Turismo ya puede obligar directamente a Airbnb o Booking a retirar anuncios de alquiler vacacional ilegal en Mallorca
Los trabajadores del departamento de Turismo del Consell de Mallorca tienen este verano una nueva herramienta que les está facilitando las cosas y que ha sido recibida como agua de mayo. Tiene un nombre, a priori, poco atractivo: ‘Reglamento UE 2022/2065 Relativo a un mercado único de servicios digitales’, tal y como ha adelantado el Diario de Ibiza. Tampoco es una panacea porque la capacidad del ingenio humano para idear trampas y escaquearse de la ley es infinita, pero en principio esta arma legal permitirá acelerar el cierre de anuncios de alquiler turístico ilegal en plataformas como Airbnb o Booking.
¿Qué cambios supone este reglamento? Hasta ahora, la legislación europea consideraba que las plataformas no eran responsables del contenido de las ofertas que en ellas se publicaban, y que el único responsable de un contenido ilegal es el comercializador que publica los anuncios. Las únicas obligaciones de estas plataformas -ya sea Airbnb en el campo del alquiler turístico, o Vinted o Wallapop en el mercado de artículos de segunda mano, por ejemplo- era la obligación genérica de colaborar con las administraciones públicas, pero sin entrar en mayores detalles.
Esta legislación bastante laxa obligó a diversos tribunales españoles a revocar expedientes sancionadores que se habían impuesto en algunas comunidades autónomas. Sin embargo, con la aprobación del nuevo Reglamento de la Unión Europea, las cosas han cambiado.
Desde el Consell de Mallorca confirman que los técnicos y trabajadores ya están aplicando este nuevo Reglamento y recuerdan que la institución está en contacto con todas las plataformas digitales: «Mantenemos reuniones constantes con estas plataformas y sus responsables para seguir avanzando en esta cuestión», explican desde la institución insular.
En este sentido, desde el Consell, preguntados por este diario, destacan que cualquier reglamento, venga de la Unión Europea o de donde sea, es bienvenido para contribuir a la lucha contra la oferta ilegal de alquileres, «que tanto daño hace a quien hace bien las cosas en nuestra isla». En cualquier caso, el departamento de Turismo de la institución subraya que, de momento, la respuesta que han recibido por parte de las plataformas es «muy positiva y satisfactoria», puesto que en general se muestran dispuestas a colaborar con sus medios para atajar el problema.
En el Consell de Ibiza también están aplicando el nuevo reglamento: «Hasta ahora era muy complicado que una plataforma nos retirara un anuncio. Pero el nuevo reglamento concreta muchísimo más sus obligaciones y nos pone las cosas más fáciles», explica Mariano Juan, vicepresidente primero y conseller de Lucha contra el Intrusismo de la institución ibicenca, en palabras a Diario de Ibiza.
«Cuando solicitábamos información sobre un comercializador que sospechábamos que ofrecía un alquiler ilegal, nos facilitaban un correo electrónico. Ahora tienen el deber de facilitar también el DNI y los nombres y apellidos para que las identificaciones sean más rápidas», explica Juan, que añade un segundo elemento muy importante: «Si la plataforma es requerida por la Administración para que retire un anuncio, lo deberá hacer sin necesidad de que haya sentencia judicial». Además, Juan asegura que gracias a disposiciones de los Decretos Ley de Vivienda y de Simplificación Administrativa del Govern, «ya podemos dictar medidas cautelares para pedir estos cierres».
Un vistazo a Booking permite comprobar que, en estos últimos meses, la oferta ilegal ha sufrido un importante retroceso. No es el caso de Airbnb, que sigue pareciendo una jungla sin ley donde cualquier superficie horizontal es susceptible de ser comercializada como alquiler turístico. ¿Cuándo veremos aquí también un cambio real? Juan prefiere ser prudente, pero asegura que las cosas ya han empezado a cambiar: «Teníamos veintipico procedimientos en marcha, y en todos ellos han retirado el anuncio sin necesidad de que les hiciéramos el requerimiento. Les hemos abierto el expediente, se han asustado y han cerrado».