España ha recibido 258.000 toneladas de petróleo venezolano en 2023
José Gregorio Martínez.- El petróleo venezolano sigue llegando a España tras la flexibilización de las sanciones por parte del Gobierno estadounidense de Joe Biden, que en noviembre pasado autorizó a Chevron volver a operar en Venezuela y pocos meses atrás ya había beneficiado con esta medida a la italiana Eni y la española Repsol, que pese a la falta de interés por parte del chavismo en el intercambio por deuda –argumento con el que había frenado los despachos en agosto– la petrolera española ha logrado convencer a la dictadura venezolana de reactivar este mecanismo para intentar recuperar con barriles de crudo al menos una parte de los más de 200 millones de euros que le adeuda PDVSA. Las cifras en ascenso durante 2023 así lo demuestran.
En lo que va de año, España ha recibido un total de 258.000 toneladas de petróleo venezolano, según revelan las estadísticas de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores), actualizadas este lunes, cuando se da a conocer que en abril el despacho fue de 157.000 toneladas, mostrando un aumento en comparación con marzo, cuando había sido de 101.000 toneladas. La suma de estos dos meses corresponde al total recibido en 2023, considerando que en enero y febrero las casillas quedaron en blanco.
PDVSA sin opciones
Hasta el momento este comportamiento apunta a un incremento en comparación con 2022, pues no fue sino hasta julio del año pasada cuando España recibió el primer cargamento de petróleo venezolano desde septiembre de 2020, cuando esta negociación se paralizó producto de las sanciones impuestas por EE. UU. al régimen chavista durante la presidencia de Donald Trump. Solo en ese mes llegaron a puertos españoles 435.000 toneladas de crudo despachados por PDVSA, pero de inmediato se ordenó desde Caracas suspender los envíos ante la descarada pretensión venezolana de obtener un pago de contado cuando mantiene una deuda de más de 200 millones de euros con Repsol.
Debido a esta situación las cifras volvieron a cero durante los meses de agosto, septiembre y octubre. Al no estar en condiciones para exigir y ante la necesidad de mostrar una aparente normalización de la industria petrolera venezolana, a la dictadura no le quedó otra opción que ceder y reanudar los despachos en noviembre y diciembre hasta completar durante todo el año 2022 un total de 727.000 toneladas de petróleo venezolano enviadas a España.
En 2023 las estadísticas parecen ir en ascenso, pues la suma hasta el mes de abril no se comenzó a registrar el año pasado hasta pasada la mitad de año. Es por esta razón que Repsol ha descartado salir de Venezuela, pues mediante este mecanismo espera poder cobrar al menos una parte de la millonaria deuda.