Los dirigentes europeos, entreguistas y traidores, son culpables de la matanza de Solingen
AD.- Si los dirigentes europeos se hubiesen preocupado de luchar contra el yihadismo tanto como lo han hecho contra lo que falazmente llaman la extrema derecha; si los cuerpos y fuerzas de seguridad hubiesen antepuesto la lucha antiterrorista a estar al servicio de los líderes traidores del continente, matanzas como la de Solingen, con tres muertos y varios heridos, no habrían tenido lugar.
Nos gustaría ser portadores de nuevas buenas, pero la realidad nos muestra que nada ha cambiado sustancialmente para que seamos optimistas. Por el contrario se han agudizado las amenazas contra Occidente y la perspectiva que se columbra es, a nuestro modo de ver, sombría.
De entrada, los dirigentes políticos de derecha e izquierda son tan responsables como los propios terroristas de sucesos tan atroces como el ocurrido ayer en la localidad alemana. Pese al sinfín de víctimas mortales en suelo europeo, siguen instalados en la retórica del encrubrimiento hacia los terroristas. Estamos ya hartos de la ocultación de motivaciones religiosas en ataques terroristas, como llamar atropello a una masacre intencionada, por temor a ser acusados de islamófobos. Forzosamente, esta actitud claudicante ante la bestia yihadista nos lleva a preguntarnos qué intereses inconfesados hay en juego para que la pérdida de cientos de vidas europeas les importe tan poco.
La venalidad y molicie de las clases políticas, la falta de gobiernos y liderazgos auténticamente patrióticos que pongan freno a la inmigración descontrolada y la forma de actuar de los partidos izquierdistas que, en franca contradicción con sus ideales históricos, apoyan con entusiasno, como idiotas útiles, al islamismo radical, son los responsables de mover los hilos que posibilitan el gradual deterioro de las sociedades europeas y su calidad de vida. Asimismo, coadyuva al penoso objetivo, la prensa progresista falaz y maniquea.
Es imperio aclarar que las ideologías que contribuyen a fomentar el relativismo, el nihilismo y otras taras ideológicas están siendo cómplices de la actual reversión cultural y étnica de Europa. Hasta el punto neurálgico, ya que además de ser cómplices, los propulsores de esas ideologías, que atentan contra los postulados cristianos, son partícipes necesarios en el sojuzgamiento de Europa y de su pérdida de identidad y valores.
Nos preocupa y genera mucha desazón la claudicación europea, que pareciera estar resignada a ser fagocitada por la barbarie, pero lo que menos nos causa, es sorpresa.
La casta política, desbordada por los acontecimientos e incapaz de variar el rumbo porque ello supondría dejar al descubierto las mentiras sobre las que se ha fundamentado su discurso ideológico a favor de la multiculturalidad, ya sólo trabaja para sí misma y sus espurios intereses. La cada vez mayor población islamista radical impone ya su normas en barrios de las principales capitales europeas. A los políticos inescrupulosos que contribuyeron a favorecer graciosamente una inmigración masiva sin restricciones, no les pasa inadvertido, los necesitan para llegar al poder o mantenerse en él, traicionando de manera aviesa los intereses y bienestar de los ciudadanos nativos.
Es una pena que sean los grupos conocidos como “identitarios” los únicos que se opongan a la destrucción de la civilización occidental. Considerando el escaso o nulo aporte de los gobiernos europeos para preservar su identidad y cultura, es imperativo que los medios de comunicación independientes, como es el caso de Alerta Digital, esclarezcan a la opinión pública sobre los riesgos que conlleva el sincretismo en sus países.
De mantenerse las actuales políticas, no vislumbramos para Europa un promisorio futuro. Hasta los mismos islamistas abiertamente se burlan de la permisividad y laxitud de las democracias liberales europeas, que les permiten erosionarlas desde dentro para luego dominarlas, como continuamente proclaman.
Tampoco podemos omitir la responsabilidad de la Iglesia romana en esta hecatombe europea. La jerarquía católica registra elevados niveles de corrupción y aleja a los feligreses decepcionados. Para los creyentes nos queda como roca de contención y refugio espiritual, sólo Dios, que es insobornable.
Los europeos no sabemos defendernos. Ni nuestros gobiernos nos han preparado para hacer frente colectivamente al terrorismo islámico. Los muertos se multiplican. Atocha, Charlie Hebdo, Bataclan, Bruselas, Niza, Colonia, Berlín, Malmö, París, Londres, Manchester Barcelona, Colonia, Solingen. Siempre los mismos y auténtica indefensión por parte de unos europeos a quienes no nos interesa que el presidente de Francia mande cuatro aviones a bombardear al Isis, porque el problema no son los de allí, sino los que tenemos metidos aquí y que nos vemos obligados a cazar si queremos sobrevivir dignamente y no permanentemente aterrorizados.
