Los manifestantes prenden fuego a la entrada del Ayuntamiento de Burdeos en mitad de las protestas por la reforma de las pensiones
Francia ha vuelto arder este jueves. Lo ha hecho de nuevo a raíz de las protestas convocadas en contra de la polémica reforma de las pensiones de Emmanuel Macron aprobada la semana pasada a través de un decreto. En esta ocasión, una de las imágenes de la jornada ha sido la entrada del Ayuntamiento de Burdeos, a la que algunos manifestantes han prendido fuego.
En apenas diez minutos, la puerta principal del consistorio ha sido pasto de las llamas, tras una movilización “histórica” al reunir a 110.000 personas en las calles de la ciudad, según los sindicatos. Los bomberos han acudido al Ayuntamiento y han extinguido rápidamente el fuego, que ya había calcinado la puerta.
El alcalde Burdeos, Pierre Hurmic, ha asegurado estar “conmocionado” ante la actitud de los responsables de estos disturbios. Asimismo, ha explicado a la televisión francesa BFMTV que la quema de la entrada del consistorio se ha producido justo cuando la manifestación ya había finalizado y el Ayuntamiento no contaba con ningún dispositivo de seguridad para protegerlo.
Las manifestaciones han reunido este jueves a 3,5 millones de personas, de acuerdo con los sindicatos, una cifra que el ministro del Interior, Gérald Darmanin, ha rebajado a 119.000.
Los disturbios al margen de las manifestaciones contra la reforma de las pensiones han dejado 149 agentes heridos y 172 detenidos, según los datos ofrecidos por el ministro.
Las protestas y los disturbios se han replicado en todo el país. En París, donde Darmanin ha hablado de 1.200 manifestantes violentos, las autoridades han registrado 140 incendios, la mayor parte de ellos con mobiliario urbano o las montañas de basura acumuladas en las calles tras dos semanas de huelga de recogida.