Gilipollismo como nueva tendencia en Cataluña: El bar del Parlament catalán prescinde de los Conguitos por tratarse de un “producto racista”
Los Conguitos, producto propiedad de la empresa aragonesa Chocolates Lacasa, han sido retirados del bar del Parlament de Cataluña por su “connotación racista”, según informa El Heraldo de Aragón. Una decisión que se debe a los duros comentarios de un cliente, que aseguró que se trata de un producto racista.
El Parlament ha anunciado que “no es una iniciativa de la Cámara Catalana y, por tanto, no ha habido ninguna intervención de este ni de los responsables del Plan de Igualdad de dicha Cámara”.
La polémica con esta marca no es ninguna novedad, puesto que en 2020 ‘Change.org’ realizó una campaña con la intención de que los Conguitos fuesen retirados de todos los comercios.
Esta plataforma defendió hace cuatro años que esta chocolatina hace referencia a una caricatura de “pequeños congoleños”, representados como personas negras con enormes labios rojos. Esa petición ha alcanzado unas 6.400 desde entonces, pero no ha tenido la repercusión que esperaban.
Conguitos nació en 1961 con una estética distinta a la actual: figuras negras, con lanzas, labios gruesos y vestidas en tribu. A lo largo de los años, la marca ha intentado suavizar esa imagen con diferentes retoques, señala la misma fuente.
En la actualidad, Conguitos es una marca propiedad de la empresa aragonesa Chocolates Lacasa, después de que esta la comprara en 1987. Hoy en día, existen muchas variedades de estas chocolatinas, pero en esencia se trata de cacahuetes cubiertos de chocolate blanco o negro.
Lo que han hecho estos hdgp en realidad es publicidad gratuita de los entrañables Conguitos,¡¡¡Vaya atajos de cerdos malgobiernan en Cataluña!!!
Si sólo fuera Cataluña…
jajaja, bueno, el “seny” para el latrocinio, para el resto lo chabacano y lo vulgar. Por cierto, el derecho de pernada lo abandonaron bajo la espada de Fernando El Católico, porque era la única forma de que abandonaran el feudalismo y dejaran de expoliar. Sólo falta que hagan como Calígula, y nombren al burro cagalán Conseller de Cultura, o de política lingüistica, jajajaj.
Saludos y Buenas noches.
Hay que ser más corto que la cola de un conejo. No sé qué “racismo” puede haber en unos simples cacahuetes bañados de chocolate, una golosina que ya podemos decir que es “de toda la vida”
España y Cataluña en especial, se van por el retrete tanto en lo económico, como en lo social y aquí los tontos discutiendo que si los Conguitos son racistas. Poco nos pasa, para el nivel de adoctrinamiento que mostramos
Los conguitos son racistas pero creerse de una raza superior catalana y decir que los demás son inferiores está bien.
Muy fan de “conguitos”. Desde esto los sigo en todas las redes sociales.
Políticos ¿a cuántos conguitos os empotráis?