Esterilización cultural
La cuestión del inglés, en la enseñanza y en general, tiene carácter fundamental. No es lo mismo asimilar elementos culturales ajenos, cosa que suele enriquecer a una sociedad, que ser asimilado por ellos, lo que produce esterilidad, como realmente está ocurriendo.
En ese espíritu servil e inculto, que convierte a los partidos en agentes del desplazamiento del español en la propia España, destaca de manera especial la derecha. Para muestra, un botón, aunque hay infinidad de ellos: El PP ha dedicado una plaza a Margaret Thatcher en pleno centro de Madrid, al lado mismo de la que conmemora los descubrimientos y el Imperio español (destruido este en gran medida por los ingleses).
La Thatcher, un tanto alcohólica, compartía algunas ideas con el PP, pero era radicalmente una patriota inglesa (nada que reprocharle por eso) que en Gibraltar (¡Gibraltar!) hizo aquella declaración gloriosa: “¡Bombardeemos Madrid!”. Aquí, una gran admiradora de Inglaterra, Esperanza o Hope Aguirre, es también una patriota… inglesa, que ha cometido la felonía (por lo demás anticonstitucional) de cooficializar el inglés en la enseñanza, por lo que ha recibido u título en la Orden del Imperio Británico (el de Gibraltar). Y los argumentos para el desmán no pueden ser más clarificadores: el inglés es la lengua de la economía, la ciencia, el pensamiento, la música y el arte, la milicia… Se trata de arrinconar el español más y más a lengua doméstica y de infraculturas.
Por otra parte, el español es desplazado cada vez más por las propias empresas españolas, comenzando por la más exitosa de ellas, Inditex, y siguiendo por multitud de pequeños negocios con nombres ingleses, que se exhiben en inglés, con la publicidad en inglés llenando un espacio público que sigue siendo español aunque se note cada vez menos, etc. No es algo espontáneo sino en gran medida programado, para acostumbrarnos a ver en ese idioma la lengua del empleo y la cultura en nuestro propio país. Y esto es incomparablemente más grave que los ataques separatistas al español, seguramente llamados al fracaso.
Porque el relegamiento del español a lengua secundaria en la propia España sigue una marcha triunfal y está llamado a un pleno éxito… si no se genera una reacción, que debe encabezar un partido que bajo el lema MÁS ESPAÑA quiera actuar como revulsivo y salida a la podredumbre actual.
No habría que decir, aunque hay que hacerlo, debido a la mala comprensión lectora tan extendida, que al denunciar tal situación no condenamos el aprendizaje del inglés para quien lo desee o necesite. Lo que condenamos es la invasión y colonización en curso. En cuanto a la enseñanza pública, el inglés debe presentarse como lengua extranjera, como una asignatura aparte y no como aquella en la que se estudien las ciencias y otras asignaturas cruciales en aparente igualdad, de hecho superioridad, con el español, cosa que ocurre cada vez más.
La denuncia y contraataque a la colonización cultural debe ser un punto clave, de principio, en un programa político.
Aparentemente la gente está tan anestesiada por la verborrea al uso, que no tiene conciencia ni interés en el asunto, el cual solo despierta en una minoría un descontento vago y difuso. Pero también parecía que el patriotismo había desaparecido del ambiente español, y vamos comprobando lo contrario.
Un partido que ponga en primer plano este gravísimo problema no solo se destacará de los demás sino que encauzará de manera productiva una insatisfacción hoy por hoy impotente y poco concreta.
Soy padre de dos niños en un colegio bilingüe privado. Efectivamente en él se enseña todo en inglés, resultado: no aprenden ni inglés ni la materia lectiva que traten. Al final es un guirigay, los niños pierden interés por el aprendizaje porque las materias se dan muy resumidamente con el fin de que puedan ir traduciéndolas al inglés; surgiendo el bajo rendimiento y la falta de concentración. Recuerdo que hace años se preguntaban en España por qué a los españoles les resultaba tan difícil aprender inglés, al contrario de lo que ocurre en otros países europeos, por ejemplo, los nórdicos. De… Leer más »
Ya me gustaria que un partido politico sirviera a España, pero no lo hay, ni lo habra de momento. Este sistema no va a dejar salir un partido que quiera servir a los españoles. A Vox poco a poco lo haran desaparecer del ordenador en cada recuento electotsl.
Como siempre tan acertado y sexy
Bombear Madrid, en este caso con armas nucleares, también se ha dicho desde Rusia y no veo a Pio Moa especialmente indignado por ello. Y respecto a la enseñanza del inglés y al cuadro que pinta del inglés desplazando al español en plazas y bares, más falso que un rublo con valor, sólo decir que lo comprendo perfectamente. Para el ojo inexperto es una paletada de alguien que no ha salido de su casa en la vida, y no es el caso, por lo que nos lleva a lo que ve el ojo experto: Los vendemotos necesitan víctimas para poder… Leer más »
Cuando recibo un correo electrónico, exempli gratia, en inglés, de una empresa o establecimiento español, cuyo nombre comercial por supuesto también figura en inglés, contesto en latín
Cada vez que en mi Carabanchel, otrora castizo, me encuentro con un rótulo de “Barber Shop” u otro semejante (los hay por docenas) siento una mezcla de nauseas e ira. Tengo los mismos sentimientos cuando escucho conversaciones trufadas de barbarismos (sí, esa es la denominación de los términos de una lengua extranjera metidos de clavo en la propia). No tengo esperanzas al respecto de partido político alguno de los existentes ni venideros; creo que hemos de ser las pocas personas conscientes de este mal los que pongamos en ridículo a los muchos sin nobleza (evito deliberadamente el muy extendido término… Leer más »