La Voz de Galicia

El presidente del Partido Popular y líder de la oposición, Alberto Núñez Feijoo, se suma a la campaña de Alfonso Rueda por la presidencia de la Xunta con un mensaje muy claro: «Sánchez solo busca entregar Galicia al nacionalismo del BNG».

—¿Qué le diría a la bolsa importante de indecisos de última hora?

—Siempre hay un grupo de indecisos. Les diría que no le regalen la Xunta al nacionalismo. Sánchez solo busca entregar Galicia al nacionalismo del BNG. Les diría que elijan un gobierno que funciona frente a una miscelánea multipartita de organizaciones, contrapuestas algunas de ellas, que además no tienen experiencia de gestión en la Xunta. Que voten por la convivencia, por las familias, por su futuro y por el de sus hijos.

—¿Qué les ofrece el PP a los gallegos?

—Políticas útiles, no políticas de confrontación. Unidad frente al conflicto. Soluciones frente a problemas. Cualquier voto que no vaya al PP es un voto que lleva a Galicia a un multipartito, por lo que dicen las encuestas, presidido por el nacionalismo. Un paso atrás.

—Pedro Sánchez nunca había venido tanto a Galicia.

—El objetivo de Sánchez es que no gobierne el PP, lo hizo en todas las comunidades. Es lo único que le preocupa. Además, el PSOE nunca tuvo como prioridad Galicia, pero en este momento es un ninguneo enorme. Cancela los proyectos económicos como Altri o Alcoa. Retrasa las infraestructuras. Lo estamos viendo también con la ley del litoral. Con el mismo estatuto se le va a transferir a los vascos y se les va a autorizar gestionar su franja del litoral y a nosotros se nos lleva al Tribunal Constitucional.

—¿Alcoa, en concreto?

—El PSOE cerró Alcoa, con el Bloque mirando para otro lado, y creó la mayor crisis industrial de la provincia de Lugo. Si el PP desde Madrid hace lo que hizo el Gobierno de Sánchez con Alcoa, yo no podría ni dar mítines por Lugo.

—¿38 escaños lo son todo, 37, nada?

—Ese es el programa del Partido Socialista, el de Podemos, el del Bloque, solo buscan que al Partido Popular le falte un escaño.

—¿Considera que Sánchez tiene un especial interés en que el PP pierda las elecciones por tratarse Galicia de su tierra?

—Bueno, ese es un plus, sin duda. El plus de decir ‘‘le hemos ganado a Feijoo”. El señor Sánchez va a tener el peor resultado en Galicia de todos los secretarios generales que ha tenido el partido socialista en su historia.

—¿La clave para el resultado final es la movilización?

—Exactamente. Nosotros les tenemos que trasladar a los gallegos lo que creo que los gallegos saben: todos aquellos que no son nacionalistas que confíen en la papeleta del Partido Popular de Galicia. Esa papeleta es la garantía absoluta de que el nacionalismo no va a fracturar la sociedad gallega.

—Los críticos dicen que son muchos años del mismo partido, desde el 2009 que ganó usted. ¿Qué les respondería?

—Eso es como si los nacionalistas dicen lo mismo del alcalde de Pontevedra. El PP siempre gana en Pontevedra, pero no recuerda desde hace cuánto gobierna el BNG y siguen defendiendo que es la mejor solución para la ciudad. El presidente Rueda se presenta por primera vez. La señora Pontón es la diputada más antigua del Parlamento gallego. Estaba de diputada con Fraga. Ya se ha presentado en tres ocasiones a la Xunta. Honradamente, eso no es renovación. Eso no es lo nuevo, eso es lo viejo. El BNG y la UPG siguen diciendo lo mismo que cuando yo iba al instituto.

—Usted ha insistido en las diferencias entre el mensaje de Ana Pontón y lo que dice su programa.

