Baxter Dmitry.- Los Obama están en serios problemas. Barack y Michelle, que en el pasado eran intocables, ahora están enredados en acusaciones creíbles que los vinculan con los inquietantes sucesos ocurridos en las famosas fiestas “Freak Off” de Sean “Diddy” Combs, sucesos que se mantuvieron en secreto pero que ahora se enfrentan a un ajuste de cuentas público sin precedentes.

Lo peor de todo para los Obama es que todo está en la pantalla. Los federales lo tienen todo y los demócratas ya no controlan las palancas del poder en Washington.

¿Nuestra fuente? Una denunciante que trabajó entre bastidores en innumerables de estas fiestas, siendo testigo e incluso participando en algunos de los actos secretos más degradantes de la élite del entretenimiento. Ahora, está lista para salir a la luz, preparada para testificar y exponer a las figuras de primera línea vinculadas a lo que ella describe como rituales luciferinos.

Según nuestro denunciante, la lista de víctimas infantiles es inquietantemente larga porque Diddy fue reclutado por élites poderosas para corromper a innumerables celebridades y políticos al atraerlos hacia la pedofilia, a menudo de manera engañosa al principio, hasta que se volvieron cómplices y se comprometieron.

Los detalles de este informe son inquietantes, pero arrojan luz sobre por qué la industria del entretenimiento se ha convertido en lo que es hoy y por qué tantas celebridades conocidas están actuando de manera muy extraña en estos momentos.

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Vayamos directo al grano. La operación de Diddy se centraba en utilizar el sexo, las drogas y el chantaje para manipular a la gente, convirtiendo a los hombres heterosexuales en homosexuales y a todo el mundo, incluidas las mujeres, en pederastas.

Conozca a Adria English. Su debut en la industria del entretenimiento se produjo en los años 90 como bailarina en videos musicales y presentaciones en vivo, incluidas las famosas fiestas blancas de Sean “Diddy” Combs.

Diddy se encuentra actualmente tras las rejas en Brooklyn, en una de las prisiones más notorias de Estados Unidos, la misma instalación en la que estuvo detenido Jeffrey Epstein antes de que supuestamente se suicidara.

Pero a finales de los años 90 y principios de los 2000, cuando Adria English lo conocía, Diddy organizaba fiestas en las que las figuras de alto perfil con las que crecimos en el ojo público, incluidas estrellas del pop y presidentes, eran filmadas realizando los actos más degradantes y horrendos.

Con su novio de entonces, el modelo Anthony Gallo, English tuvo acceso a este mundo oculto y rápidamente quedó atónita por lo que estaba sucediendo debajo de la superficie.

Expertos de la industria como Denzel Washington y el difunto Prince han advertido sobre las oscuras influencias de los Illuminati y han compartido historias de advertencia para las jóvenes estrellas que están considerando vender sus almas al diablo. Adria English descubrió rápidamente que no estaban exagerando.

Estos crímenes viles llegan hasta lo más alto, con un cierto presidente y su supuesta esposa involucrados en violaciones en grupo de modelos drogadas, estrellas infantiles y varios niños menores de edad.

Y todo fue capturado en película y archivado meticulosamente como material de chantaje por el anfitrión de la fiesta.

Prepárese para recibir información vergonzosa sobre J-Lo, la misma mujer que recientemente hizo campaña por Kamala Harris y describió a Donald Trump como un hombre de mal carácter.

J-Lo mantuvo relaciones sexuales con un niño de 11 años. Todo está grabado. Y ella no era la única. Todos los que andaban con Diddy, todos, conocieron la pedofilia y todo quedó grabado en vídeo. Todos están comprometidos.

English también compartió el motivo de la abrupta salida de Denzel Washington de la fiesta de Diddy. Tenga en cuenta que este contenido es gráfico e inquietante. Sin embargo, analizar estos detalles es importante porque arroja luz sobre el nivel de degradación y decadencia moral necesarios para seguir el ejemplo de la élite de la industria del entretenimiento.

Aterrado. Traumatizado. Destruido. Esas fueron algunas de las palabras que Justin Bieber utilizó para describir su experiencia de crecer en la industria del entretenimiento, rodeado de tiburones, depredadores y luciferinos declarados.

Amigos de Justin Bieber advierten que él está profundamente angustiado, porque las experiencias más traumáticas de su vida fueron captadas en cámara y ahora están siendo difundidas en videos con fines de lucro, sin su consentimiento y a sus expensas.

Lamentablemente, en lo que respecta a Bieber, lo peor aún está por salir. English recuerda una experiencia traumática y describe cómo Bieber fue inmovilizado, incapaz de moverse y violado por Diddy, sus dos hijos y varios hombres más.

Hemos estado advirtiendo a todo el mundo que la edad de los acusadores de Diddy va a seguir reduciéndose y la lista de víctimas infantiles relacionadas con Diddy seguirá creciendo. La élite mundial, junto con figuras influyentes de la industria del entretenimiento, están decididas a fomentar una cultura que normalice la pedofilia.

Y es importante recordarlo: la red de Diddy era sólo una de muchas que operaban bajo el radar.

English describe la industria del entretenimiento como inquietantemente similar a El bebé de Rosemary, la película de Roman Polanski de 1960 en la que un ambicioso actor sacrifica a su esposa a Satanás, permitiendo que sea embarazada por fuerzas oscuras a cambio de éxito profesional.