio se te permite ignorar que 7.000 trabajadores inmigrantes de India, Pakistán, Nepal, Bangladesh y Sri Lanka han cubierto de sangre los estadios cataríes que albergarán la Copa del Mundo de fútbol. Sin duda, el nuevo orden mundial que propugna Zelenski ha desorientado la perspectiva moral de nuestras sociedades. Y ya no digamos de nuestros dirigentes.
El arrodillamiento de Porcelanosa ante Zelenski simboliza sobre todo el arrodillamiento de los españoles ante los que promueven la destrucción de sus fundamentos vitales.
Vean sino lo que ocurrió durante la videoconferencia del mandatario globalista ucraniano en el Congreso. Entre los miles de ejemplos de horrores bélicos de los que disponía Zelenski, eligió sin duda el que más convenía a los amos del cotarro. Imagine el lector de lo que hoy se estaría hablando si en vez del bombardeo alemán de Guernica en 1937, Zelenski hubiera echado manos de la matanza de Paracuellos del Jarama para atribular a los representantes políticos que le escuchaban.
Imagine el lector que a Zelenski se le hubiera ocurrido establecer un correlato entre los supuestos asesinados en Bucha a manos de los soldados rusos y los asesinatos masivos organizados en la retaguardia durante la batalla de Madrid, en el transcurso de la guerra civil española, que llevaron a la muerte a un mínimo de dos mil quinientos presos considerados opuestos al bando republicano. ¿Habría aplaudido la bancada de izquierda con el mismo entusiasmo que lo hicieron ayer los acomplejados diputados de la derecha, incluidos los de esa monumental estafa política e ideológica con vocablo latino? ¿Todavía hay españoles ilusos que estén convencidos de que Vox representa otra cosa distinta que más de lo malo conocido? Y lo peor sin embargo es que Abascal desapruebe hoy la referencia a Guernica del líder globalista ucraniano, recurriendo una vez más a los argumentos antes utilizados en AD, sabiendo como sabe que aquí se encuentra la mayor factoría de ideas en favor de las tesis identitarias. Nos preguntamos por qué entonces Abascal aplaudió el discursito de Zelenski, puesto en pie y en arrobada actitud. ¿Oportunista sin vergüenza? No, lo siguiente. En lo concerniente a los asuntos sustanciales en los que no se permite disidencia alguna, todos los representantes de la casta vienen a diferenciarse entre ellos lo que una mano a la otra. En esto, los pocos diputados de izquierda que ayer no se sumaron al coro de palmeros demostraron al menos una cierta ejemplaridad.
La obediencia ideológica y conceptual, cuidadosamente moldeada por los ingenieros sociales, nos recuerda el período soviético. En ese momento, cualquier crítica tenía que encajar obligatoriamente en la ideología marxista-leninista. Todos reconocieron la rectitud de la línea oficial, todos fracasaron en el caparazón del “pensamiento cautivo” ( Czesław Miłosz), todos estaban a favor del Partido Comunista. La disidencia era entonces, bajo el régimen comunista, y sigue siendo hoy, bajo el régimen liberal, una rara avis. Y quienquiera que se arriesgue a desviarse de la línea establecida es considerado como un loco o algo peor aún. La única diferencia es que bajo el comunismo los riesgos para los disidentes eran mucho mayores, mientras que hoy en día la cobardía y la docilidad reemplazan al miedo a la muerte o a la deportación al Gulag.
Lo que el conflicto de Ucrania ha puesto de manifiesto es la imposición de un pensamiento único que obliga a renegar de la Verdad o a reescribirla. El escuchimizado Edmundo Bal, diputado de Ciudadanos, el partido con más vínculos con Soros, ha pedido incluso la dimisión de los pocos diputados que no aplaudieron al mandatario hebreo. Es decir, la imposición del aplauso por decreto. No está mal para que encima el canalla se llame a sí mismo liberal.
El lugar común de la crítica es amplio pero no pasa de los mismos temas: Putin, las atrocidades rusas en Ucrania, los curas pedófilos, los gobiernos que están en contra de los gay y el aborto. Por supuesto, la memoria para según qué temas es corta y nadie se acuerda que Obama, que fue premio Nobel de la Paz, terminó sus ocho años de gobierno con el récord de ser el presidente que más bombas lanzó y que dejó como regalo al mundo la creación del Estado Islámico. O que antes del conflicto bélico, Zelenski era acusado de gobernar Ucrania con los mismos métodos corruptos que decía querer abolir cuando llegó al poder. Hoy en cambio su figura es sagrada. Tan sagrada que hasta empresas como Porcelanosa tienen que plegarse a sus dictados: dime a quién debes obedecer y te diré de quién eres esclavo.
Qué vergüenza todo esto.
Que venga la escoria de Zelensky a España y le laman el culo solo es muestra de la gentuza que gobierna esta repugnante colonia del anglosionismo y de la pestilencia y ultradecadencia con que infesta la democracia de mierda.
España está perdido.
Lo que nos cuesta a los españoles mantener a toda esa casta vendida al Nuevo Orden Mundial y a la Agenda 2030, así estamos que nos llevan a la ruina y a la esclavitud de cabeza.
No somos conscientes que el Estado lleva aodctrinando imbéciles en sus escuelas y universidades públicas desde hace 45 años. Es lógico lo que vemos entonces en la opinión pública. Sólo queda el “sálvese quien pueda”. Esperar otra cosa es pura ficción. Mucha suerte a todos.
Seguro que no, le hubieran abucheado
España es como el titánic, un barco que se hunde con una mayoría de la tripulación, aborregada y servil, ajena al desastre que se nos viene encima. A estas alturas de la película, la cuestión no es saber si nos vamos al fondo o no, sino cuando, y si alguien no lo remedia, será más pronto que tarde.
Ojo! Que entre los aplaudidores estaban los traidores peperonis y los “patriotas” de VOX. Éstos últimos se apuntan a cualquier ceremonia que les de votos de pobres incautos o directamente de imbéciles que se dejan engañar por esa tropa de farsantes, vendidos al NOM y comprados por el sionismo globalista genocida. Alguien debería hacer un Memorándum con las traiciones de esta banda de arribistas (disfrazados de patriotas) de VOX. De esta nueva patulea que salvo alguna posible excepción, son los mismos perros con diferentes collares. Son el ejemplo perfecto de gatopardismo, es decir, aparentar cambios para que todo siga igual… Leer más »
Tambores de guerra, la suerte está echada.
¿GUERNICA? !CABRA, PARACUELLOS, HOLODOMOR…! !TITIRITERO!! !!APRENDA HISTORIA!! De vergüenza ajena. Todos levantados aplaudiendo al TITERE de SOROS, al “campeón” del Nuevo Orden Mundial a costa de la sangre de sus súbditos. Como NO hay crímenes dentro de la órbita MARXISTA, para epatar a sus “socios” Sanchiztas tiene que sacar a colación la GRAN MENTIRA de Guernica. ¿Y los 109 asesinados en el bombardeo ROJO de la localidad de CABRA,en pleno día de mercado?.!Claro era zona nacional y no tuvieron a un PINTA MONAS que hiciese unos garabatos!. La gran mentira es que ni siquiera el cuadrito de marras es sobre… Leer más »
Esto recuerda bastante al secuestro de Carlos IV y Fernando VII.