—Es que siguen diciendo lo mismo: no a la Constitución, no al Estatuto, no a Europa, referendo de autodeterminación, socio de Esquerra y de Bildu, reponer el impuesto de sucesiones, echar a la Guardia Civil de Galicia, ideología en la cultura, ideología en la educación, ideología en la economía… Esto es lo más antiguo y lo más carca. Por eso les molesta tanto que se conozca su programa. Ahora se ha sabido que el señor Pernando Barrena es asesor de Ana Miranda en el Parlamento europeo. Un señor condenado por ETA, militante de Bildu, un año y ocho meses de prisión dictada por el Tribunal Supremo por pertenencia a banda armada. Si usted respeta tanto a Galicia, dígale a los gallegos qué es lo que piensa y defiende de verdad. Luego, ellos decidirán.

—Nadie conoce a Alfonso Rueda como usted. Recuerdo que en el 2009, tras su victoria, al día siguiente el primero que estaba esperándole en la sede era Rueda. ¿Cómo lo definiría?

—Conocimiento y confianza. Rueda es funcionario de carrera. No necesita la política para llegar a fin de mes. Estuvimos juntos en la oposición y en el Gobierno. Es una persona plenamente fiable, de palabra, honesto y que genera confianza. Es hoy el gallego mejor preparado para ser presidente de la Xunta por su experiencia. Además, ha mamado la política y el galleguismo en su casa, con su padre.

—¿Teme que en un final apretado los votos a Vox puedan impedir un gobierno del PP?

—Con todo el respeto para cualquier elector, le pido que nos preste su voto para impedir que el nacionalismo, el socialismo y los planteamientos de Sumar y de Podemos se hagan con Galicia. Les recuerdo que no gobernamos el Ayuntamiento de Lugo y las diputaciones de Lugo y de A Coruña por unos pocos votos.

—Sánchez dice que Rueda es un administrador cuando en la sociedad del siglo XXI lo que se necesitan son políticos transformadores.

—Le agradezco al presidente Sánchez que diga que Rueda es un político administrador, porque Sánchez es un político malgastador. Sánchez nos ha metido en una montaña gigantesca de deuda. Ha emitido 400.000 millones de euros de deuda púbica que si se dividen entre el número de días que lleva de presidente sale a 210 millones de euros de deuda cada día. Así es que se burla de la gente que sabe administrar. Sánchez no se dedica a la gestión. Se dedica a detentar el poder. Pero no a mejorar su país.

—¿Galicia puede sufrir por los acuerdos de Sánchez con otros partidos?

—Por supuesto, Sánchez no es nadie sin Esquerra, sin Junts, sin Bildu, sin el PNV y sin Podemos. Por tanto, lo que da a estas cinco formaciones políticas lo pagamos, entre otros, los gallegos. No se olvide que el PSOE nunca ha tenido en el radar a Galicia. Nunca ha sido su prioridad.

—Su postura sobre la ley de amnistía y los indultos son claras: no a la amnistía y no a los indultos. ¿Pero teme lo que pueda llegar a desvelar algún día Puigdemont o Junts sobre esas conversaciones que duraron un día con el PP y de las que todavía desconocemos su contenido?

—Nosotros siempre hemos dicho que hablábamos con todos, salvo con Bildu y con Esquerra. La maquinaria de manipulación del Partido Socialista hay que reconocer que es buena. Dentro de nada van a intentar convencer a los españoles de que yo pacté la amnistía con Junts y por eso soy el presidente del Gobierno, ellos no la pactaron y están en la oposición. Solo me queda por ver esto. Me parece un insulto a la inteligencia de los ciudadanos.

—¿Pero algún día conoceremos lo que pasó en esas 24 horas de negociación con Junts?