Con la ayuda de la izquierda, los católicos buenistas y la corrompida casta política europea, el islamismo asesino juega con ventaja. Sabe que tras el patético ritual de velas y ositos se impone recobrar la calma; es decir, que las cosas no cambien para ellos. Y así hasta el próximo atentado. De nada habrán servido los muertos y heridos del viernes en la ciudad de Renania del Norte. Las fieras sanguinarias amamantadas por el buenismo y las oenegés subvencionadas emergerán otra vez de sus guaridas para asesinarnos. O para imponernos su siniestra autoridad, como a las cientos de mujeres víctimas de horribles agresiones sexuales sin que el hombre de Europa tenga los cojones de salir a defenderlas; porque no saben, porque no están preparados, porque no “es correcto”. ¿Tenemos los europeos sangre en las venas? ¿Es lógico que Macron declare que la culpa del terrorismo islámico la tiene el cambio climático? ¿Es lógico que los dirigentes europeos hayan promovido la llegada de decenas de miles de ilegales pertenecientes a un universo cultural refractario al nuestro¿
Puede que tardemos en comprenderlo. Pero no es tiempo de osopeluchismo, es tiempo de medidas concretas, como la de llevar de forma automática a todos los supuestos “retornados”, no al juzgado, sino ante el Tribunal de Crímenes de Guerra de La Haya, porque son genocidas. El Isis es genocida. Sus miembros lo son. Y saben que Europa es un continente débil e indefenso, sin hombres y mujeres capaces, lastrados por gobernantes timoratos que adoran retratarse con los grandes monarcas y jeques del petrodólar, cuando cualquier nación con apego a la honra jamás tendría relaciones con infractores de los más elementales derechos humanos.
En esta hora difícil hablamos a Europa aún sabiendo que nuestra voz se perderá en la espesura de la corrección política y del odio al Cristianismo de sus gobernantes y medios informativos.
Llamamos a los europeos de nuevo a glorificar el valor, la lealtad, el patriotismo, la disciplina, el honor y la heroicidad y que se impregnen de ello aquellos que por desgracia van a vivir tiempos de balas por la cobardía de nuestros políticos. Europeos, no dejéis que os maten más, sed capaces de llamar al enemigo por su nombre y llamar a combatirlo. Europeos, vuestros políticos os han alejado de Dios y Él os ha abandonado en tanto no retornéis al amoroso abrazo de nuestra fe de siglos. Europeos, vuestros dirigentes os han dejado, indefensos, a los pies de los caballos, por puro cálculo electoral. Ellos son cobardes, corruptos y traidores; vosotros, no. Ellos se han rendido al enemigo; vosotros, no. No participéis en el repulsivo postureo que ya han preparado los dirigentes alemanes, consistente en cubrir vuestras calles de patéticas velas y sonrojar vuestra dignidad malherida con inútiles minutos de silencio.
Vence el que más fe tiene en algo, ese algo puede ser la religión la patria , la familia y generalmente lo es. Roma fue grande cuando tuvo fe en sí misma. España cuando también la tuvo, cuando los valores del hombre tienian sus raices en los diez mandamientos y en general en toda a doctrina católica. En Europa no se cre en más valores que los que la gente posee en la bolsa. Creo que esto explica bastante bien lo que nos pasa y por qué nos pasa. Viva España Una Fuerte en su fe y en los principios… Leer más »
“Los inmigrantes del Tercer Mundo son músculos contratados por las elites políticas. Pueden aterrorizar a la población, y si la población nativa toma medidas para defenderse, el gobierno puede intervenir, llamarlos odiosos racistas y declarar la ley marcial. Es una situación en la que todos ganan. Luego, los inmigrantes ayudan con la aplicación de esa ley marcial mientras el gobierno redobla su apuesta por la vigilancia policial en dos niveles.”…Lagarto, lagarto ¿?
https://astillas3.blogspot.com/2024/08/los-sucesos-de-gran-bretana-sugieren-un.html
Otro “trastornado”,y asi seguiremos hasta que Europa no despierte del sueño woke
Estado Islámico (creado por CIA-Mossad) se ha hecho responsable de los apuñalamientos europeos en venganza del genocidio de palestinos por parte del régimen sionista de Israel (que a su vez creó a Hamás y Estado Islámico). Los ocultos amos están moviendo sus piezas en el tablero (como ienen haciendo desde el s XVIII, para que entremos engañados en su Tercera Guerra contra nosotros los goyim. La carta de Albert Pike a Mazzini, de 1871, es totalmente esclarecedora al respecto
Los emigrantes son importantes para mantener la farsa de la PARASITOCRACIA……justificar grandes sumas de dinero…saqueo..prebendas…..ONG…asimilados.. previo pago.
Y luego como ellos viven en zonas protegidas y urbanizaciones con una seguridad del carajo….pues todo normal.
No son “emigrantes” no hay que seguir el lenguaje políticamente correcto de este sistema decadente. Son Invasores y vienen a sustituirnos etnicamente porque así se les antoja a los que gobiernan el mundo.
El zorro anda suelto en el gallinero (Europa), cazando gallinas (europeitos), y el que abrió la puerta culpa a las gallinas por zorro fobia, mientras los ideólogos jud.. sionistas globalistas se ríen entre dientes. kalergi se soba las manos en su tumba..
Welcome, Welcome y Welbebe………………………
No. Los dirigentes europeos no son culpables, únicamente son marionetas.
Los verdaderos culpables son los europeos que han apoyado a esos dirigentes criminales hace unas semanas, donde los grandes bandos (o bandas) se han postrado luego ante una corrupta criminal como Von der Lacas.
Ahora que apechuguen.