Entre el pasado lunes día 7 y ayer domingo, a las costas de las islas Canarias llegaron un total de 1.000 inmigrantes a bordo de una veintena de cayucos. Una cifra que se eleva hasta los alrededor de 1.230 si se cuenta desde que empezó este mes de agosto. De ahí que el sábado, ante lo que se estaba viviendo, el vicepresidente del Gobierno canario, Manuel Domínguez, reclamara al Ejecutivo, en general, y al Ministerio del Interior, en particular, «más medios» para luchar contra la inmigración tras ese repunte en la llegada de cayucos al archipiélago.

Y es que las cifras que se están registrando en esta primera mitad de agosto ya superan o prácticamente igualan a otras anteriores. De esta forma, a falta de los datos quincenales oficiales de Interior, estas llegadas son casi idénticas a las de todo julio (1.295) y superan en unas 200 personas las de todo el mes de agosto del pasado año, cuando llegaron alrededor de 1.048 migrantes hasta las costas canarias.

La primera semana de este mes comenzó algo tranquila, con apenas 232 personas interceptadas por Salvamento marítimo cuando intentaban llegar a las islas. Sin embargo, a partir del lunes 7 empezó a incrementarse el número de embarcaciones y sus ocupantes. En las primeras 72 horas de la semana pasada ya habían llegado más de medio millar de migrantes a bordo de 11 cayucos.

Más de un centenar de ocupantes

Pero el pasado viernes por la noche la cifra ya había ascendido a 887 a bordo de 16 embarcaciones (en esta segunda semana), muchas de ellas con más de un centenar de personas a bordo, como la que llegó ese mismo día al puerto de El Hierro con 138 inmigrantes procedentes de Senegal.

Y aunque el sábado dio un pequeño respiro a Salvamento Marítimo, ayer volvieron a interceptar más barcazas. En esta ocasión, los últimos en llegar a Canarias fueron 111 personas a bordo de dos pateras.

En una de ellas, una embarcación neumática, viajaban 53 personas que tuvieron que ser rescatadas cerca de la costa de Fuerteventura, después de ser localizadas por un avión de vigilancia marítima. Entre sus ocupantes, 47 hombres y seis mujeres de origen subsahariano y magrebí.

Junto a esta, otra con 58 migrantes fue interceptada en el Puerto de Granadilla, en la isla de Tenerife, hasta donde llegaron por sus propios medios. 22 de sus ocupantes tuvieron que ser trasladados hasta diferentes centros hospitalarios de la zona, uno de ellos en estado grave.

En lo que va de año, hasta las islas Canarias han llegado alrededor de 10.820 inmigrantes, una cifra que ya supera en casi 500 los interceptados en el mismo periodo del pasado año (10.347), aunque habrá que esperar a las cifras quincenales que Interior publicará esta misma semana.

Y mientras el archipiélago canario comienza a estar desbordado por la llegada incesante de cayucos, las costas de la Península también continúan recibiendo numerosas embarcaciones, muchas de ellas a través de la ruta argelina. El fin de semana, por ejemplo, fueron interceptados 27 inmigrantes en las islas Baleares (Mallorca e Ibiza), 16 en la localidad de Albuñol (Granada) y otros 28 a bordo de dos barcazas en Villajoyosa y Jávea (Alicante).