La poca vergüenza y la doble moral de la izquierda: claman contra Carvajal los que aplaudieron el plante de los diputados socialistas al presidente de las Cortes de CyL
AD.- Hay una mentira que jamás hemos creído: la que exalta la presente época como la más tolerante, inclusiva y libre de la humanidad. Nunca hemos dado crédito a esa sandez. Todo lo contrario, desde siempre nos pareció que los ismos de moda nos estaban conduciendo a la peor de las tiranías, la del relativismo moral.
El militante progresista, ese que es capaz de cambiar del ambientalismo al feminismo en cuestión de segundos, se declara un defensor acérrimo de los derechos humanos. Toda esa verborrea no pasa de ser un pretexto para atacar a Occidente, la única parte del mundo donde puede berrinchar sin ser decapitado.
El progre woke es como aquel adolescente que se siente valiente desobedeciendo a sus padres. Sin embargo, es incapaz de cuestionar los mandatos del jefe del grupo o del matón del colegio. El progresista se rebela contra Occidente porque sabe, de manera consciente, que todavía somos una sociedad tolerante, y que de cierta manera estamos de su lado.
De hecho, el progresista medio no dudará un segundo en defecar a las puertas de una capilla católica, pero pedirá respeto para los musulmanes, aunque muchas de las creencias islámicas vayan contra varios de los dogmas que dice defender. Por ejemplo, la homosexualidad libre. El fallecido profesor Olavo de Carvalho acuñó una etiqueta para describirlos: imbéciles juveniles.
Pero vayamos al último ejercicio de prestidigitación moral de la izquierda woke. El tenso y frío saludo de Daniel Carvajal a Pedro Sánchez en el recibimiento a los jugadores en Moncloa nos muestra de manera muy clara la doble moral progresista.
Este martes, la secretaria de Organización del PSOE de Castilla y León a la par que vicepresidenta de las Cortes autonómicas, Ana Sánchez, se ha desquitado en críticas contra el defensa del Real Madrid a través de redes sociales.
Sánchez, que no ha dudado en compartir varias reflexiones junto al vídeo del momento, ha tachado a Carvajal de “fascista” y “zafio” por el polémico saludo. “¿Y que le hace sospechar al tal Carvajal que nos gusta saludar fascistas? Lo que nos genera ni lo imagina, pero respetamos a este país más que todos los fascistas juntos”, ha señalado en su cuenta de X, donde también ha apuntado a que “España es mucho más” y el jugador “no tenía que ofender a más de la mitad”.
Pero la crítica ante la poca efusividad del saludo de Carvajal, que en ningún momento negó al presidente, contrasta con la actitud del PSOE cuando varios diputados socialistas retiraron la mano al presidente de las Cortes de Castilla y León en 2022. En aquel momento los diputados socialistas no saludaron a quien ostentaba el cargo de máxima responsabilidad en la Cámara por tratarse de un representante de Vox.
Durante la jura del cargo de los procuradores socialistas fueron al menos cinco los diputados que retiraron el saludo a Carlos Pollán, presidente de las Cortes. Desde el Partido Socialista no hubo ninguna crítica pública hacia sus propios diputados por esta falta de respeto al presidente de una Institución del país, como es un Parlamento autonómico, pero ahora sí que alzan la voz contra un deportista por estrechar la mano del presidente sin demasiada efusividad.
El contexto en el que tuvo lugar las faltas de respeto al representante de Vox era la entrada de los de Abascal en un Gobierno autonómico, con un vicepresidente, por primera vez. Entonces la prensa afín al Gobierno tampoco hizo mucho énfasis en estos desplantes de los socialistas, al contrario que ahora con Carvajal.
Carvajal, antes que futbolista, es un ciudadano español indignado, como tantos otros millones de compatriotas, con un presidente felón y embustero que se aferra al poder a costa de mancillar la dignidad de los españoles. Sánchez es un presidente, con algunos tics patológicos, que ha hecho del frentismo entre los españoles una de las claves para su supervivencia al frente del Gobierno. Lógico por consiguiente que Carvajal o cualquier otro prescinda de las efusividades cuando por cuestiones de causa mayor tiene que estrechar la mano del mayor traidor que registra la historia de España desde el reinado de Fernando VII.
Y ahora retrocedan en el tiempo e imaginen ustedes las loas y elogios que esta misma basura progre habría dispensado al jugador de la selección española que, tras una hipotética victoria en el Mundial de 2002, se hubiese negado a estrechar la mano del entonces presidente, José María Aznar.
Los mismos inquisidores de hoy habrían adoptado a ese futbolista como símbolo y paradigma del coraje cívico y de la libertad individual.
Lo bueno (o lo malo, según se mire) de estos canallas es que sus permanentes contradicciones, unido a la elasticidad de sus magros principios, les hace ser bastante previsibles. Por eso son tan odiosos y despreciables.
Genial articulo que describe la realidad de esta clase política que su único objetivo es conseguir su bienestar personal. Les importa tres pimientos la nación española. ellos, como los que les precedieron, tienen su retiro dorado en Sudamérica con sus cuentas llenas de billetes.
Todas estas loas sobre tolerancia, inclusividad , libertad, y etc. de las que se ufana el progresismo, no hacen más que poner en evidencia la falta de ellas. Como sentencia nuestro genial refranero, “dime de lo que alardeas y te diré de lo que careces” .
¿ A quien quieren engañar?
Son basura, hombre. Basura alimentada por sus lacayos y los medios que viven de la subvención.
En el marxismo, como en morolandia, la mentira está justificada. Son unos esquizofrénicos. Pero les funciona porque hay mucho ganado que les presta atención. No dicen nada más que tonterías, incoherencias y tópicos, además con gran pedantería, pero el ganado se lo traga todo. Así que, suma y sigue.
El ganado que más atención les presta es el de la credulonóica y antisocial secta woke
Al contraerio de lo que dice, la izquierda es supremacista y totalitariamente fescista, sigue la consigna: ¡anula al disidente!
Por un voto matan, esto les jode mucho que personas que se pueden permitir ser libres y tienen influencia al contrario del Rey del pollo sofrito les hagan un feo , estos viven del despiste del personal del odio que vierten la manipulación organizada vía TV.