Julia Navarrete.

AD.- La ex dirigente de Vox en Benalmádena, Julia Navarrete Bergmann, tomará este jueves posesión de sus credenciales como concejal del Ayuntamiento de ese municipio, en calidad de no adscrita a ninguna formación política.

Hispanoalemana y políglota (habla cinco idiomas), Navarrete ha sido una de las integrantes más activas de la Plataforma Antigestora de Vox Málaga capitaneada por el ex número 2 del partido, Antonio Pulido. Por este motivo, muchos de sus miembros tienen previsto acompañarla en su toma de posesión.

En su escrito presentado ante el ayuntamiento benalmadense, la nueva edil se muestra muy dura con su ex partido, calificándolo de “puro marketing y que se caracteriza principalmente por su falta de democracia interna y desprecio a su afiliación”. “Vox es partido que ha utilizado y ninguneado a sus bases, gracias a las que han conseguido ocupar sus prestigiosos puestos en el Congreso de los Diputados, Cientos de bajas de afiliados y cargos orgánicos avalan mi exposición, un partido que maltrata a sus bases no es una opción”, ha añadido.

Carta abierta

Julia Navarrete amplía sus críticas a Vox en un escrito que nos ha remitido hoy y que reproducimos:

“Queridos y no tan queridos excompañeros de partido, amigos y enemigos, llevo unas semanas disfrutando con el revuelo que se ha formado en Vox tras mi noticia sobre la toma de mi acta como concejal en el Ayuntamiento de Benalmádena (mi acta, os recuerdo, porque yo me la trabajé como muchos otros compañeros, con la única diferencia que yo iba la tercera en la lista del partido).

Gracias, Armando Robles, gracias amigo, por permitirme a través de Alerta Digital crear este revuelo, poner al descubierto la pantomima que es Vox  y darme la oportunidad de disfrutar como hace mucho tiempo no lo hacía.

Jamás aceptaría el acta que llevase las siglas del partido que repudio y que me execra.

Jamás aceptaría el acta de un partido que ha utilizado, despreciado y maltratado a sus propias bases, a sus mejores activos, con el beneplácito de sus concejales y otros cargos orgánicos.

Jamás aceptaría seguir formando parte de un partido que avergüenza el concepto mismo de la dignidad y que representa por sí mismo un monumental engaño. Jamás lo aceptaría porque Vox representa para mi lo más detestable y miserable de la condición humana. Ni por todo el oro del mundo aceptaría compartir las siglas de Vox en una sesión plenaria en el ayuntamiento de Benalmádena. Os habéis confundido conmigo; a diferencia de otro, al que por desgracia tendré que ver en las sesiones plenarias, ni me vendo ni me arrastro para vivir del cuento, ya sea en un partido o en otro.

Armando Robles y la flamante concejala de Benalmádena, Julia Navarrete, flanqueados por el presidente de la Hermandad de Antiguos Caballeros Legionarios (izquierda) y Pepe Cobo, vicepresidente.

Dejad de una vez de manipular y engañar a la ciudadanía, que tan miserables mentiras no os las creéis ni en vuestros peores delirios.

Desde mi nuevo puesto intentaré servir recta y eficazmente a mis vecinos. Seré como hasta ahora, políticamente incorrecta, pero podéis estar seguros  que todas mis iniciativas serán la viva expresión de una conciencia recta y saludable, sin más miras que el interés de la gente a la que un día engañasteis, tal vez porque no os conocían tanto como os conocen hoy.

Me despido, he disfrutado mucho con todo esto y lo seguiré haciendo con las manos limpias y con la dignidad de la que pocos de vosotros podéis presumir.

¡Viva España y los españoles de principios y de bien!

Benalmádena traditoribun non praemiat! ¡Benalmádena no paga traidores!”