—Sí. Lo he contado varias veces. No hemos parado de decir que la amnistía no es legal y además es inmoral. Atenta contra un principio democrático básico, que es la igualdad de los ciudadanos ante la ley. Pero es que no nos pidieron eso. Es que nos pidieron cosas menores como que el catalán sea el idioma oficial en el Congreso de los Diputados. Les dijimos que no. Si le dijimos a lo menos que no, ¿cómo les vamos a decir que sí a lo más? En ningún caso. Prueba de ello es que estoy en la oposición porque hemos dicho que no. En este momento de la campaña gallega hay que intoxicar para ver si algún partido, Vox, por ejemplo, consigue voto, ese es el único objetivo. El Gobierno está negociando ahora mismo con Esquerra y con Junts la ampliación de la amnistía. Fíjese hasta dónde llega el cinismo. El día 21 de febrero finaliza el plazo para volver a votar la amnistía. Pues están negociando ampliar la amnistía y a la vez diciéndole al PP que nosotros queríamos pactar con Junts.

—¿Cuáles son los hechos?

—Sí, vayamos a los hechos. Estamos en la oposición por decir que no a lo que el PSOE ha dicho que sí.

—¿Cuál es su plan para la reconciliación con Cataluña?

—Lo primero es que los independentistas se reconcilien con la ley, y se reconcilien con la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley. Ese es el primer objetivo. Ese es mi planteamiento. Si los independentistas dan ese paso de asumir el marco, entonces tiraríamos para adelante, siempre que se den cuenta de que no están por encima de la ley ni tienen más derechos que los demás ciudadanos. Comprenderá que entre los principios y el poder, he elegido los principios. Y sigo instalado en los principios.

—Viene de Barbate, por el asesinato de los dos guardias civiles a manos del narco en el Estrecho. Ha pedido la dimisión del ministro del Interior. ¿Están las fuerzas de seguridad en inferioridad para afrontar la amenaza del narco en el sur y en Galicia?

—He estado allí. Están en absoluta inferioridad, en una situación de total alarma, de indefensión de las fuerzas de seguridad, en relación con la actividad criminal y delictiva que se produce en toda la costa gaditana. Me reuní con todos en la zona y acreditan que cuatro embarcaciones estaban averiadas y por eso se recurre a una zódiac. El PSOE en el Ayuntamiento de Pamplona o en el Parlament no ha querido guardar un minuto de silencio. ¿Qué Partido Socialista es este? El presidente del Gobierno, la noche de luto se va a un festival y se pone un esmoquin.

—¿Cree que miran más para las elecciones gallegas por si pierde el PP que para los problemas del Gobierno?

—El Gobierno ha venido más veces aquí para intoxicar con los pélets en Galicia de lo que ha ido a Barbate después del asesinato de dos guardias civiles. Esta es la forma en la que insultan a la inteligencia de los gallegos y en la que ningunean a los guardias civiles y a los ciudadanos andaluces.

—Tractores, transportistas… El campo se levanta. Usted ha defendido bajar el IVA de la carne y del pescado. Ambas áreas son claves en Galicia. ¿Cómo podemos sacar a estos sectores productivos de la crisis en la que están?

—Pues está claro. Hemos planteado ya desde hace un año que los alimentos que habían subido en los últimos dos años un treinta por ciento y que están dentro de la canasta básica, que incluye la conserva, el pescado y la carne, tengan una rebaja. Se han negado sistemáticamente a la rebaja del IVA de estos tres productos, con la connivencia del BNG, que votó a favor en el Congreso del Real Decreto de medidas contra la crisis sin incluir la bajada del precio de estos productos, que son claves para los ciudadanos y para nuestro sector primario. Galicia es la primera productora de carne, de pescado y de conserva. Y los nacionalistas de aquí mirando para otro lado y dándole el ok al Partido Socialista y votando a favor de no bajar el IVA de esos tres productos.

—Para terminar, ¿se atreve con una quiniela para las elecciones gallegas?

—He estado cuatro veces en esta situación. Nunca se está tranquilo hasta que se acaba el escrutinio. Tengo muy buenas sensaciones.

Fuente: La Voz de Galicia