La vida corrupta y degenerada de Mao Tsé Tung
José Rangel.- En la novela de Francisco Umbral, Madrid 1940 Memorias de un jóven facista, se describe la anarquía de una ciudad desbordada por la violencia, donde los perros comen cadáveres en la noche, las calles se tiñen de rojo y los ciudadanos se vuelcan en la disolución.
Allí transcurre la vida del personaje central, que encarna un joven de las filas fascistas, adoptado por el rito de José Antonio Primo de Rivera en su boga falangista, y que revela la trata de niñas y mujeres entre los jerarcas militares.
La revolución comunista china en 1949 tampoco escapó al tráfico de niñas, como lo demuestra la vida de Jiang Qing, la cuarta esposa de Mao Tsé Tung, que encabezó la “banda de los cuatros” durante la Revolución cultural.
Esta mujer del vodevil, contrajo matrimonio con el líder comunista en la ciudad de Yanan en 1938. Luego, y separada de él tras su muerte, en 1979. se le comutó la pena de muerte por la cadena perpetua, y en 1983 salió en libertad, sin embargo, se suicidó en 1991. ¿Por qué?
El mundo vio a la luz un libro titulado: 9 Comentarios Sobre el Partido Comunista Chino, en sus parráfos una cita destaca sobre las demás:”En la China actual, la ética y moralidad se han deteriorado hasta el punto de la prostitución, las drogas, y las conspiraciones entre funcionarios”, resalta el texto.
El estilo degenerado y corrupto de Mao Tsé Tung, impulsó la revolución comunista.
En sus memorias, Zhang Kegang, alto funcionario del partido comunista en la era Mao, reveló que, El Gran Conductor, tuvo oficialmente cuatro esposas, Luo Yixiu, Yang Kaihui, He Zizhen y Jiang Qing, y también otras 16 concubinas de modo semioculto.
Estas revelaciones de Kegang, provocaron su destitución a mano de Deng Xiaoping, que lo envió a la Federación de Círculos Literarios y Artísticos de Chongqing por su traición.
En octubre del 2011, una edición del magazine: Revista Abierta, de Hong Kong, publicó unas memorias escritas por el editor jefe de esta revista. Jin Zhong, tituladas, Confesiones de la amante de Mao Tsé Tung, donde se viralizaba la vida de Chen Luwen, una de las 16 concubinas que en 1997 decidió contar la vida disoluta del Gran Conductor.
Chen Luwen tenía catorce años en 1962, y bailaba en una compañía de arte comunista. Sus 168 centímetros de altura le hacían resaltar sobre las demás chicas, y esto captó la atención del Jefe en el concentrado de Zhongnanhai, donde las niñas eran recluidas para satisfacer a los poderosos.
Que aupados por la compañía danzaria, Kongzheng And Public Security Art Troupe, tenían acceso a este mercado de púberes, vendidas por comida a jerarcas del Partido como Liu Shaoqi, y Zhu De fu, hombres fuertes del entorno del caudillo.
Chen Luwen expone la concupiscencia de los miembros del PCCh y su azarosa vida.
“Lin Bao, nos dice Luwen, por su adicción a los fideos Blancos, refiriéndose al consumo de opio”, fue el único jefe comunista que no profanó a las chicas”, “y sin embargo, continúa diciendo Chen Luwen, los militares, Zhu, Ye, y Lao Deng, violaron a muchas”, agregó.
Luwen había visto, como desde Hangzhou, el partido comunista enviaba en avión grupos de niñas para el mercado sexual del entorno de Mao Tsé Tung. Y contó, como el mismísimo Mao le pidió una vez que le presentara a sus diez hermanas en Pekín, pero ella se negó.
Chen Luwen, estaba tan metida en los salones de la secta roja, que al preguntársele sobre, Zhou Enlai, el más alto entre los funcionarios comunistas, aseguró:”tuvo por amante una bailarina de Haisheng, esposa de un general, y agregó, nació Ai Bei, una hija ilegítima adoptada por un viceministro al no ser reconocida”, terminó diciendo Luwen.
Más tarde, se supo que la hija bastarda de Zhou Enlai, escribió unas memorias tituladas: Calling Father Too Heavy, donde confesó sin tapujos ser la hija ilegítima del segundo hombre más fuerte de Mao Tsé Tung.
Tampoco Deng Xiaoping escapó a la corrupción y la promiscuidad: Durante su periplo por el Cuarto Distrito Militar del Suroeste, tuvo un affaire con una estudiante universitaria muy jóven y dejó a su esposa por esta mujer.
Luwen recuerda a Den Xiaoping. “como un hombre sin méritos propios que había robado la fama de Liu Bocheng, y se escondía tras Zou Jiahua, Li Peng y Jiang Zemin, porque odiaba a muerte a Mao Tsé Tung”, dijo.
Cuando Liu Suyuan, líder de la compañía cultural y artística, delató a Chen Luwen y a su amiga, por tener quejas sobre la sexualidad del Gran Conductor, y sentir asco de su condición de prostitutas, Mao dijo:”¡son rumores! Llévense a Meng Jinyun y Chen Luwen y golpeen sus cuerpos”.