Un régimen de saunas
1. Desde el “desastre del 98″, y salvo la “era de Franco”, la política española viene tarada por el desprecio a España y su historia, alimentado por unos políticos e intelectuales mediocres, pedantes y pretenciosos. También hay un españolismo folclórico, beato y “cañí”.
2. La democracia en España vino y solo pudo venir del franquismo y gracias a la debilidad de una oposición que se decía democrática sin serlo. Al querer hacer olvidar su origen, Suárez, el rey, la Iglesia y después el PP, traicionaban la historia y la transición.
3. Pasar a la democracia fue necesario porque el franquismo se descomponía tras haber cumplido una magnífica misión histórica; y fue posible porque PCE, PSOE y separatistas estaban demasiado débiles para volver a las andadas. Los errores vinieron más bien de la derecha democristiana.
4. Era normal que se cometieran serios errores al emprender algo históricamente nuevo como una transición que muchos daban por imposible sin previo derrocamiento de Franco y su régimen. La cuestión de fondo era: ¿se corregirían esos errores o se agravarían?
5. El mayor error de la Constitución del 78 fue abrir paso a una progresiva desintegración del estado en “nacionalidades” y autonomías sin límites. La idea partía de una doble concepción oculta antiespañola y antifranquista. Así, aquella Constitución es ambigua: proclama la unidad nacional y al mismo tiempo la socava.
6. Para la UCD constituyente del 78, la unidad nacional era deseable, pero no determinante. Lo principal era “entrar en Europa”. Concepto democristiano compartido por separatistas vascos y catalanes, cuya debilidad les hacía fingirse entonces solo autonomistas.
7. Como sabemos, los errores y defectos no se han corregido, sino agravado. ¿Cómo hemos llegado a la actual degradación? Aun con sus defectos, la Constitución del 78, permitió mal que bien, hasta 2002, una convivencia en bastante paz y libertad. Desde 2002, el sistema ha empeorado hasta degenerar en el régimen de las saunas. El caso de las saunas del matrimonio Sánchez no es meramente anecdótico, sino definitorio: saunas, otros burdeles y cocaína describe en el plano sexual una corrupción más ramificada, política y económica.
8. ¿Qué pasó en 2002? La condena del franquismo por Aznar (PP). Con ella condenaba implícitamente la transición, la monarquía y la democracia salidas de él, y bloqueaba la corrección de los falos iniciales del régimen. La indigencia intelectual de la derecha quedó entonces plenamente de relieve, y allanado el camino para que el PSOE continuase la obra, con leyes totalitarias de memoria histórica y corrupción rampante.
9. Así, la condena del franquismo por Aznar marca un antes y un después en la marcha del régimen hacia la desintegración. Sin embargo casi ningún historiador ha percibido su importancia decisiva. La agudeza y el nivel analítico de la historiografía “académica” y “científica” española nunca ha sido deslumbrante.
10. He tratado la evolución, o el fondo de la evolución de la democracia del 78, en Nueva historia de España, Los mitos del franquismo y, más específicamente, en La Transición de cristal, este último libro hoy descatalogado pero nunca rebatido, como los demás. La falsificación o visión roma de la historia está en la base de nuestros problemas políticos actuales.
La verdad no es para los cobardes. A veces me pregunto cómo es posible que aquí hayan existido personajes tan heroicos como el Cid Campeador, como el Gran Capitán, como Hernán Cortés, como Blas de Lezo, como los tercios españoles…y los héroes de la Guerra de la Independencia, todos hombres ejemplares que suscribirían frases tan gloriosas como la el almirante Casto Méndez Nuñze que prefiere honra sin barcos que barcos sin honra o la del político José Calvo Sotelo que prefiere morir con honra a vivir con vilipendio., o como la de José Antonio Primo de Rivera, que es de… Leer más »