En la sociedad española pareciera surgir un creciente descontento respecto a la elevada presencia e influencia de la ideología feminista. Esto se evidencia en los últimos datos publicados tras el Día Internacional de la Mujer, por Barómetro Juventud y Género del Centro Reina Sofía de FAD en España.

Según informó recientemente La Vanguardia, la proporción de mujeres que se identifican como feministas está disminuyendo de manera significativa y por primera vez en años. No solo desde los partidos conservadores como Vox, que rompió el consenso en torno a la ley de igualdad de género, sino incluso en la propia izquierda que hace tiempo que tiene voces que alertan que el feminismo está perdiendo apoyo en España, especialmente como consecuencia de la división impulsada por los contenidos de la ley trans o la polémica ley del sólo sí es sí.

En concreto, según el Barómetro de 2023, la cifra ha pasado del 67% en 2021 al 57% el año pasado. Este descenso marca un hito, ya que desde 2017 el número de mujeres que se autodefinían como feministas no paraba de crecer, convirtiendo a España en uno de los países con más feminismo de Europa.

Asimismo, la medición señala que el distanciamiento del feminismo no se limita únicamente a las mujeres. También se confirma una tendencia a la baja en la identificación con el feminismo entre los hombres, que comenzó en 2019.

En ese año, el 37% de los jóvenes se declaraba feminista, cifra que descendió al 32% en 2021 y al 26% en 2023. En la actualidad, solo uno de cada cuatro jóvenes varones se considera feminista.

Según los expertos, la polarización que experimenta la sociedad y las connotaciones ideológicas de izquierda asociadas al feminismo son factores determinantes que explican en parte esta tendencia decreciente en la identificación con el movimiento.

El informe del FAD también señala la existencia de un sector de la población con ideas más tradicionales en lo que respecta a los roles de pareja y familia.

Por ejemplo, más de un tercio de los encuestados cree que las mujeres nacen con una mejor preparación para cuidar hijos (36%) y un porcentaje significativo defiende ideas como que las mujeres, aunque trabajen, deben priorizar la creación de un hogar y de tener hijos (26%), o que son los hombres quienes deben sostener a la familia (22%).

También se observa un refuerzo en los últimos años a la idea de una familia «patriarcal» y al amor romántico tradicional.