Musulmanes en los Campos Eliseos de la capital leridana, convertido en lugar de rezos pese a su condición de espacio público.

Josep Antoni Ortiz.- La secta musulmana salafista de la calle Nord de Lleida continúa con sus rezos en los Campos Eliseos de la ciudad, auténtico pulmón verde de la ciudad y lugar frecuentado por paseantes, deportistas y familias enteras. El Ayuntamiento, obvia decirlo, mira para otro lado y consintiendo así la ocupación de facto de dicho espacio, que es de todos los ciudadanos.

Ya que al señor alcalde le parece bien que estos integristas celebren sus rezos en un lugar público, denunciemos al menos en AD las innumerables quejas de los vecinos del barrio de Cap-pont. Señalan que a ciertas horas del día es practicamente imposible sacar a pasear a sus mascotas sin que sufran las amenazas de un colectivo nada de fiar, que no se caracteriza precisamente por su fiabilidad.

Afortunadamente para los vecinos autoctonos de la calle del Nord, entre los que me incluyo, debido al impago reiterado del alquiler y por orden judicial, a los musulmanes se les ha desalojado definitivamente del local-oratorio que tenían allí; un local, recordemos, que ya fue cerrado hasta en dos ocasiones por sobrepasar el aforo permitido.

Luego de que la propietaria del establecimiento los denunciara por impago, se ha sabido el importe adeudado asciende a 9000 euros. Es decir, que
no han pagado ni un sólo euro desde que el Ayuntamiento les cerrara el local por segunda vez debido a los incumplimiento de las normas municipales. Ahora el mismo Ayuntamiento les ha cedido un espacio en los Campos Eliseos, con el consiguiente problema para los vecinos. Lo que hace el Ayuntamiento de Lleida merecería figurar en los anales del despropósito. Compensa con un espacio público a quienes han ignorado cumplimientos tan básicos como el pago de un alquiler o proteger la integridad física de las personas.

Pero como nada en Lleida es susceptible de no ser empeorado, la concejala progre de Seguridad, Sara Mestre, insiste en que el problema de los salafistas es el de no haber aceptado el terreno que se les ofrecía en el polígono industrial. Los salafistas, que con tantas atenciones han refinado sobremanera sus gustos, quieren un local en el centro. Y gratis, por supuesto, que ancho es el bolsillo de los autóctonos.

Señora regidora, esta secta está acostumbrada a rezar en el desierto, de ahí que sus miramientos hacia ellos hayan sido tan excesivos que ahora quieren lo mejor. Como ustedes no conocen nada de la psicología mahometana, cometen el error de considerar que los gestos de buena voluntad para con ellos van a ser traducidos como tal. Siguen sin enterarse y por eso estamos tan mal. No se enteran ni se van a enterar nunca que la política del ‘gratis total’ es fuente de problemas para los vecinos. A ustedes les importa nada que esa gente moleste a los vecinos y conviertan nuestras calles en un ecosistema islámico. Ahora viene el mes del Ramadán y no quiero ni pensar que nos tocará sufrircon sus letanías hasta cinco veces cada día. Este pareado se lo dedico a usted.

Le pregunto en nombre de muchos vecinos, señora regidora: ¿Continuarán rezando en los Campos Eliseos, en el Pabelló Blau o el Ayuntamiento les buscará otra instalación para tan ‘altos’ menesteres. Siempre gratis, claro. Y si es así, ¿que pasará con los ciudadanos autóctonos que quieran celebrar una reunión multitudinaria o una fiesta universitaria en plena calle? ¿Pan para unos y sal para otros?

Hasta ahora, cada vez que un grupo local solicitaba un espacio público para celebrar un evento tenía antes que pagar al Ayuntamiento unos 6000 euros, además del deber de contratar servicios de seguridad y sanitarios. ¿Por qué no podemos disfrutar todos de las mismas instalaciones que ustedes ceden gratuitamente a unos cuantos? ¿Es que somos parias los de aquí o tal vez sea que el buenismo del Ayuntamiento ya roza lo indescriptible? Buenismo a costa de nuestro dinero, claro.

Por el momento, ni el equipo municipal de gobierno ni la oposición dicen nada al respecto. Hemos llegado a tal grado de corrosión política que, con tal de que los musulmanes no protesten, se recalifican terrenos destinados a uso industrial para convertirlos en suelo para uso religioso. ¿Cómo va a crearse empleo y riquezas con esa mentalidad tan refractaria al sentido común?

Ademas, les planteo la siguiente cuestión: Si la otra asociación musulmana Al Umma que pretende instalarse en el polígono, construye finalmente allí su mezquita, ¿le seguiremos cediendo los Campos Eliseos al señor Houzi, iman de la comunidad radical islamica salafista, para su uso y disfrute a consta de nuestro dinero y nuestra tranquilidad ciudadana?

Por desgracia, la Plataforma per Catalunya (PxC) nada puede hacer al no tener concejales en el Ayuntamiento de la ciudad. Muchos vecinos se quejan ahora de lo que no supieron prever al depositar su voto. Deben saber que si estuviésemos en el Ayuntamiento, esta gente no se reiría de Lleida y de sus gentes como lo hacen ahora.

Y una curiosidad última. ¿Se le han pasado los recibos del IBI a la pobre propietaria damnificada, que no pudo cobrarle a estos morosos porque ustedes les concedieron otro lugar de reunión completamente gratis?

Resulta curioso que ustedes, firmes defensores de la laicidad del Estado, defiendan sin embargo que seamos los vecinos quienes costeemos a esta gente sus lugares de rezo. ¿Laicismo para todos o sólo para los cristianos? ¿Y aún hay progres que se pregunta el por qué del florecimiento de los partidos identitarios en esta desquiciada Europa? Pues que Dios les conserve la vista, ya que no el talento ni el coraje. Esos lo tienen ya completamente perdidos.

*Delegado comarcal de Plataforma per Catalunya (PxC) en El Segrià (Lleida).